diumenge, 24 d’abril del 2022

Esperanto y anarquismo: los orígenes (1887-1907). Javier Alcalde.

 https://conversacionsobrehistoria.info/2022/04/24/esperanto-y-anarquismo-los-origenes-1887-1907/


En Esperanto i anarquisme: els orígens (1887-1907), Javier Alcalde se adentra en un terreno prácticamente inexplorado: el de las relaciones entre el anarquismo y el esperantismo en las décadas anteriores al congreso mundial de esperanto de 1907, cuando ateneos, sindicatos y grupos anarquistas empezaron a adoptar resoluciones a favor del esperanto. El texto abarca desde las reflexiones dentro del socialismo utópico sobre la utilidad de una lengua universal hasta los debates en la Primera Internacional y luego en congresos anarquistas sobre el potencial revolucionario del esperanto. En décadas posteriores, ateneos, sindicatos y organizaciones anarquistas de distintas tendencias empezaron a ofrecer cursos de esperanto a sus militantes, y sus órganos de prensa a menudo publicaban secciones en esperanto. Para entender por qué el esperanto formó parte del repertorio cultural del anarquismo, no sólo en España, sino también en otros países, este libro es imprescindible.

 

 

Roberto Garvía*

Catedrático de Sociología.
Universidad Carlos III de Madrid

 

Hace escasamente diez años la literatura sobre el movimiento esperantista era muy escasa. Por un lado, y de forma prejuiciosa, se entendía a los esperantistas como un colectivo sin interés alguno: unos utópicos unidimensionales, monotemáticos y obsesionados con la absurda idea de que un lenguaje artificial podía ser de alguna utilidad. Por otro lado, estudiar el esperantismo supone superar unas barreras de entrada importantes: exige aprender la lengua -aunque esto solo lleve un par de meses.

En poco tiempo las cosas han cambiado radicalmente y son cada vez más los estudios académicos que se centran en el esperantismo, su diversidad y su impacto en otros movimientos sociales o ámbitos del conocimiento. Así, y por sólo citar trabajos de los últimos dos años, se han publicado trabajos importantes sobre el papel de los esperantistas en el desarrollo de la lógica formal[1]; sobre la influencia del esperantismo en el despertar político de George Orwell y la importancia del lenguaje como herramienta de propaganda política (de ahí el newspeak, otra lengua inventada)[2]; sobre el internacionalismo en el periodo de entreguerras, cuando, entre otras iniciativas, la Sociedad de Naciones se tomó seriamente la posibilidad de extender el esperanto como instrumento para desbaratar nacionalismos etnicistas y promover la paz[3]; sobre los debates en la Rusia postrevolucionaria acerca de las posibilidades del esperanto en el nuevo estado multiétnico y en la propagación de un internacionalismo revolucionario[4]; y sobre el cambio generacional y el estado actual del movimiento [5].

Esta contribución de Javier Alcalde es una muestra más de esta tendencia. El autor, doctorado por el Instituto Europeo de Florencia, y colaborador de Donatella Della Porta en investigaciones sobre movimientos sociales, ya tiene un amplio recorrido en trabajos sobre el movimiento esperantista[6]. Este nuevo trabajo es una versión corregida y ampliada de un artículo que publicó fruto de su intervención en un seminario organizado en la École des hautes études en sciences sociales de París en 2021[7].

En Esperanto i anarquisme: els orígens (1887-1907), Javier Alcalde se adentra en terreno prácticamente inexplorado. Contamos algunas referencias en distintas monografías que ya han tratado sobre la relación entre esperantismo y movimiento obrero en Madrid, Cataluña, el País Valenciano y el resto de España,[8] pero centradas en un periodo posterior, cuando el esperanto se había convertido en parte fundamental del imaginario colectivo de algunos sectores del movimiento obrero, en particular del anarquista. En este nuevo trabajo, el objetivo es explicar los orígenes de esta trabazón, desde sus inicios hasta 1907, dos años antes del congreso mundial de Esperanto que se celebró en Barcelona.

El texto es breve, con siete capítulos, incluyendo la introducción. En sus últimas páginas se añade una tabla cronológica, una sección de ilustraciones y un índice onomástico que lo hace más accesible. Las fuentes son muy diversas y, muy a menudo, se incluyen en las notas a pie de página las citas en su lengua original.

