dijous, 7 d’octubre del 2021

Historia de la Represión en Cantabria.

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Quisiera explicar someramente como ha surgido este trabajo que les presento. La Memoria Democrática ha sido, casi podría decirles, que obsesión confesa en mi vida. No por el gusto morboso de hurgar en el pasado sino como forma de entender el presente y de alguna manera intentar crear un viento a favor del futuro. 

59826510_10216722877977978_3286259639162765312_nHe asistido a muchas jornadas sobre Memoria a nivel estatal con gran interés, incluso he colaborado con alguna de ellas. Desde hace años soy miembro de AGE (Archivo, Guerra y Exilio)…Cuando recibimos el enorme mazazo de la muerte de Chato Galante, a quien desde aquí rindo homenaje sentido, a nivel personal y social sentimos muchas que debíamos seguir con la tarea de hacerles justicia. Y de prepararnos un futuro bien explicado y limpio. Pocas personas han batallado más y mejor por hacernos llegar la lucha por la justicia como él. Como decía, hablando un día con la compañera, Elsa San Miguel sobre el homenaje que estaba organizando a Chato, se me ocurrió la idea de que hablábamos mucho de Memoria a nivel estatal y poco o nada a nivel de nuestra tierra. Cantabria.

Por una situación personal y familiar estuve cerca del otro bando. Del de los que detenían, torturaban y acallaban la voz del pueblo. Pude escuchar y ver la trastienda (en pequeñas dosis, no me piensen una Mata Hari de la Transición, (que más hubiera querido yo) Escuchaba, como les decía, conversaciones, llegaban historias a mis oídos  que me dejaban sin aliento y creo llegado el momento de explayarme contando lo que oí, junto con las investigaciones y la ayuda inestimable que he contado por parte de José Ramón Saiz Viadero, maestro, amigo, mentor y mucho más. También de Jesús Gutiérrez Diego, la inestimable colaboración de Desmemoriados, de José Luis Pajares y de tantas personas que han colaborado en esta recopilación sobre  Memoria Democrática de Cantabria. 

descarga-1-7Se nos dice que nuestra tierra es zona derechizada, poco combativa y tienen razón. Somos el dique entre dos zonas altamente conflictivas y luchadoras como Euskadi y Asturias, tal que si ambas nos hubieran arrinconado en la parte derecha de la historia parece que nuestra contribución al sistema democrático no fuera nombrable. No negaré que es cierta nuestra pasividad, pero ni tanta como parece ni como quieren que parezca.

Los movimientos sociales han estado ralentizados quizá debido a no ser una comunidad con potencial industrial,  carecer de universidades durante los años duros del combate antifranquista. Tan solo Magisterio y Enfermería porque Medicina comenzó en el 73. Cualquiera de ellas no eran especialmente problemáticas;  los/as estudiantes cántabros no se metían en líos, según acepción de la época. Las universidades vecinas a donde llegaban los/as cantabras, sí lo eran. Valladolid, o Bilbao acogieron a nuestros estudiantes.

Antes de seguir por esos años, incidiré que los primeros movimientos políticos se hicieron en nuestra región debajo de las sotanas…Es decir, dentro de los movimientos cristianos de la HOAC, que fue simiente de grandes luchadores/as que  comenzaron su andadura bajo el auspicio que proporcionaba la iglesia.

La HOAC fue creada en 1946. Pretendía realizar una labor evangelizadora en las capas obreras de la sociedad. El catolicismo estaba cambiando lentamente, hasta la llegada del impulso que supuso el Concilio Vaticano II que llegaría a finales de los años 50.

En la HOAC se gestó un cierto descontento con la dictadura, que lentamente fue infiltrándose de las teorías políticas proscritas. Lentamente fueron llegando las teorías marxistas a la gente preocupada por la justicia social, dando respuesta a lo que el cristianismo no daba.

descarga-2-3La iglesia Católica ha sido fundamento para la unificación de la España querida por el patriotismo  nacionalista y españolista. Los sublevados ante la República abogaban por el mantenimiento de las esencias patrias, resguardadas en al catolicismo integrista tridentino, en la corona, como símbolo identitario de la patria y en el ejercito que aglutinaba las formas de vida precisas para ser buen español: disciplina, sumisión al jefe, escalafón de mando que se subía con sacrificio y respeto a una normas impuestas. Frente a la ideología tradicionalista, representada por diversos partidos como Acción Española, Tradicionalistas, herederos directos de un carlismo decimonónico, que poco a poco se infiltraba de los cantos de sirena que emergían del fascismo y del nazismo europeo.  Todos los movimientos derechistas remaban en la misma dirección pero no buscaban los mismos fines.  La Falange, fundada por José Antonio Primo de Rivera, era considerada un tanto pija por los más combativos de las Juntas Ofensivas Nacional Sindicalistas con el espíritu intelectual de Onésimo Redondo, y el más brutal de Ramiro Ledesma Ramos. Los pequeños  partidos que formaron en sus diversas ramas el fascio español, quedaron unificados después de la guerra bajo el mando único de Falange Española de las JONS.La idea de una España pegada a las tradiciones medievales regida por la Corona absolutista y guiada por una iglesia tridentina quedaba atrás  a finales de la década de los cincuenta debido, exclusivamente, a problemas económicos, no sociales.

DcNRti1W4AAo2_hLa autarquía implosionó, a la Dictadura no le quedó más remedio que girar el timón hacia la tecnocracia impulsada por el Opus Dei. Una iglesia conservadora pero educada que abandonó las raídas sotanas tridentinas y las tinieblas del confesonario por los trajes hechos a medida y las firmes pisadas bancarias y empresariales.

Seguíamos en dictadura pero había que abrir fronteras al turismo que se erigía como nuevo Eldorado nacional. Tocaba también industrializar un país casi medieval en su economía. Construcción y automóviles, turismo, hostelería y poco más, eran el tejido consistente de un país que se arrastraba por la autarquía y una falsa modernidad.

Una nueva casta de tecnócratas y de empresarios avezados, con poca formación surgía por el suelo patrio. Se comenzó a triturar la costa mediterránea realizando construcciones anárquicas cuyo fin era el enriquecimiento rápido y sin mesura. Hoy contemplamos, entre la tristeza y la total desolación, en que ha quedado ese turismo de charanga y pandereta que forjó riqueza para unos pocos, desastres ambientales y paisajísticos brutales y poco más para la mayoría. Los pueblos fueron invadidos de chiringuitos horteras y de despelote, pero la democracia seguía sin aparecer.

