José Cote Guerra y Juan Romero Herrera fueron fusilados en 1948 en aplicación de la Ley de Fuga y se ha localizado su lugar de enterramiento gracias al archivo municipal
Un momento de la excavación, este viernes.
El Ayuntamiento de Tarifa ha emprendido este viernes las excavaciones en el cementerio para la localización y exhumación de los restos mortales de dos vecinos de la localidad, José Cote Guerra y Juan Romero Herrera, fusilados en 1948 en aplicación de la Ley de Fuga.
La exhumación de los cuerpos, con ubicación y enterramiento documentados en los registros de la época, se enmarca en el proyecto global de indagación, localización y delimitación de fosas comunes para la reparación de la memoria histórica. Se trata de un proyecto impulsado por el Ayuntamiento de Tarifa con la colaboración de las ayudas gestionadas por la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) y la Diputación de Cádiz. Los trabajos acometidos por personal especializado y bajo la presencia de familiares de los fusilados han sido supervisados por el alcalde, Francisco Ruiz Giráldez, y la concejala de Participación Ciudadana, Lucía Trujillo.
Las excavaciones pretenden recuperar los restos mortales de dos tarifeños fusilados en el contexto de la postguerra civil, en 1948, en aplicación de lo que por entonces se conocía como Ley de Fuga. Atestados oficiales y registros documentales de la época han facilitado la localización del punto de enterramiento de estos dos vecinos.
Los trabajos de exhumación se desarrollan bajo la coordinación del arqueólogo Jesús Román y son continuidad de los estudios previos realizados desde el pasado julio por un especialista en memoria histórica y democrática que ha estudiado el Archivo Municipal de Tarifa en busca de datos fidedignos sobre las víctimas de la guerra civil y la dictadura franquista.
El Ayuntamiento de Tarifa está a la espera de conocer los resultados de los recientes estudios geofísicos practicados en el cementerio tarifeño para determinar la ubicación de la fosa común de las víctimas franquistas del 1936. Es una de las fosas comunes localizadas en el término municipal tarifeño junto a las dos ubicadas en Facinas, una en su actual cementerio y la segunda en la zona de Vico.
Antes de que concluya el año, el Ayuntamiento de Tarifa pretende realizar los trabajos de prospección geofísica en la citada zona de Vico, en Facinas. La realización del estudio en el cementerio de la entidad local de Facinas se está viendo imposibilitada por la negativa del Obispado de Cádiz que ha desautorizado el acceso al lugar para acometer los trabajos.
El Ayuntamiento de Tarifa acomete este proyecto a través de las ayudas concedidas por el Ministerio de la Presidencia y la Memoria Democrática a la FEMP y con la colaboración de la Diputación de Cádiz.
La iglesia cristiana obstaculiza la recuperación de los cadáveres fusilados por el Franquismo al lado del que siempre estuvo
El Foro por la Memoria califica al Obispado de Cádiz de “Poco cristiano” e instará a la Diputación a que ejerza su responsabilidad amparándose en la Ley de la Memoria Histórica de 2007 que aprobó el Parlamento de Andalucía y permite la expropiación temporal de los terrenos cuyos propietarios se oponen a la exhumación. “Nadie está por encima de la Ley. Se vistan con uniformes, vistan con sotanas".
El Ayuntamiento de Tarifa dentro del proyecto impulsado por la propia administración local en colaboración de las ayudas gestionadas por la FEMP y la Diputación de Cádiz, lleva ya algún tiempo trabajando en la localización y delimitación de fosas comunes para la reparación de la memoria histórica. Así ya se han iniciado -y otros se iniciarán en breve- diferentes trabajos de prospección geofísica en alrededores de cementerios y otras localizaciones donde existe documentación que se produjeron durante la Guerra Civil y a la finalización de ellas la tortura y muerte de centenares de familias tarifeñas, de los que hicieron desaparecer para castigo de sus familias, sus cadáveres.
Ayer mismo, dentro de ese mismo proyecto el arqueólogo Jesús Román, continuando con los estudios previos realizados desde el pasado julio por un especialista en Memoria Histórica y Democrática que ha estudiado el Archivo Municipal de Tarifa en busca de datos fidedignos sobre las víctimas de la guerra civil y la dictadura franquista se iniciaron las excavaciones en el cementerio de ‘Las santas ánimas’ para la exhumación de víctimas de la represión franquista en el contexto posbélico.
También se está a la espera de conocer los resultados de los recientes estudios geofísicos practicados en el cementerio tarifeño para determinar la ubicación de la fosa común de las víctimas franquistas del 1936. Es una de las fosas comunes localizadas en el término municipal tarifeño junto a las dos ubicadas en Facinas, una en su actual cementerio y la segunda en la zona de Vico.
