diumenge, 18 de novembre del 2018

Mujeres Libres, luz sobre los orígenes del feminismo anarquista español

http://www.diariodeteruel.es/noticia.asp?notid=1010212&secid=6&fbclid=IwAR1Guxh2yOFRoRtBbBaetIC5bLe4AyrVxAy0RqogKHS_TCD5vfI4LrBw--U

16/11/2018


Una exposición narra el desarrollo de una organización que superó las 20.000 militantes
Miguel Ángel Artigas
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Fotografía de uno de los Congresos de Mujeres Libres que abre la exposición que puede visitarse en Santa Emerenciana. M. A.
Fotografía de uno de los Congresos de Mujeres Libres que abre la exposición que puede visitarse en Santa Emerenciana. M. A.
Mujeres Libres fue una asociación feminista fundada en 1936 por la escritora Lucía Sánchez Saornil, la periodista Mercedes Comaposada y la doctora Amparo Poch y Gascón. Vinculada al anarcosindicalismo de CNT, puso al mismo nivel la emancipación de la mujer que la liberación de la clase obrera o que la derrota del fascismo tras el comienzo de la guerra civil, lo que le valió numerosas críticas desde otras organizaciones de corte revolucionario. Rechazó integrarse en la Asociación de Mujeres Antifascistas para no sacrificar ninguna de sus reivindicaciones de género, y en su ideario había planteamientos que incluso hoy, ochenta años después, siguen generando controversia, como los métodos anticonceptivos y el aborto dentro de las materias curriculares en la educación, la jerarquía patriarcal en las familias o la prostitución regulada con atención médica y psicológica a las prostitutas, con el objetivo de dotarlas de medios económicos para abandonar esa práctica.
A esta organización se dedica la exposición Mujeres Libres (1936-39). Precursoras de un nuevo mundo, muestra organizada por CNT Teruel y su fundación Anselmo Lorenzo de Estudios libertarios y CGT Teruel, y que puede verse en la Residencia Santa Emerenciana de la capital hasta el 23 de noviembre.
La exposición consta de varios paneles interpretativos sobre los antecedentes, el contexto y la historia de Mujeres Libres, un audiovisual y tres documentos sonoros con la recreación de otras tantas emisiones radiofónicas de mediados de los años 30. Y para ser expuesta además en Teruel ha incorporado además dos esculturas en forja del artista turolense José Antonio Córdoba, con la mujer como sujeto expresivo. 
La muestra se creó originalmente hace tres años para la sede de la Fundación Anselmo Lorenzo en Madrid, y desde el pasado mes de abril ha itinerado por Extremadura, Cantabria o País Vasco o Barcelona, y tras clausurarse en Teruel el próximo 23 de noviembre viajará a Alicante. 
Incorpora además una serie de paneles sobre la misma temática de CGT Teruel, que pueden verse también en la sala Pascual Berniz de la Residencia Santa Emerenciana. 
Feminismo libertario
A pesar de que la exposición se centra en la organización Mujeres Libres, conceptualmente arranca más de cincuenta años antes, ya que como señalan Laura Vicente, experta en feminismo anarquista o José Manuel Conejero, miembro de CNT Teruel y comisario de la muestra en nuestra ciudad, Mujeres Libres recogió una herencia y un desarrollo ideológico muy anterior, del que fueron pioneras Teresa Mañé y Teresa Claramunt. También es de justicia admitir que las corrientes feministas no pasaron necesariamente por el anarcosindicalismo; hubo organizaciones feministas revolucionarias comunistas, socialistas o republicanas, así como feministas burguesas –más conservadoras– e incluso feministas católicas, como la turolense Áurea Lucinda Javierre (1898-1980). Sin embargo la historiadora y escritora Laura Vicente mantiene que “corrientes ideológicas como el anarquismo fomentaron en mayor medida que otras ideologías revolucionarias movimientos, en su seno, como el feminismo o la ecología, por ejemplo”, debido a que por su naturaleza el anarquismo no se centraba únicamente en la emancipación obrera. No obstante, Mujeres Libres insistió en permanecer autónoma con respecto a la CNT, AIT o FIJL, e incluso sus precedentes en el feminismo anarquista situaron siempre la lucha de género en un primer plano. “La propia Teresa Claramunt empezó un mitin de la CNT en Zaragoza diciendo: ‘Mal empezamos, porque aquí lo que faltan son vuestras mujeres”, explica José Manuel Conejero. 
La aragonesa Amparo Poch, Lucía Sánchez Saornil y Mercedes Comaposada fundaron en 1934 la revista Mujeres Libres, portavoz de la Federación Mujeres Libres, como una revista escrita por mujeres para despertar la conciencia de las mujeres, y donde los hombres, a excepción del ilustrador Baltasar Lobo, tuvieron vetada su colaboración. En mayo de 1936 apareció el primer número, poco antes de que surgiera la agrupación con el mismo nombre producto de la fusión de Mujeres Libres de Madrid y el Grupo Cultural Femenino de Barcelona. 
Además de un trabajo de concienciación y propaganda, el colectivo puso en marcha comedores colectivos, cursos de alfabetización, enfermería y puericultura y escuelas para enseñar a las mujeres a conducir tranvías o camiones, de especial utilizada en los Servicios de Sanidad en la retaguardia durante la guerra civil. 
En su ideario se recogía la necesidad de abolir la prostitución no mediante legislación, sino a través de la formación de las mujeres para que tuvieran alternativas económicas para mantenerse a sí mismas y a sus familias, así como la concienciación de los varones de la incoherencia revolucionario que suponía esa práctica; el papel principal de la mujer en el control de la natalidad; o el germen de la liberación sexual, conceptos que hoy en día siguen siendo cuestionados y que, desde luego, lo fueron en la época. “Esos planteamientos chocaban con la mentalidad de la época mucho más que ahora, y algunos de ellos eran difíciles de aceptar y, sobre todo poner en práctica, incluso por los compañeros anarquistas”, explica Conejero, que añade que “Teresa Claramunt y, sobre todo Teresa Mañé, tuvieron suerte a la hora de encontrar un compañero con la misma ideología”. 
Sin embargo los avances que logró Mujeres Libres en cuanto a concienciación de la mujer se detuvieron en seco en 1939, con el final de la guerra y el exilio de la mayor parte de los cuadros directivos de la organización. “El franquismo retrotrajo todos los avances sociales” y la conciencia feminista, también, volvió a  niveles muy por debajo que los que existieron en tiempos de la II República. 
La mujer turolense
La exposición permanecerá en Santa Emerenciana hasta el 23 de noviembre, y es posible concertar visitas guiadas llamando al 616 129 116. Forma parte del ciclo del mismo título organizado por CNT Y CGT, que ha traído a varios conferenciantes a Teruel para hablar sobre el tema. La última conferencia tendrá lugar el miércoles 21, correrá a cargo de Serafín Aldecoa y llevará por título Movilización Política de la Mujer Turolense: República y Guerra Civil (1931-1938).