La dictadura era consciente del peligro que suponía abrir fronteras, por eso formó a sus perros descarga-3-4guardianes con fieras técnicas. Se trataba de amordazar a un pueblo que se abría al exterior. De hacer trabajar a unos obreros apenas sin derechos pero manteniendo unos mínimos que evitaran cualquier desmadre. Pura y genuina tecnocrática opusina. Los nuevos amos de la dictadura, los trajeados hombres del Opus, que ofrecían una imagen de orden, una religiosidad silente frente a las bravatas de los fascistas de la primera ornada. Estos eran más finos, más presentables en el mundo al que España pretendía subyugar.

El Partido Comunista, abandonó a mediados de los años cuarenta la lucha guerrillera. El cambio se produce cuando Stalin recibe a Pasionaria y Santiago Carrillo en Moscú y les explica el cambio de estrategia. Europa ha sido repartida, el bloque occidental, al que pertenece España, tiene bomba atómica. La URSS no, por lo que el bloque soviético opta por mantener el status quo de la postguerra. Corre el año 1947, 48

2008-12-29_img_2008-12-22_02-01-12__1243799Es preciso olvidarse de la liberación española, hay que abandonar la lucha armada y los sueños de invasión. A raíz de ello Pasionaria y Santiago Carrillo se reúnen con los enlaces de la guerrilla del norte, con el fin de desactivarla. Los sueños de los del Monte se rompen por la guardia civil que los persigue sin tregua  pero sin duda por el cambio de táctica del partido del que dependen.

Quedan pocos, en Cantabria, tan solo la diezmada partida de la Brigada Malumbres, que ha dejado a Juanín y Bedoya como últimos exponentes de la heroica lucha guerrillera. Cuando caen ambos, se acaba la guerrilla en nuestro país. Anteriormente, en 1944, se había abandonado a su suerte a la heroica invasión del Valle de Arán por el olvidado y a mi juicio personaje legendario, Jesús Monzón, que al frente de 12.000 hombres de la Unión Nacional Española, pretendía la reconquista de España, con el apoyo de los aliados y del pueblo español. Hazaña poco estudiada y que supuso un susto importante para el franquismo pero que el abandono de los aliados y sobre manera de los dirigentes de Moscú, condujeron al fracaso. Un sueño que estaba muerto antes de nacer…

La II Guerra Mundial había terminado hace tiempo, Stalin aceptó la división de bloques, España descarga-7-2vuelve a quedar abandonada de ambas potencias. Los occidentales, toman a Franco como un mal menor, muro de contención del comunismo y los orientales se ven satisfechos con la parte que les toca en el reparto. La democracia y los demócratas españoles vuelven a quedarse solos. Abandonada la lucha armada, la militancia –amparada por la cúspide del PCE- que mal informado de la situación real española alienta la idea  ,o se refugia en la idea, de la huelga general que parará al país, derrocará a Franco y abrirá los puentes y las avenidas. Muchos militantes, gente valiosa y heroica dejaron la vida, la salud, la familia y sus pertenencias para trabajar por esa idea. La frontera se permeabiliza un poco para las infiltraciones desde Francia. Y Radio Pirenaica sigue insuflando esperanza…

Los agentes del PCE del interior entienden rapido que la dictadura ha llegado para durar. El apoyo internacional con la visita del Eisenhower  ahoga esperanzas. Ante la  dura realidad los comunistas españoles deciden organizarse dentro del sistema. Las luchas obreras comienzan por la soga que supone la autarquía con unos sindicatos verticales vicarios del empresariado y este a su vez, franquista hasta la medula.

descarga-10-2En 1960, jóvenes que participan en el congreso cristiano de las JOC, fundan la Unión Sindical Obrera. Antes, en 1957, en la mina La Camocha ante una huelga de mineros nace el germen de lo que sería las Comisiones Obreras.  Son creadas a partir de dos patas fundamentales, una la comunista y otra la cristiana que sale de la HOAC.

Al principio la dictadura no presta demasiada atención a estos sindicalistas, en el convencimiento de ser absorbidos por el Sindicato Vertical, pero conforme avanzan los años ocurre al revés. La gente de Comisiones va copando las elecciones a enlaces sindicales hasta arrinconar al cipayismo vertical. Entonces llega la represión, las detenciones indiscriminadas, de sindicalistas.

En Cantabria los fundadores del sindicalismo libre son Ramón Peredo, Alfredo Saiz Pacheco, Manuel Gonzalez Morante, por la parte cristiana y el comunista José López Coterillo.

El primero de Mayo de 1966 se manifiestan (quizá decir manifestarse es demasiado…se reúnen, podría ser  más exacto) en los Pinares del Sardinero 500 manifestantes, estando el Obispo Puchol entre ellos.

Llegan los tiempos de los curas rojos, los curas obreros que tienen larga tradición en el resto de 1_mayo_1978_Pinares_SardineroEuropa. En España alientan aires de libertad los sacerdotes salidos de pueblos, hijos de obreros o campesinos que han escuchado la voz del Concilio Vaticano II y la del papa Juan XIII que alienta un cristianismo de rostro humano,  a la vez que se abren las puertas de las iglesias a las concentraciones de protesta o meramente informativas. No olvidemos que el Concordato vigente, declara la total impunidad de las iglesias, es decir, son intocables. Ese es el motivo de que los manifestantes terminen refugiándose en ellas, aunque como vimos en los sucesos de Vitoria, las fuerzas represoras se saltaban  el Concordato cuando les aprietaban las ganas de reprimir.

descarga-12-3La gente mayor que me escucha o me lee, recordará las pintadas que adornaban los muros de los edificios, también en Cantabria: “Curas rojos a Moscú”  y el famoso “Tarancón al paredón” Incluso hay una anécdota curiosa, que se produce en la iglesia de Santa Lucía, cuando el cura, de los llamados progresistas, está diciendo su homilía hablando de la injusticia que padecen los trabajadores. Al momento es interrumpido por un conocido ultraderechista, carlista antiguo, que le increpa con  saña.

Fueron años oscuros en los que se luchaba de forma clandestina, con la suficiente discreción como para no dar luz a unos hechos que podían costar la vida, la libertad y la salud.

En Cantabria Comisiones Obreras es fundada en 1964, según nos cuenta la investigadora Consuelo Laiz, que realizó un trabajo para su tesis doctoral basado en el sindicalismo cántabro. En 1966-67 son  años reivindicativos con lucha en las empresas Cuétara, Sniace, Standard. En 1968 Comisiones Obreras es declarada ilegal y el régimen comienza su lucha encarnizada contra la militancia sindicalista.