Sin embargo, y aunque al margen del inherente y necesario derecho de restituir a las víctimas de la represión Franquista, o al menos a sus familiares es un derecho y un gesto de mínima humanidad, la localización y recuperación de los cadáveres de los fusilados por los fascistas de la época es en si misma un derecho legal amparado por la Ley 2/2017, de 28 de marzo ,de Memoria Histórica y Democrática de Andalucía. la Iglesia Cristiana, Católica, Apostólica y Romana, que antaño desfiló uniformada de sotana junto a los grandes matarifes del Franquismo más genocida, a través del Obispado de Cádiz ha desautorizado el acceso al lugar para acometer los trabajos al cementerio de la entidad local de Facinas. Un hecho que ha denunciado el propio Consistorio a través del comunicado de ayer en el que se centraban en los inicios de las excavaciones dentro del cementerio tarifeño para la localización de los restos mortales de víctimas del Franquismo.
Unas reticencias inexplicables que además suponen un incumplimiento flagrante por parte de la Iglesia del artículo 11 de la Ley de la Memoria Histórica y Democrática de Andalucía que en su Título I. Sobre las víctimas y en su Artículo 11. Acceso a los terrenos, establece que: Las actividades de indagación, localización, delimitación, exhumación, identificación o traslado de los restos de víctimas se declaran de utilidad pública e interés social, al efecto de permitir la ocupación temporal de los terrenos donde deban realizarse, de conformidad con la normativa sobre expropiación forzosa.
Pues en una decisión que el Foro por la Memoria del Campo de Gibraltar ha tachado de “incomprensible y de poco cristiano” e insta al Obispado de Cádiz a seguir las propias enseñanzas cristianas y dictados del Papa Francisco quien en diferentes ocasiones ha defendido el derecho a la memoria histórica y recuperación de los desaparecidos, posicionándose del lado de las personas que sufren. “Es muy poco cristiano negarle a nadie recuperar los restos de una madre, un padre o un abuelo. Y más si esas personas han sido víctimas de un asesinato y después han sido arrojados de mala manera a una fosa común. Sea un cementerio, una tapia o en una cuneta al lado de una carretera”, manifiesta Juan León Moriche, periodista y activista y portavoz del Foro por la Memoria.
El Foro por la Memoria del Campo de Gibraltar ha denunciado que “en este país la Iglesia parece que está en contra de su jefe máximo y niega un derecho básico a unos familiares. Al Foro por la Memoria del Campo de Gibraltar le gustaría ver que los dirigentes de la Iglesia, siguiendo el mandato de su propia religión, se ponen al lado de las personas que sufren, de los pobres, de las víctimas”.
Desde el Foro para la Memoria Histórica se ha anunciado que se va a instar a la Diputación de Cádiz que “ejerza su responsabilidad amparándose en la Ley de la Memoria Histórica de 2007 que aprobó el Parlamento de Andalucía y permite (artículo 11) la expropiación temporal de los terrenos cuyos propietarios (como en el caso del Obispado) se oponen a la exhumación. “Nadie está por encima de la Ley. Se vistan con uniformes, vistan con sotanas. La Ley de 2017 la aprobaron los representantes de la soberanía popular de Andalucía y está para cumplirse, por mucha Iglesia que quiera impedirlo. Que se cumpla la Ley y permita a muchas personas recuperar los restos de sus familiares”, ha recalcado Juan Miguel León Moriche.
Dos cuerpos de más de un centenar de asesinados
Con todo en el día de ayer comenzaron las excavaciones dentro del cementerio tarifeño para recuperar los restos mortales de José Cote Guerra y Juan Romero Herrera, ambos fusilados en el 1948 en aplicación de la Ley de Fuga. Unas exhumaciones enmarcadas en el “Proyecto de indagación, localización y delimitación de las fosas comunes del municipio”, impulsado por el Ayuntamiento de Tarifa.
Los trabajos acometidos por personal especializado y bajo la presencia de familiares de los fusilados fueron seguidos de cerca por el alcalde de Tarifa, Francisco Ruiz Giráldez y la concejala de Participación Ciudadana, Lucía Trujillo quien apuntaba al día de ayer como una fecha histórica y de vital importancia para “restituir la memoria democrática”.
Las excavaciones iniciadas ayer coordinadas por arqueólogo Jesús Román persigue recuperar los restos mortales de dos de los cientos de tarifeños fusilados en el contexto de la postguerra civil en el año 1948, en aplicación de lo que por entonces se conocía como Ley de Fuga. Atestados oficiales y registros documentales de la época han facilitado la localización del enterramiento de los tarifeños José Cote Guerra y Juan Romero Herrera. Sus familiares, a tenor del proyecto de indagación, localización y delimitación de fosas comunes del municipio impulsado por el Ayuntamiento de Tarifa han solicitado la exhumación de los cuerpos.
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