dilluns, 31 de gener del 2022

La vacuna que el franquismo no quiso distribuir: "No nos la dieron y estamos con parálisis de por vida".

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La polio afectó a unos 20.000 niños entre 1950 y 1963 en España, a pesar de que la vacuna ya existía y se distribuía en el resto del mundo. En Radio Lindo hablamos con Rosa Hernaz, que forma parte de la plataforma 'Niños y niñas de la polio', que nos cuenta las reivindicaciones del colectivo

Radio Lindo | La vacuna que el franquismo no quiso distribuir

18:56

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Madrid

En una época en la que la conversación sobre vacunas tiende a estar polarizada, y en la que España destaca a nivel mundial precisamente por sus altos niveles de vacunación, conviene recordar una época no tan lejana en la que el país estaba a la cola en estos procedimientos.

España tardó mucho, más de lo necesario, en administrar la vacuna de una enfermedad que afectaba principalmente a niños y que se cobró miles de vidas y que dejó secuelas en gran parte de la población: la poliomielitis.

La vacuna se descubrió en Estados Unidos, y comenzó a administrarse en el mundo en 1955. En España, sin embargo, no se empezó a vacunar hasta 1964, dejando así decenas de miles de niños con secuelas para toda su vida.

Una generación perdida

Una de esas niñas es Rosa Hernaz, que forma parte de la plataforma 'Niños y niñas de la polio', integrada por unas 400 personas de toda España. Ella acaba de aprender a andar cuando dejó de poder hacerlo: “De pronto comía muy poquito, y mi madre, como todas las madres, enseguida estaba alerta. Una mañana me va a levantar de la cama y yo me desplomo. Me llevaron corriendo al hospital y era polio”.

Rosa recuerda al niño que estaba a su lado cuando fue ingresada, un niño que murió a las pocas horas de que ella llegara: “La polio afectaba a los pulmones, en los hospitales estaban esperando a que se recuperase un niño un poquito para sacarlo del pulmón de acero y poner a otro”.

La imagen de niños y niñas en aquellas cajas metálicas que les ayudaban a respirar, los pulmones de acero, es de las más escalofriantes de aquella pandemia, que solo fue erradicada una vez se pusieron en marcha campañas de vacunación.

La vacuna significó la vida

La plataforma ‘Niños y niñas de la polio’ reclama la tardanza en la vacunación por parte del régimen franquista, por eso no entienden, cuenta Rosa, el rechazo que existe hoy en día, 60 años después, a una vacuna que, igual que entonces, ha salvado la vida de incontables personas. “A nosotros no nos dieron la vacuna y fíjate cómo estamos, con parálisis de por vida”, lamenta, “y eso existiendo la vacuna”.

La distribución de la misma, una vez llegó al país, fue más que deficiente: “Hablé con uno de los doctores que hizo la campaña de vacunación, y decía que llevaban la vacuna con burros y neveras de las antiguas botellas de Coca-Cola a los pueblos. Cuando querían llegar esa vacuna estaba caducada”.

“Tampoco siguieron las dosis indicadas, el primer año sí, pero en el siguiente ya nada”, añade, señalando además que la versión que se compró en España era diferente de la original, una versión más barata.

Reclamaciones justas

Lo que se pide por encima de todo es el reconocimiento de esta generación, cuyas demandas han sido incluidas en la ley de Memoria Histórica que está por aprobar. Aun así, reclama Rosa, “Franco no nos hizo caso, desde la democracia son todo promesas, pero a la hora de la verdad no vemos resultados”.

Lo que piden es rehabilitación muscular, ya que la falta de ello agarrota sus músculos y hace que sufran fibromialgias muy a menudo, y evitar que su tratamiento se reduzca a mediación para el dolor: “La rehabilitación va por comunidades, en la Comunidad de Madrid no te dan absolutamente ninguna, nos mandan directamente a la unidad del dolor”.

La poliomielitis afectó a más de 20.000 personas solo en España entre 1950 y 1963, según los datos del Instituto de Salud Carlos III. Este domingo 30 de enero se celebra en Madrid un concierto por los olvidados de la polio, en el centro cultural El Pozo del tío Raimundo, con actuaciones entre otros de Salvador Amor, Javier Batanero, Marta Espinosa o Manu Clavijo.