En Cantabria se detiene a  Eduardo Obregón, catedrático que había dado una conferencia en un local de la HOAC, sobre ateísmo marxista. En ese mismo año hay una redada en la casa de Veridiano Rojo y de Carmen Zapata, hermana y cuñado de Matilde Zapata, periodista fusilada y esposa de Luciano Malumbres. Tengo una amiga que era vecina de la casa de la familia en un barrio de Cueto, que cuenta el espanto que produjo la invasión de la policía. Desalojaron todo el edificio de casas modestas del barrio, destrozando el humilde hogar de la familia Rojo/ Zapata. Descerrajaron puertas, rompieron muebles, ropa, destrozando todo a su paso. En la casa encontraron una multicopista, una máquina de escribir y el nuevo número de Mundo Obrero que el matrimonio imprimía en su hogar.

Veridiano Rojo y Carmen Zapata fueron detenidos. Él torturado con saña por la Brigada Político descarga-13-3Social de nuestro personaje estrella, el Billy el Niño de Cantabria, el comisario SolarVeridiano Rojo que era policía municipal, quedó con graves secuelas por  las torturas padecidas en Comisaria. Las denunció, siendo condenados los agentes, Solar, Cuervo, Haya y Cabezas a unos pocos meses de suspensión de  empleo y sueldo.

En ese tiempo el obispo de la ciudad, Monseñor José María Cirarda, publicó una nota de apoyo a miembros de la HOAC que estaban siendo detenidos e investigados. Fue una nota dura para los tiempos que corrían. Más tarde, Cirarda, siguió enfrentándose a la dictadura hasta que lo represaliaron.

También  dejaron secuelas físicas y psíquicas al pintor y ceramista cántabro Miguel Vázquez detenido en 1959, a su regreso del Congreso de Praga, como militante del PCE. Fue encarcelado durante varios años y torturado con saña. Convivió en los duros años de cárcel con Marcos Ana,  José Hierro, Ibarrola, Antonio Bedia, Antonio Zapata.

En los últimos años del franquismo, la reacción ante la tímida apertura política se hizo notar en todo el país, también en nuestra tierra. En cada manifestación democrática o sindical había que contar con la visita de los Guerrilleros de Cristo Rey, que portaban bates, cadenas y se  suponía, que muchos de ellos también, armas de fuego.

descarga-15-2En todo el estado se calcula la cifra de cerca de seiscientas personas que cayeron por terrorismo ultraderechista. Como ejemplo sirva la Semana Negra de Madrid, que fue del 23 de Enero hasta el 28, del año 1977. Comenzó la sangría el día 23 con el asesinato de Arturo Ruiz, simpatizante de CCOO que se manifestaba, recibió un disparo de Fernández Guazo, guardaespaldas de Blas Piñar, el conocido dirigente de Fuerza Nueva. Al día siguiente el GRAPO secuestra al general Villaescusa. El día 24 muere Mari Luz Nájera del impacto producido por un bote de humo. Esa misma noche se produce la terrible matanza de los abogados laboralistas de Atocha. Como colofón a la semana trágica, el día 28 de Enero, caen abatidos dos policías y un guardia civil por las balas de militantes de Fuerza Joven.

Recuerdo aquellos días con la sensación de que nos abatía el plomo espeso de una bacanal de violencia. Eludía encender la televisión porque a cada momento saltaban las terribles noticias.

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María Toca Cañedo.


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En Cantabria teníamos a nuestros facciosos un tanto descafeinados, como es todo en nuestra tierra, pero no por ello menos activos ni violentos.

Durante los primeros años que se sucedieron a la muerte del dictador, se pusieron artefactos explosivos en diversos kioscos de la ciudad donde se vendían revistas con desnudos, como Interviú… considerada por ellos pornografía. También se pusieron artefactos en el cine Roxy y Mónaco por el mismo motivo ya que ambas salas se dedicaron a un tipo de cine prohibido hasta entonces,  que había propiciado viajes a la vecina Perpignan. Los atentados contra librerías eran constantes. La regentada por José Ramón Saiz Viadero, recibía la visita de los terroristas con frecuencia, rotura de escaparates, cócteles Molotov que en algún caso afectaba a los vehículos aparcados cerca, como el destrozo ocasionado en el Dos Caballos, de la compañera de RamónViadero, Vera Fernandez de la Reguera.  Por supuestos todos los atentados quedaban en total impunidad por la complacencia, si no, complicidad de las fuerzas de orden público con los atacantes. Pensemos que no se depuró en ningún momento. Los mismos policías y guardias civiles que habían estado en la dictadura se “adaptaron” al sistema democrático con pocas ganas. 

Imagen 2A nivel judicial, ocurría lo mismo. Los Tribunales de Orden Público, herederos a su vez de los Tribunales de postguerra, se disolvieron a nivel de nomenclatura pero los jueces no fueron depurados ni reeducados. Se acostaron un día siendo jueces del TOP y se levantaron como titulares de la Audiencia Nacional. Jamás se les dio formación democrática, jamás se les intentó integrar en el sistema con una reeducación. Las fuerzas de orden y las de justicia se habían formado durante el franquismo con la carga ideológica fascista quedando asimilados en democracia. Ni depuración, ni reeducación. Lógicamente, respondían con afecto a cualquier movimiento ultraderechista y con ardor violento al izquierdismo. Hay un artículo publicado en https://www.lapajareramagazine.com sobre los crímenes perpetrados en estos años por policía y ultraderecha que nos da un número cercano a las seiscientas víctimas…Prácticamente nadie pagó por esos crímenes y si lo hicieron fueron penas irrisorias.

Como ejemplo sirva lo ocurrido en el crimen de Almería. Este sangrante caso comienza a gestarse cuando tres jóvenes residentes en Cantabria emprenden viaje para asistir a la primera comunión del hermano de uno de ellos, Juan Mañas, en Pechinas, Almería. Ese mismo día ETA realiza un atentado estallando una bomba en el coche donde viajaban Joaquín Valenzuela, jefe del cuarto militar del Rey.  A Juan Mañas, Luis Montes y Luis Cobo, los tres jóvenes viajeros, se les estropea el coche que conducen y deciden hacer una parada para arreglarlo y mientras marchan a tomar un café. El camarero que les sirve les confunde con los terroristas del atentado cuya foto ha salido en la televisión, avisa a la Guardia Civil que emprende la persecución de los jóvenes. Son detenidos en Roquetas de Mar y llevados a un cuartel abandonado en el Cabo de Gata. No tienen antecedentes, no van armados, no ofrecen resistencia. Lo que pasó entre los muros de ese cuartel lo guarda el silencio del horror, lo cierto es que los cuerpos de los jóvenes aparecen horas después acribillados, mutilados y abrasados en un descampado de la carretera. En los cuarteles de toda España, a las pocas horas de presentada por radio la requisitoria de la detención de los muchachos, se lanza otra consignando que era un error,  asegurando que los jóvenes de Cantabria no eran los etarras buscados…pero ya debía de ser tarde porque el furor de violencia y la borrachera de odio había acabado con la vida de los tres jóvenes. 

