dilluns, 8 de setembre del 2014

Memoria Histórica de Asturias : Torturadores franquistas vivitos y coleando - Parte II.


https://www.facebook.com/notes/solange-voiry/memoria-hist%C3%B3rica-de-asturias-torturadores-franquistas-vivitos-y-coleando-parte-/928266843855607

Del face de Solange Voiry.


Artículo de la revista "Atlántica XXII"(*) - Julio 2014 – n°33 – parte II.  Dos de los investigados en Argentina actuaron en Asturias - p.15-16

" Torturadores franquistas vivitos y coleando".  Entre los maltratadores y torturadores del franquismo que viven y esta aún siendo investigados por la jueza argentina María Servini hay dos represores durante la dictadura en Asturias, el policía Pascual Honrado y el guardia civil Fernando Caro.  Son los únicos denunciados, pero hay otros muchos que gozan de total impunidad.  La democracia no los depuró y el PSOE ascendió y promocionó profesionalmente a muchos de ellos.

Pascual Honrado maltrataba a los detenidos en Oviedo y Fernando Caro fue el gran represor de las huelgas del 63.

El 2 de agosto de 1963 llega Caro a Sama para encargarse de la represión de los mineros huelguistas del año anterior. Las huelgas rebrotan en julio de 1963 y se exige la vuelta de los desterrados. Es cuando aparece en escena el temible Caro y “ la represión adopta formas brutales”, dice José Ramón Gómez-Four, autor de Clandestinos.

El objetivo de Caro era encontrar a los dirigentes del PC y especialmente a Horacio Fernandez Iguanzo. “Creía que venía a una guerra y pensaba que lo que no se había conseguido en los últimos cinco años lo iba a lograr él en dos días”, explica el ex-boxeador, que cree que desde el principio no estuvo bien aconsejado, pues sus superiores le pidieron mano dura.
Era habitual que llegara borracho por las noches al cuartel y allí se ponía un chándal y la emprendía a palos con los detenidos que había en el depósito municipal, incluso con los que estaban a disposición del juez. Pero Caro pasó a la historia por las palizas y el corte de pelo a dos mujeres comunistas del valle del Nalón, Tina Peréz y Anita Sirgo. Ésta última aún vive para recordarlo : “Era muy chulo y no era un hombre muy normal porque lo que hacía respondía más bien al comportamiento de una persona drogada o borracha”.

El capitán Caro tenía como segundo al cabo Pérez. El grupo de información de Sama lo formaban él y otras tres personas más. Anita describió para esta revista el tormento que vivió con Tina en el cuartel de la calle Dorado, donde también estaban detenidos su marido Alfonso Braña y Antonio Zapico : “Entraron Pérez, Sevilla y Franco. Fueron como lobos hacía nosotras y se lanzaron a pegarnos puñetazos y callamos para que nos no mataran. Luego vienen a buscar a Tina y se la llevan una media hora y luegon vienen a por mi. Ella ya traía el pelo cortado. Ponían fotografías encima de la mesa de Caro para dijéramos sus nombres y decimos que no sabemos. Entonces el capitán Caro pone la foto de Pasionaria y nos dice " ¿ A esta tampoco la conoces ? ". Yo llevaba una melana larga, eran joven y me amezan con raparme el pelo si no digo nombres. Como no hablo me van cortando poco a poco mechones con una navaja de afeitar. Lo hacía Pérez. De vez en cuando me daban una hostia y en un momento dado le pregunto a Caro que si no tenía madre y se levantó hacia una piña de bronce pesada que tenía encima de la mesa. Se incendío, cogió la piña y me la tiró pero, afortunadamente, la esquivé. Tengo mal el oído de los puñetazos que me dieron. Al día siguiente el jefe de la policía urbana, Jesús, que ya murió, quedó asombrado. El pasillo estaba lleno de sangre, había visto a mi marido y a Zapico y no les reconocía. Estaban hinchados de los golpes. Zapico era silicótico y echaba sangre por todos sitios. Jesús era de derecha pero buena gente”.

A Tina y a Anita las encarcelaron mientras les crecía el pelo. Su caso tuvo gran repercusión internacional y provocó un manifiesto de intelectuales que encabezaba la firma de Ramón Menéndez Pidal. Y eso que aquella “hazaña” no fue la más cruel de Caro, que llegó a simular ajusticiamientos con detenidos y dispararles para amedrentarlos.

Caro es cesado en Sama el 31 de diciembre de 1963 siento destinado a la 236 comandancia de la Guarda Civil. En la democracia mantiene su carrera e incluso obtiene ascensos y responsabilidades. En 1981 es comandante de la Guardia Civil de su ciudad, Málaga, y apoya claramente el intento de golpe de Estado de Tejero. En las transcripciones filtradas por Diario 16 en agosto de 1981 hay una referida a una llamada que hizo a la esposa del golpista : “Otro interlocutor que dice llamar desde Málaga y el ser comandante de la Guardia Civil de aquella ciudad, Fernando Caro Lería (cita el nombre y ambos apellidos a la esposa de Tejero « por si alguien te tiene intervenido al teléfono»), quien ofrece ayuda y asiente a la afirmación de Carmen Pereira de que “tenemos los españoles de mierda que nos merecemos”.

Pero incluso , a pesar de sus simpatías por la intentona golpista, su carrera continúa. En enero de 1987 es destinado al Cuadro Eventual de Mando de la Dirección General con residencia en Málaga. Finalmente pasó a la reserva el 17 de diciembre de1992, con 58 años recién cumplidos. Hoy vive en el centro de Málaga. ATLÁNTICA XXII habló por teléfono con su domicilio para intentar entrevistarlo, aunque una interlocutora dijo que no podía hablar “porque está operado de garganta”. Se le pregunta entonces si le puede enviar una entrevista por escrito, a lo que también pone impedimientos porque “ es muy mayor y está enfermo”. Sin embargo aparece como uno de los ganadores del concurso sobre la serie Los Tudor de Canal Plus y también como miembro de CorazónBlanco.com, una web de aficionados del Real Madrid.

Estas informaciones fueron elaboradas por Fernando Romero, Xuan Cándano, Vicente Bernaldo de Quirós, Iván Martiñez y Blanca M. García. 

(*) Atlántica XXII - Revista asturiana de información y pensamiento. (www.atlanticaxxii.com)  


Anita Sirgo y Vicente Gutierrez Solís en Langreo el pasado mes de mayo.Anita Sirgo y Vicente Gutierrez Solís en Langreo el pasado mes de mayo.