El capítulo 2 se centra en el socialismo utópico, que, al contrario que los “socialistas autoritarios”, los libertarios nunca desestimaron. En concreto, el autor se detiene en Fourier, Weitling y Cabet. Si los dos primeros consideraban que una lengua universal sería el resultado de una evolución natural, siguiendo los principios de la lingüística de la época, Cabet parecía tener una opinión distinta. En su Viaje a Icaria, ya aparecía la idea de que tal lengua bien podía ser planificada o artificial, fruto del ingenio humano y no de una evolución natural. En Icaria, las obras de la humanidad se habían traducido a una lengua perfectamente regular, fonética, racional y, así, fácil de aprender. En el capítulo 3 se relata cómo estas manifestaciones utópicas terminan convirtiéndose en objetos de discusión en congresos obreros. Así en los dos primeros congresos de la Primera Internacional ya se aprobaron resoluciones que insistían en la necesidad de construir una lengua artificial, como también ocurrió en el Congreso Cosmopolita (con fuerte influencia de los antiautoritarios), celebrado en Barcelona a finales del siglo XIX. Que fuera posible una lengua artificial, y que además estuviera al servicio del progreso y de la paz, como insistían los libertarios, era una idea que estaba en el ambiente. Así lo muestra, por ejemplo, Julio Verne (presidente de honor del grupo esperantista de Amiens al final de su vida). Según cuenta Verne, a bordo del Nautilus, no se hablaba la lengua de ninguna nación, sino otra armoniosa y flexible. El romanticismo, antiimperialismo y pacifismo del capitán Nemo no estaba muy lejos del ideario libertario, por lo que no es de extrañar esta afinidad. Estos capítulo nos sirven para entender, tal como subraya el autor, que antes de la aparición del esperanto, la idea de crear un idioma universal que pudiera acelerar lucha por la emancipación de la clase trabajadora era algo que ya estaba en la agenda del movimiento libertario.

Internacia Socia Revuo, n° 4, aprile 1907. Ilustración de Jossot: La laboro estas la libereco («El trabajo es la libertad»).

El capítulo 4 contextualiza los inicios del esperantismo, primero acogido por intelectuales como León Tolstói o el catalán Pi i Margall, así como por comerciantes, científicos, masones, grupos profesionales y religiosos. Es en esta época cuando ya surge una literatura original en esperanto. El capítulo 5 se detiene en los orígenes de los primeros grupos esperantistas obreros en Estocolmo, Holanda o Alemania. Son los libertarios franceses, sin embargo, vinculados al movimiento antimilitarista, los que dieron mayor impulso al esperantismo libertario. Así, tal como relata el autor, ya en 1905 se creó en París un Grupo Libertario Esperantista, que al año siguiente dio lugar a la internacional Paco-Libereco (Paz-Libertad), bajo cuya iniciativa, después del congreso internacional esperantista de 1906, se lanzó la revista obrera Internacia Socia Revuo (Revista Social Internacional). Con ello, y sobre todo por iniciativa de los jóvenes, se multiplicaron las clases nocturnas, los manuales adaptados a un colectivo sin apenas estudios y un tejido asociativo obrero esperantista en el seno de escuelas, sindicatos, ateneos, etc., lo que explica la aprobación de una resolución del esperanto por la CGT francesa y FORA argentina. (Lo mismo ocurriría pocos años más tarde en el congreso inaugural de la CNT).

En el capítulo 6, “Un punto de inflexión”, el autor se extiende sobre la proyección del esperanto en el aparato ideológico y táctico del movimiento libertario. Destaca en este capítulo la creación de la comuna libertaria, L’Experience, a las afueras de Bruselas, en cuya creación, el esperantista Émile Chapelier y su compañera Valentine David tuvieron una parte importante. También, en parte auspiciado por esta comuna, el autor relata los debates sobre el esperanto en el primer congreso internacional anarquista, celebrado en Amsterdam en 1907 y en discusiones posteriores, en las que intervinieron anarquistas que se posicionaron en contra del esperanto o cualquier proyecto de lengua artificial, como hizo Gramsci en campo comunista. Aun así, el vínculo entre el movimiento libertario y el esperanto se fue fortaleciendo. De ahí, como señala el autor, la fundación de la sociedad obrera (de predominio libertario) Paco kaj Amo (Paz y Amor), en Barcelona, y los inicios del esperantismo anarquista en China y Japón.

Miembros de la sociedad esperantista Pako kaj Amo de Barcelona en 1909 (foto: Todo Colección)

El capítulo 7 es una reflexión, sobre todo a partir de la obra de Chapelier, acerca de los componentes ideológicos que explican la ligazón entre anarquismo y esperantismo. Como una lengua democrática y fácil de aprender, el esperanto se entendía como una herramienta fundamental para evitar el liderazgo de los compañeros políglotas y burgueses en el movimiento internacional, quienes, aun bien intencionados, no conocían la experiencia del trabajo y las fábricas. Con el esperanto, compañeros de distintos países podían intercambiar experiencias comunicándose directamente sin necesidad de intermediarios. También, como una lengua neutral, el esperanto podía servir para contrarrestar la instrumentalización de las lenguas nacionales, puestas al servicio de proyectos de construcción nacional y de las burguesías nacionales, tentadas una y otra vez a provocar carnicerías en guerras patrióticas que, en realidad, sólo servían para mantener sus privilegios. Como una lengua neutral, en fin, el esperanto era un instrumento útil tanto para coordinar la acción revolucionaria como para sofocar las tentaciones belicistas de las burguesías nacionales.