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Las explicaciones que dio el ministro Juan José Rosón fueron confusas, desde el primer momento todo suena a falso, a ocultación de pruebas. Fue el tesón de la prensa y del abogado de la familia (Darío Fernández, tuvo que vivir más de un año escondido por las amenazas de muerte que recibía) los que consiguieron llevar a juicio a once guardias civiles. Se condenó a tres de ellos, el Coronel Carlos Castillo Quero, jefe del operativo, que se le condenó a 24 años de los que cumplió apenas ocho en una cárcel privilegiada. El teniente Manuel Gómez Torres, a seis años, y el guardia Manuel Fernández Llamas, a cuatro. Se les condenó por homicidio con el eximente y atenuante de cumplimiento del deber y obediencia debida. Años después en 1999el País publicó que durante años se les había pagado a los tres condenados con fondos reservados. Ni Mariano Rajoy ni Pedro Sánchez han contestado jamás a las preguntas sobre si ese hecho es cierto.

Han pasado cuarenta años, nadie ha reconocido lo ocurrido, ni repuesto el honor de los asesinados.  Juan Mañas, tiene un pequeño monolito en su pueblo, y una plaza con su nombre…Hace tres años el Parlamento de Cantabria rindió sentido homenaje a los tres jóvenes.

 

Imagen 4Indultos, perdones o simplemente ocultación de pruebas hizo que los cachorros de ultraderecha y las fuerzas de seguridad del estado camparan a su antojo por nuestra ciudad que tuvo el “privilegio” de convertirse en paraíso para los Guerrilleros de Cristo Rey y demás grupos afines.

A estos cachorros del fascio,  se les empezó a tomar en serio cuando explosionaron un artefacto consistente en la sede del PCE de Santander, con motivo de la visita de Santiago Carrillo a la ciudad. Fue una bomba de considerables proporciones que destrozó la sede y afectó al edificio donde se asentaba, en la calle Alcázar de Toledo.  La policía detuvo a los integrantes de los comandos negros que habían campado por la ciudad a su antojo con la complicidad de las mismas fuerzas del orden. 

Los principales cabecillas de los atentados fueron, Miguel Fuentes, que regentaba una tienda de electrónica en la calle Cisneros y  mantenía lazos fraternos con Blas Piñar, tanto que este le apadrinó su sexto hijo, así como también era amigo personal de Emilio Hellín Moro, el asesino de  Yolanda Gonzálezy posterior asesor policial, cuyo caso mediático recordamos, colaborando con el abogado de Cristina Cifuentes.Imagen 5

Miguel Fuentes, fue detenido con motivo del atentado al PCE aunque su militancia violenta era bien conocida en la ciudad. En 1989 le asesinaron en Medellín  los capos de la droga. En la prisión santanderina coincidió con uno de ellos trazando relaciones comerciales con el mismo. Miguel Fuentes viajó repetidas veces a Colombia para   realizar trabajos de electrónica a fin de que los capos se comunicaran entre si y mantuvieran el control de los alijos. Fue tiroteado debido a que se le suponía confidente de la policía española. Su hermano se trasladó a Medellín para repatriar el cadáver pero nadie le pudo aclarar lo sucedido. Es altamente probable su colaboración con la policía incluso mucho antes de la entrada en prisión. Las camadas fascistas de la época, además de su conducta violenta contra cualquier izquierdismo, eran en su mayoría soplones de la BPS,  colaboraban estrechamente con ellos. La doble vara con que se castigaba al terrorismo de izquierdas o de derechas queda trasparentada por la situación de privilegio y total impunidad con que operaban estos radicales de la ultraderecha.

Imagen 6Otro señalado ultraderechista santanderino fue, José Sáez Carrasco (Godofredo) jefe de Fuerza Nueva local,  referente en cualquiera de las manifestaciones de honra al viejo caudillo. Recuerdo que me contaban unas tías mías, vecinas suyas, su amor al desfile militar como ensayo del servicio a la patria,  pasillo arriba y abajo a las órdenes de su padre, franquista también. La pesadilla del uno dos, media vuelta, que contaban mis  tías se paliaba con las risas que producían los desfiles y el consiguiente choteo que le hacían…El bueno de Godofredo murió en 2011 de cáncer de páncreas. Siempre fue fiel a sus ideas franquistas.

Fueron detenidos también por el atentado a la sede comunista, José Manuel Mochales Oria, José Benito Gutiérrez Aja, y Mariano Casal Calvo, desconozco la trayectoria de estos últimos.

Hubo más destacados ultraderechistas en nuestra tierra. Se habló en los mentideros políticos de un personaje que llegó a ser alcalde santanderino… En los años setenta su padre tuvo que enviarle rápidamente a Londres, debido al carácter violento y al gusto que tenía de lanzar cadenazos a los manifestantes debajo de las siglas de los Guerrilleros de Cristo Rey. Militó y milita (hoy es senador) en ese partido político que ustedes saben y que suele llenar titulares hablando de terrorismo…Hace pocos tiempo, su cachorro, fiel a la tradición familiar increpaba y escracheaba a Miguel Ángel Revilla cuando salía de comer en un restaurante de Castelar, puro en mano.

 

Hagamos, de nuevo,  un poco de historia nacional. Roberto Conesa entró en la Policía en 1939, fue preparado profesionalmente  por la Gestapo. José Carlos Clemente cuenta lo siguiente  en sus Imagen 7Historias de la transición: el fin del apagón: “Hay muchos testimonios que dicen que Winzer, uno de los jefes de la Gestapo aquí en España, estuvo presente durante las torturas de la BPS durante los 40. Posteriormente la BPS recibe formación de la CIA, FBI y del Mosad. Muchos de los policías torturadores viajaron en los años 50 a EEUU con el fin de recibir formación para interrogar a detenidos”

Todo esto lo narra con detalle también,   Antoni Batista en su obra La carta: historia de un comisario antifranquista, lectura muy recomendable para conocer el origen de la psicopática policía de la Dictadura.

En las dependencias de la policía, la temida BPS, se torturaba de forma sistemática a los detenidos. Nuestros Billy el Niño o Conesa nativos los he nombrado anteriormente entre ellos estaba  el sádico inspector Solar. He escuchado horrores y también la forma ridícula en que pasó los últimos años de su vida, ya jubilado. Poco menos que se convirtió en un esperpéntico personaje santanderino. Insisto en la “simpatía” con que eran tratados los conocidos ultraderechistas santanderinos. A los que se utilizaba para “limpiar” las calles y apalizar a manifestantes, pero nunca fueron molestados hasta el momento del atentado del PCE, citado. 

