”El anuncio del concello de Lugo, a bombo y platillo, de que pretende construir el primer cementerio para mascotas de Galicia ha indignado a algunos familiares de víctimas de la represión franquista que llevan mucho tiempo reclamando un monumento en el cementerio municipal de San Froilán, que recuerde a quienes fueron asesinados por la dictadura franquistatras el golpe de Estado de 1936, dado que sus familias no tienen un lugar  para recordarlos porque nunca dispusieron de sus cuerpos para poder enterrarlos dignamente.

     Con el apoyo de la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica (ARMH) se han reiterado sus exigencias a las autoridades municipales y a la  Valedora do Pobo sin que el ayuntamiento, que presume de su cementerio para mascotas, haya atendido debidamente las demandas de las víctimas del franquismo.

     Desde hace más de cinco años la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica (ARMH) lo lleva solicitando por petición de los familiares de las personas que fueron enterradas sin tumba en el desaparecido cementerio de Magoi en Lugo. La actitud del concello siempre ha sido la de mirar para otro lado desde la concejalía responsable de cementerios.

     El trato del Concello a las víctimas del franquismo lo define bien: el hecho de que las familias solicitaran permiso para llevar a cabo un acto en el cementerio el pasado 1 de noviembre y no les fuese concedido el permiso, como si las víctimas del franquismo fueran de segunda clase,  precisamente en el día en el que culturalmente se acude a recordar a los difuntos, como si aquellos que  sufrieron en sus familias las detenciones y asesinatos de los golpistas de 1936 fueran un estorbo social, y que por tal motivo,  tuvieron que celebrar el acto el día anterior.

     Ahora, que el teniente de alcalde Rubén Arroxo y la responsable del cementerio  Cristina  López han anunciado, como si se tratara de una primicia, que Lugo tendrá el primer cementerio de mascotas de Galicia, los   familiares de los desaparecidos lucenses por la represión franquista han   reavivado su indignación por sentirse ignorados por las autoridades municipales. El argumento de Arroxo para crear el cementerio de mascotas de 800 metros cuadrados, en cuyo proyecto llevan trabajando mucho tiempo, es que se trata de una propuesta que los vecinos llevan tiempo reclamando.

      Las familias de las víctimas del franquismo llevan casi cincuenta años de democracia esperando una mínima reparación y por lo visto van a tener que seguir mas tiempo esperando a tener un lugar en el que llorar y recordar a sus muertos.