El esperantismo es un movimiento con muchas aristas. En él confluían (y todavía confluyen) cristianos de todas obediencias, conservadores, nacionalistas, masones, librepensadores, todas las ramas del movimiento obrero, así como científicos, comerciantes y grupos profesionales. La ligazón de los libertarios con el esperantismo es sólo una parte, aunque especialmente importante en España, de este movimiento. En este libro Javier Alcalde nos relata la primera etapa de esta trabazón. Aunque posiblemente el estudio más sistemático de esta primera etapa, el libro sigue siendo aproximación a un tema extraordinariamente complejo. Queda todavía por indagar con más detalle aspectos que sólo se han tratado tangencialmente, como la relación de los esperantistas libertarios con los nacionalistas, las posiciones de distintas ramas del movimiento libertario con respecto a la posibilidad y eficacia de una lengua artificial, o las razones del abandono del esperanto a favor del ido (o “esperanto reformado” como se llamaba en España), por un segmento del movimiento libertario. El libro es, en fin, un buen punto de partida: nos presenta un mapa todavía a la espera de investigaciones más profundas.

Cartel del congreso obrero esperantista, Paris 1914, dibujo de Ludovic Rodo (imagen: nodo50.org)

[1] Başak Aray (2019) “Louis Couturat, modern logic, and the international auxiliary language”, British Journal for the History of Philosophy, 27, pp. 979-1001.

[2] Darcy Moore, “Orwell’s Aunt Nellie”, George Orwell Sudies, Vol 4, no.2, (2020). pp. 30-44.

[3] Von Malte König, “Esperanto in the Zwischenkriegszeit. Ein kosmopolitisches Projekt auf dem Prüfstand”, Historische Zeitschrift 314(1) (2022), pp.: 68-104; Carolyn N. Biltoft, A violent peace. Media, truth and power in the League of Nations, Chicago: University of Chicago Press, 2021; Jessica Reinisch y David Brydan (eds.) Internationalists in European history. Londres: Bloomsbury, 2021; Camilla Peruch, La lingua neutrale, Vittorio Veneto: Kellerman editore, 2020.

[4] Brigid O’Keeffe, Esperanto and languages of internationalism in revolutionary Russia. Londres: Bloomsbury, 2022.

[5] Guilherme Fians, Esperanto revolutionaries and geeks,  Londres: Palgrave Macmillan, 2021.

[6] “A special relationship: the Esperanto movement and pacifism in Zamenhof’s time” en Viola Beckman y Liliana R. Felerstein (eds.), Language as hope (Berlin: Hentrich und Hentrich, en prensa); “Pioneers of internationalism: Esperanto and the First World War” en Julian Walker y Christophe Declercq, Multilingual environments in the Great War, (Londres: Bloomsbury, 2021), pp. 44-57; Eduardo Vivancos y el esperantismo libertario (Serra de Tramuntana, Mallorca: Calumnia, 2019); “Vides paral·leles: esperanto i anarquisme als Països Catalans”, Kataluna Esperantisto, 2 (Diciembre de 2021), pp. 28-38; “‘Maro estas gutaro’: storia del movimento esperantista in Catalogna” Zapruder. Revista di storia della conflittualità sociales, 52 (2020), pp. 99-112

[7] “Vers une fraternité universelle: Vingt ans de debats autour de l’espéranto dans les milieux anarchistes (1887-1907)” Mil neuf cent. Revue d’histoire intellectuelle, 39 (2021), pp. 39-56;

[8] Francisco de Luis Martín, La cultura socialista en España, (Salamanca: Ediciones de la Universidad de Salamanca, 1993), pp. 231- 245; Francisco Javíer Navarro, A la revolución por la cultura (Valencia: Universidad de Valencia, 2004); pp. 85-99; Dolors Marin, Anarquistas. Un siglo de movimiento libertario en España (Barcelona: Destino, 2010), pp. 58-62; y Roberto Garvía, Lengua y utopía. El movimiento esperantista en España, 1890-1936 (Granada: Editorial Universidad de Granada), pp. 147-190.

Roberto Garvía https://portal.uc3m.es/portal/page/portal/instituto_figuerola/directorio/rgarvia

Reseña del libro de Alcalde Villacampa, Javier. Esperanto i anarquisme: els orígens (1887-1907). Barcelona, Malcriàs d’Agràcia, 2022, 89 págs, ISBN 9788409391417.

Fuente: Conversación sobre la historia

Portada: Clase de esperanto en la colonia comunista libertaria L’Experience, creada en Stockel-Bois, cerca de Bruselas por Émile Chapellier (foto: https://cartoliste.ficedl.info/)

Ilustraciones: Conversación sobre la historia