 

Imagen 8En la guardia civil, que conocí por motivos familiares que obviaré, tuve  constancia directa del “profesional” que se ocupaba de los detenidos. Hago constar que no eran en su mayoría detenidos políticos, porque no era patrimonio de ese cuerpo la represión social. Eran detenidos comunes, acusados de robos, la mayoría sin importancia que, el primero sargento,  luego ascendido a brigada, Emilio Caballero, se encargaba de las torturas sádicas. El sargento Caballero era conocido y temido por la ciudadanía extendiendo un halo perturbador cuando aparecía en cualquier lugar. Tenía una  mirada aviesa e intimidatoria, el gesto frío de psicópata que dejaba en tétrico silencio a quien le veía llegar, como pájaro de mal agüero , incluidos   diferentes integrantes de los  destacamentos del cuerpo.

Era motorista de Tráfico, un tipo con gran atractivo físico y compostura importante. En los garajes que el destacamento de la Guardia CivilImagen 9 de Tráfico  tenía en la calle Alta, se utilizaban los tornos como forma de tortura, se realizaban “bañeras” se introducían palillos entre las uñas y se golpeaba sin piedad a cualquier detenido por nimia que fuera la acusación. Se trataba de “divertir” al sargento  consiguiendo información para que los jefes, -teniente, capitán, teniente coronel y coronel- se colgaran las medallas que el “trabajo” sucio de Caballero obtenía. Como ejemplo les refiero que en una ocasión se detuvo a tres raterillos -creo que se les acusaba de robar neumáticos- No tenían nada que confesar porque fueron cogidos  in fraganti con pruebas suficientes para la acusación. Presto, al enterarse, el sargento llegó al cuartel de San Vicente, los desnudó y durante horas, en pleno Enero, siendo un día especialmente frío, los estuvo aporreando con las mangueras de agua helada con que lavaban las motos. Hasta que se cansó de la diversión.

Analizando el comportamiento de estos torturadores los creo psicópatas patológicos y no tan culpables como los mandos que autorizaban y espoleaban sus instintos asesinos, para como les dije, colgarse medallas. Habría mucho que contar de la  propia Guardia Civil, de cómo se trataba a los jóvenes recién llegados al cuerpo cuando eran destinados a Euskadi, utilizados como cebo del terrorismo. Si ustedes preguntan a cualquier número joven, que estuviera destinado en Intxaurrondo, por Galindo, verán que le odian con más fuerza que al mismísimo Argala. Les aseguro que les he oído decir que el coronel Galindo  produjo más víctimas entre los guardias que la propia ETA. Saquen ustedes conclusiones.

Imagen 10Las anécdotas que les refiero sobre las torturas conocidas por mí, datan de finales de los años setenta y comienzo de los ochenta. Algunas de ellas, después del 82 en que llegaron al gobierno los socialistas. El sargento Caballero ascendió a brigada por ese tiempo. Nunca nadie pidió responsabilidades ni represalió sus múltiples desafueros, ni a ellos ni a quienes los mandaban. Vivieron y viven tranquilos cobrando sus jubilaciones y gozando de pluses por méritos obtenidos en sus muchos años de servicios a la patria tal como hemos visto en el mediático Antonio Fernandez Pacheco, Billy el Niño, que fue “molestado” ligeramente gracias a los compañeros de La Comuna  que lucharon para desenmascarar al criminal. Poco o nada se ha denunciado sobre los represores que hicieron de Cantabria y de Santander un terreno abonado para sus crímenes. Solo en voz baja se nombra a Caballero, hoy felizmente jubilado y regentando un desguace de vehículos y del inspector Solar, se sabe que murió pero me ha sido imposible obtener mayor información…ni una sola foto queda del personaje.


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REPRESIÓN LGTBI

Capítulo aparte merecen dos importantes colectivos que fueron represaliados sin piedad, no solo en esta época que nos ocupa, sino que venían de una larga historia de vejaciones amparadas por leyes y comportamientos racistas y homófobos, sin piedad ninguna. Nos referimos al colectivo lgtbi y al pueblo gitano.

Pocos testimonios hemos conseguidos de las personas lgtbi, quizá porque fue tan grande el horror vivido teñido de escarnio que prefieren olvidar. Antes de seguir, hagamos un poco de historia sobre la represión a la gente lgtbi.

Las primeras leyes represoras datan de 1933 cuando entró en vigor la Ley de Vagos y Maleantes que unificaba la represión a mendigos, alcohólicos, toxicómanos, y conductas homosexuales. Esta ley se cambia en 1954 convirtiéndose en la Ley de Peligrosidad Social.

El concepto franquista de la sociedad estaba totalmente estratificado. La superioridad del varón era incuestionable, postergando a la mujer a las labores familiares de procreación y cuidado de la prole. Todo lo que se saliera del binarismo de género y de las conductas expuestas por un catolicismo integrista, eran punibles. Casi diría que inconcebibles. En ese contexto si la persona lgtbi mantenía oculta su condición sexual y no mostraban ningún tipo de “inclinación contra natura” la sociedad y los poderes fácticos los dejaba en paz. Es por lo que las lesbianas fueron poco molestadas. No era extraña la amistad femenina, incluso compartiendo vivienda.

Cuantas “solteronas” se han amparado en ese status para disimular su condición de lesbianas. La inexistencia conseguía la total invisibilización de la mujer , sumando a la discriminación de mujer la de lesbiana, aunque solo fuera ligera sospecha. El franquismo las desaparecía integrándolas dentro de sus instituciones. Hay  variados testimonios de falangistas que opinaban sobre la diversidad de las mujeres que integraban la Sección Femenina de Falange, muchas de ellas, las más masculinizadas, fueron profesoras de gimnasia y del llamado Formación Espíritu Nacional (la llamada Política) donde no extrañaban su porte y formas masculinas revestidas de lustre fascista y amor infinito a la figura mítica del varón, que integraba José Antonio Primo de Rivera, sublimando con ello su nula atracción por hombres de verdad y permaneciendo con valores de vestales del fascio.

Como decía, en el concepto que el franquismo tenía sobre la sociedad, le parecía inconcebible que los hombres no fueran totalmente viriles. Podemos ver hoy en la profunda camaradería masculina de cuarteles y contiendas un tufo homosexual más que sospechoso. Era constatable el desprecio y la ausencia de mujeres en sus juergas y jornadas, dejando al sexo femenino postergado a una mínima función de garante del hogar. Además, en los primeros años del franquismo, la represión estaba centrada en la política librando al país de toda tentación izquierdista sin prestar atención a otros menesteres. Es posible que la ocultación de la homosexualidad fuera suficiente para disimular su número e incidencia social, quedando en mera anécdota, casi simpática, la aparición de algún sujeto amanerado que producía hilaridad más que temor.

No fue hasta bien entrados los años sesenta cuando la plomiza España se abre lentamente al exterior, propulsando un turismo que salva la economía, cuando los homosexuales comienzan a mostrarse públicamente. La iglesia oficial alerta a las autoridades que el  “desviacionismo” sexual comienza a invadir a la juventud y con su perversidad y pederastia “pervierte” a los inocentes.

Durante estos años, no obstante, algo ha preocupado a las autoridades la “desviación del macho” porque en 1953  el Director General de  Prisiones, José María Herrero de Tejada, desembarca en Gran Canaria con el fin de explorar las islas, en un intento de formar un campo de trabajo donde recluir a “desviados”. Poco tiempo después descubre en la isla de Fuerteventura, cerca de un aeropuerto, un terreno desértico e inicia la construcción de un campo de trabajo y reeducación. Estaba naciendo la terrible colonia agrícola de Tefía, para el internamiento y tratamiento de vagos y maleantes. Exactamente la orden de construcción salió publicada la noticia en el BOE del 30 de Enero de 1954.

Parásitos sociales, rufianes, proxenetas, mendigos, ebrios, toxicómanos serán los habitantes a reeducar, con el sentido cristiano de pagar la culpa con castigo. Lo vivido en el campo de Tefía ha sido ampliamente relatado por alguno de los integrantes de aquella aberración. Tefía fue cerrado en 1966 y más tarde, en 2009 el gobierno español aprobó la concesión de indemnizaciones a los que padecieron el internamiento.

El historiador y escritor Miguel Ángel Sosa Machín cuenta su terrible experiencia en Tefía,  en el artículo Invertidos, publicado en el Dominical del diario La Provincia el 29 de junio de 2003. El informe forense está incluido en el expediente incoado a Octavio García en aplicación de la Ley de Vagos y Maleantes.

Detenido simplemente por ser maricón, como él mismo ha explicado en innumerables ocasiones desde que el historiador sacó a la luz su historia, su terrorífico testimonio es ejemplo del trato dado a los presos de Tefía y que de manera escalofriante plasmó Sosa Machín en su imprescindible novela Viaje al Centro de la Infamia.

 

En 1970 se deroga la ley y pasa a llamarse Ley de Peligrosidad Social y Rehabilitación Social.  En esa nueva  ley se especifica textualmente a la homosexualidad como enfermedad social, rehabilitable aunque sigue siendo punible por la Ley de Escándalo Público, cualquier manifestación de “desviación”.

La pluma, el amaneramiento y no digamos el travestismo –ni se contemplaba aún la transexualidad-  era condenado con penas de cárcel que derivaban en algo peor: la psiquiatría y la iglesia se ocupaban de los “desviados/as” con electroshocks, trabajos forzados, golpizas y castigos vejatorios. Todo para reconducir al desviado a la senda del binarismo y la virilidad sana.

Había refugios ciudadanos  para estos proscritos. Recuerdo haber escuchado a matrimonios amigos de la familia, que en sus salidas comunadas (cena de los sábados, algún espectáculo, copas y vuelta a casa) dedicaban tiempo a observar a los “maricones” en un club privado al que accedían sabe dios como, lo que les suponía un divertimento. Era como ir al circo donde ver las conductas erróneas y divertirse con ellas.

Se dejó de considerar conductas delictivas (en muchos casos, también, recordemos que la Ley de Escándalo Público seguía activa) y pasó a ser conducta “curable” Con lo que el tratamiento fue mucho más cruel si cabe. Por fin el 26 de Diciembre  de 1978 se elimina el delito de homosexualidad del Código Penal.

Hay que decir, que no obstante, los homosexuales fueron los últimos presos en salir de las cárceles franquistas, hasta 1979 no estuvieron todos fuera. Como apuntaba, seguía estando vigente la ley de Escándalo Público;  para aplicarla bastaba que un grupo de hombres conocidos de la policía estuviera hablando reunidos para ser detenidos, llevados a comisaria, apalizados en muchos casos y detenidos durante días o semanas. Se hicieron redadas en baños públicos, en cines como el Roxy, o el Mónaco,  en los servicios de las estaciones tanto de tren como de autobús, donde la policía ejercía como señuelo de ligue.

A continuación les leeré una ficha e investigación que le debo a mi querido compañero José Luis Pajares. Quizá esta persona anónima a la que José Luis, respeta su deseo de no ser recordado, sirve como ejemplo de cómo vivieron y el ambiente irrespirable del colectivo lgtbi en los duros años del franquismo. Respeto su ficha y la leo literal, porque entiendo que el lenguaje técnico tiene más fuerza en este caso:

DE MOLINA LAREDO, ÁNGEL

Nombre adoptado para preservar la identidad del protagonista

Nace en Laredo, el 1 de Noviembre de 1922

De oficio pescador, como era tradición en su familia, se puede considerar que esta gozaba de una buena posición al tener varios barcos y puesto de pescado en el mercado que destacaba de los demás por los productos que exhibía y la forma en que lo hacía.

Algunos hermanos mayores se habían desplazado a países sudamericanos, buscando mejorar esa posición económica de que disfrutaban.

En 1936, cuando se produce el golpe militar y la posterior guerra civil, es apenas un adolescente.

Nunca se significó políticamente, ni se conocía causa alguna para poder ser represaliado. Sin embargo, sin haber cumplido los 20 años, fue encerrado en la Cárcel Local y objeto de un apaleamiento inexplicable. Si injustificados eran los castigos sin juicio, aunque fueran juicios farsa, nadie entendía esto. Se da la circunstancia de que en su familia, algún miembro había tenido identificación política, en el lado del Frente Popular, sin tener consecuencias por ello a la entrada de los fascistas en Laredo.

Al poco tiempo de aquel suceso, se marchó de Laredo y se exilió a Uruguay, a la ciudad de Montevideo, donde vivía uno de sus hermanos. Allí destapó su condición de homosexual, sin ningún tipo de limitaciones. Su hermano, indignado, además de comunicar la “novedad” a su familia en Laredo, le obliga a marcharse de la ciudad.

Se traslada a Argentina, a Buenos Aires, donde reside el hermano mayor, que tampoco le recibe de buen grado.

Regresa a España en los años 70, quedándose en los alrededores de Santander, sin domicilio fijo y trabajando ocasionalmente en la industria naval de El Astillero.

En las pocas ocasiones que visita Laredo, solo es aceptado en la casa de una hermana, cuyo marido, con fama de ser el más severo de la familia, acepta acogerle.

A finales de Junio de 1975, en uno de sus desplazamientos al trabajo, es atropellado por un camión, resultando gravemente herido. Ingresado en la Casa de salud Valdecilla, fallece en la más absoluta soledad el 3 de Julio. Es enterrado de oficio en el cementerio de Ciriego, en una sepultura en tierra, que al no ser renovada su continuidad, ha sido ocupada por otros cadáveres sobre el de nuestra víctima.

El seguro del camión que le atropelló abonó una indemnización por el atropello, que fue cobrada por sus familiares.

Jose Pajares y Colectivo Memoria de Laredo

    • Testimonio de familiares (sobrinas)

    • Registros Civiles de Santander y Laredo.

 

Cualquier conducta afectuosa entre hombres, un roce, beso…era considerada reo de la ley. En cuarteles, comisarias se ha vejado hasta lo indecible a estas personas. Quizá los que llevaron la peor parte fueran los travestis, que eran “cazados” de forma inhumana por las zonas donde actuaban, o se prostituían ya que debido a su condición el resto de los trabajos les estaban vedados. Recuerdo escuchar con perplejidad como fue llevado al dispensario que tiene la Guardia Civil en la Aduana del puerto, una persona travestida. Fue desnudada delante de todos los integrantes que estaban de servicio, hasta quedar sin ropa, celebrando entre risotadas y el choteo consiguiente la “deformidad”. Su único delito era estar paseando por el puerto, en busca de “clientes”

Fueron frecuentes las vejaciones y las vergonzantes exploraciones como esta que hemos encontrado reflejada de forma literal: “La exploración clínica evidencia encontrarnos ante un amanerado con movimientos y gestos feminoides así como su manera de hablar. Psiquismo deformado por su propia perversión; no tendencia al delito; estado físico normal. En el reconocimiento correspondiente con su dilatación esfinteriana y casi desaparición de pliegues nos permite formular el diagnóstico de pederasta pasivo. Es apto para toda clase de actividades”.

 

No fue hasta 1995 cuando se derogó la ley de Peligrosidad Social y Rehabilitación que mantuvo las espadas en alto en la represión a homosexuales y “travestis”.

Hay una fecha mítica en el ideario de la lucha lgtbi. Poco después de las primeras votaciones democráticas en España, el Front D,Alliberament Gai de Catalunya organizó la primera manifestación del Estado Español donde gays, lesbianas, bisexuales mostraron su capacidad de lucha en las calles de Barcelona. Fue una masiva demostración de que no se podía obviar las diferencias de un binarismo impuesto. El resto de ciudades del estado y la población lgtbi, tomaron buena nota de ese día que de alguna manera les hacía levantar la cabeza y recuperar el orgullo.

En 1988 una pareja gay de Tarandell, Barcelona, se presentó ante el juzgado de Vic, solicitando casarse. Se generó una polémica con concentraciones a favor de la pareja que culminaría en el lejano 2005 con la ley de matrimonio igualitario que conformaba las demandas largamente postergadas del colectivo.

Los atentados perpetrados por incontrolados fueron muchas en esos años, por desgracia continúan dándose cada poco tiempo las noticias de nuevas agresiones a personas lgtbi y diversos delitos homofóbicos. Capítulo aparte merece mención la represión realizada a personas trans, incluso en estos momentos se han visto maltratadas a nivel público, a mi modo de ver, de una forma injusta y vejatoria.

 

PUEBLO GITANO

Para entender las leyes contra el pueblo gitano y la terrible represión que el franquismo ejerció sobre ellos, sin obviar que no fue la República ni los gobierno anteriores, precisamente generosos con ellos, tenemos que hacer algo de historia:

La historia de nuestro país ha sido dura para el pueblo gitano desde los primeros tiempos. Los monarcas españoles, durante siglos han dictado leyes persiguiendo  y diezmando al pueblo  romaní realizando cada tiempo razias asesinas como la producida por los Reyes Católicos en su obsesión de limpiar la sangre de los supuestos españoles.

 Cito a  George Borrow que define el sentir patrio:  “quizás no haya un país en el que se hayan hecho más leyes con miras de suprimir y extinguir el nombre, la raza y el modo de vivir de los gitanos como en España.  Fue la Pragmática de Medina del Campo firmada por los Reyes Católicos la que los marginó y declaró grupo peligroso. Desde entonces sufrieron persecuciones y deportaciones continuas:

“Mandamos a los egipcianos que andan vagando por nuestros reinos y señoríos con sus mujeres e hijos, que del día que esta ley fuera notificada y pregonada en nuestra corte, y en las villas, lugares y ciudades que son cabeza de partido hasta sesenta días siguientes, cada uno de ellos viva por oficios conocidos, que mejor supieran aprovecharse, estando atada en lugares donde acordasen asentar o tomar vivienda de señores a quien sirvan, y los den lo hubiese menester y no anden más juntos vagando por nuestros reinos como lo facen, o dentro de otros sesenta días primeros siguientes, salgan de nuestros reinos y no vuelvan a ellos en manera alguna, so pena de que si en ellos fueren hallados o tomados sin oficios o sin señores juntos, pasados los dichos días, que den a cada uno cien azotes por la primera vez, y los destierren perpetuamente destos reinos; y por la segunda vez, que les corten las orejas, y estén sesenta días en las cadenas, y los tornen a desterrar, como dicho es, y por la tercera vez, que sean cautivos de los que los tomasen por toda la vida”.  (Isabel y Fernando, Medina del Campo, 1499, recogido en la Novísima Recopilación, Libro XII, título XVI).

 

También resulta de ingrata memoria La Gran Redada, que fue una razzia realizada entre la noche del 30 de Julio de 1749 y la madrugada siguiente. Málaga, Cádiz, Almería fueron las ciudades más afectadas por este genocidio. Miles de personas fueron sacadas de sus hogares, separadas por sexos, asesinadas la mayoría o encarcelados bajo tortura de Inquisición en esos días aciagos para el pueblo gitano  https://www.gitanos.org/actualidad/archivo/117161.html.es

Durante siglos en nuestro país el pueblo gitano ha sido totalmente marginado de la vida social, impidiendo su entrada en los pueblos, el desempeño de trabajos normales, la escolarización. Se han visto obligados a una vida errante en las que en muchos casos el hambre les obligaba a delinquir.

 

En Europa durante el genocidio nazi sufrieron de forma terrible. En Enero de 1940, en los campos de Dachau, Buchenwal , 250 niños gitanos fueron utilizados como conejillos en experimentos científicos, muchos de ellos sacrificados entre tormentos.

 El uno de Agosto de 1944 más de 4000 gitanos fueron gaseados en Auschwitz-Birkenau en una sola noche. Ian Hancock, estudioso de la cultura romaní, confirma en sus investigaciones que al término de la II Guerra Mundial, del orden de un 70, 80% del pueblo gitano había sido aniquilado. Casi 800.000 gitanos que han sido olvidados de los agasajos e indemnizaciones que las organizaciones internacionales han concedido al resto de las víctimas  del exterminio.

Detrás del muro de Berlín, en la Europa Oriental, bajo régimen socialista, la situación no ha sido tampoco de encomiar. La discriminación y persecución han sido la norma en los países del  Telón de Acero.

En estos momentos diversos grupos amenazan de nuevo la integridad de los integrantes del pueblo gitano, El Front National en Francia, el Republikaner en AlemaniaVlams Block y el Front National en Bélgica, y el de Vox en España,  son algunos ejemplos de las ideologías políticas basadas en la intolerancia y el racismo que han aparecido en Europa  y no auguran nada bueno para el pueblo romá.

Con todo lo expuesto quiero decir que no fue precisamente el franquismo el promotor del racismo congénito del pueblo español hacía el pueblo romaní pero sí se ensañó por las especiales características del mismo.

Ante la uniformidad que pretendía imponer el franquismo a la sociedad española se enfrentaba la variopinta forma de vida, errante, de este pueblo. Las leyes promulgadas mucho antes le sirvieron a la dictadura para reprimir con saña la diversidad romaní. Es tópica la animadversión que las personas de raza gitana sienten hacia la Guardia Civil porque fue este cuerpo el garante de los caminos de España. Caminos que andaban los romanes en su deambular por una vida errante a falta de acomodo. En más de una ocasión se me han referido las oscuras visitas que recibían las familias cuando, en las veredas de los ríos, con la fogata de la olla humeando a punto de comer, se presentaba la siniestra pareja para de un patadón tumbar la olla con el condumio y expulsando de la zona a la familia dejándoles sin comida a la vez que sin orgullo.

Ver gitanos merodeando un pueblo era suficiente para movilizar a las fuerzas vivas del mismo y estas a las fuerzas del orden para expulsarlos. Se les ha acusado de robos…”Normal”, me cuentan los viejos gitanos. “Si no tenemos comida, ni posibilidad de ganarnos la vida robar se concibe como salida”. Nunca robaban demasiado…algunas gallinas, o frutos de la finca del poblado. Nada comparable con robos de guante blanco y corbatas de seda.

Los gitanos en los años cuarenta tenían prohibida la entrada en poblaciones a no ser que se les contratara con algún fin concreto. Han vivido de hacer cestos, de la venta de animales y del chalaneo “buscarse la vida” llaman ellos lo que se mantiene, en algún caso, hasta ahora mismo debido a la dificultad que existe de mantener un trabajo normal. La desconfianza hacia el gitano está grabada por la historia en la población paya. Hay un racismo subliminal del que debemos todas y todos de acusarnos frente a la población romaní.

La propia discriminación les llevaba a cometer delitos. Sin posibilidad de educación, hasta los años ochenta en que se les escolarizó, se encontraban desprotegidos frente a la autoridad por lo que sus penas eran indiscutibles.

Lentamente, en los años setenta y ochenta, tal como pasó con la población lgtbi, la anulación de las leyes discriminatorias intentaron una integración sin muchos resultados positivos. El enfrentamiento con los vecinos de poblaciones donde las autoridades pretendían integrar a la población romaní, hasta en las escuelas, con manifestaciones agrias hacia los niños que intentaban entrar en colegios, fueron moneda diaria en los tiempos en que las autoridades pretendían forzar una integración.

Como bien dice un amigo gitano, cuarenta años en la historia no son nada. No podemos obviar cuatro siglos de genocidio, discriminación y mal trato, obligando a un pueblo con una cultura, tradición y costumbres, a asimilarse a la nuestra.

Quizá la tradición oral y no escrita del pueblo gitano sea un problema a la hora de mantener sus tradiciones y su cultura. La proverbial y lógica desconfianza ante nosotras, la sociedad paya, les aleja de los bienes sociales y culturales que ayudarían a una equiparación social. En todas las personas de raza gitana con las que me he entrevistado, encontré la misma resistencia: “no queremos integrarnos, porque eso supone perder la identidad. Sería diluirnos en la cultura paya. Queremos respeto mutuo. Queremos convivencia entre iguales, pero no integración, bien es cierto que hay una leyes comunes que respetamos pero nuestras costumbres, nuestras tradiciones son las que son y la sociedad paya debe respetarla”.

Solo partiendo de un respeto mutuo, de asumir la responsabilidad de la represión, las razias y el racismo visceral que han padecido podremos llegara en las sucesivas generaciones a convivir y a aportarnos cultura.

El franquismo por un lado reprimía y por otro utilizaba al gitano/a como divertimento de señoritos, en fiestas y noches de alterne, donde ni tan siquiera se les pagaba por alegrar con sus cantes y bailes, sino que se les arrojaba monedas al suelo para que en humillante genuflexión fueran recogidos por los/as gitanillas de turno. La biografía de Carmen Amaya, refleja esto que digo, siendo ella una niña pequeña que acompañaba a su padre, la que recogía las monedas de los señoritos.https://www.lapajareramagazine.com/carmen-amaya

Contradictorio es observar que la “españolidad” parte del folklore gitano. El flamenco es símbolo de patria, de ancestro cuando la cultura flamenca procede de la gitana. La copla puede ser andaluza pero no el flamenco. Contradictorio país que absorbe raíces de quien desprecia con saña.

En Cantabria se produjeron los mismos problemas que en el resto del país. Hay que pensar que la población gitana del norte es escasa frente a  Andalucía donde están el 80% de romaníes. En los años setenta y ochenta se produjeron disturbios cuando se les concedieron pisos en la zona de Cazoña y se  escolarizó a los pequeños en colegios integrados por payos. Aún resuenan las voces discrepantes de vecinos de las zonas de posicionamiento gitano, sin óbice de que en las casas de los payos protestones sonara a diario las voces de Camarón, Paco de Lucía, Enrique Morente, La Paquera de Jérez o Lola Flores…Contrasentidos que tiene la ignorancia

Fueron los maestros, ciertas iglesias (curas párrocos y monjas) y también autoridades de izquierda las que se empeñaron en facilitar la vida y la cultura al pueblo romaní. En casos tuvieron que enfrentarse a las turbas con riesgos y criticas acervadas.

Hoy la población romaní camina lentamente hacia una equiparación social. Ya no hay leyes discriminatorias, ya los Guardias Civiles no pueden tirar el pote de comida ni impedirles el paso por caminos y pueblos pero como  repite el amigo: “cuarenta años en la historia no es nada”. Hace falta más tiempo para derrotar las mutuas desconfianzas y labrar una convivencia enriquecedora.