Mariano Cuadrado fue fusilado el 15 de septiembre de 1939, y su placa conmemorativa decora la plaza del pueblo; iniciativa del PSOE en 2014 y, en 2020, objeto de censura de Vox
Plaza del alcalde Mariano Cuadrado, en Torrelodones (Madrid). Imagen cedida.
El Ayuntamiento de Torrelodones (Madrid), liderado por el Partido Popular de Almudena Negro tras las elecciones del 28M, tiene en su agenda desde el pasado mes de junio impulsar, junto a Vox, el cambio de nombre de la actual Plaza de Mariano Cuadrado, el último edil republicano de la localidad que fue fusilado junto a otros alcaldes y concejales de la Sierra el 15 de septiembre de 1939, 84 años atrás.
Según reza en el listado del Libro de Decretos y Resoluciones, al que ha tenido acceso ElPlural.com, el Ayuntamiento ha designado a Sonsoles Palacios, concejal delegada de Servicios Sociales, Familias y Mayores y segunda teniente de alcalde, quien pertenece a la formación de extrema derecha, como jueza instructora del expediente para el cambio de nombre de la plaza local. Se prevé que la iniciativa se lleve al primer Pleno de septiembre.
La iniciativa nació del PSOE en 2014
Fue hace nueve años atrás cuando los socialistas del municipios madrileño, con el apoyo de entidades sociales, e incluso del PP, impulsaron la placa en honor al maestro y alcalde republicano. “Como maestro de la República, el reconocimiento a su compromiso con la labor docente se presenta como un homenaje a todos aquellos que murieron y sufrieron represalias por su dedicación profesional. […] Como alcalde del pueblo de Torrelodones, el compromiso que aceptó Mariano Cuadrado Fuentes y el desempeño de su cargo en los momentos más difíciles de la historia de España son ejemplo de los valores más excelsos de la política”, rezaba el escrito al que ha tenido acceso este periódico.
De esta manera, en la plaza de Torrelodones se puede leer la siguiente inscripción: “Maestro y Alcalde de Torrelodones. Socialista, católico y republicano. Fusilado en Madrid el 15 de septiembre de 1939, dejando mujer y ocho hijos. Su dignidad, honestidad y defensa de la legalidad representan un ejemplo de vida para su familia y amigos, vecinos y los más de 5.000 refugiados acogidos en Torrelodones durante la Guerra Civil. Para todo el pueblo es una herencia de la que nos sentimos orgullosos”.
Placa de Mariano Cuadrado en Torrelodones (Madrid). Imagen cedida.
No obstante, seis años después, en enero de 2020, la extrema derecha hizo el intento de eliminar el homenaje a Mariano Cuadrado en el municipio. Fue así como Vox presentó una moción de censura en la que se instaba a la retirada de la placa con el nombre del histórico docente “en el plazo de tres meses”.
En aquel texto, los de Santiago Abascal reclamaron que se eliminase todo rastro de “símbolos y honores a los responsables de los crímenes del comunismo y los representantes gubernativos de la II República española, comunistas que asesinaros y/o cometieron asesinatos en masa”, señalando a la par que “en el régimen comunista también se cometieron asesinatos en masa, genocidios y deportaciones”.
“La perpetuación en los espacios públicos de estatuas, placas conmemorativas, rótulos en calles, etc de estos criminales impide que la sociedad española pase página, de una vez por todas, de uno de los episodios más dolorosos de su Historia y la reconciliación definitiva entre españoles”, finalizaba el escrito de Vox. Finalmente, la moción no salió adelante, incluso contó con el rechazo de los populares.
Plaza de Mariano Cuadrado en Torrelodones (Madrid). Imagen cedida.
¿Quién fue Mariano Cuadrado?
Mariano Cuadrado Fuentes (1880-1939) fue un activista de los movimientos sindicales y políticos, a la par que los compaginaba con sus labores dentro del ámbito educativo durante unos momentos convulsos de la historia de España. Durante la Guerra Civil, se opuso fervientemente a las actuaciones de la sublevación militar y, por ello, dentro del municipio madrileño, logró conservar el orden público y respetó la ley, impidiendo los saqueos diarios. Durante el transcurso del conflicto armado, logró organizar los suministros de primera necesidad, construyó refugios civiles y acogió a otros tantos miles de personas que llegaban huyendo a la población.
Fue juzgado en 1937, cuando fue declarado inocente gracias al respaldo de los vecinos. Dos años más tarde, continuó defendiendo la causa republicana, hasta el 27 de marzo, cuando las tropas de Francisco Franco irrumpieron en el pueblo y se llevó a cabo su detención e interrogatorio. Posteriormente, pasó sus últimos días en la cárcel de los Carmelitas de El Escorial, hasta que se celebró el juicio militar y se ratificó su condena a muerte.
Junto a un numeroso grupo de alcaldes y concejales de municipios de la Sierra de Madrid, Mariano Cuadrado fue fusilado en las tapias de Cementerio del Este. A continuación, se extenderán el resto de nombres de cargos que también fueron sentenciados a muerte: Francisco Vega, de Fuencarral; Andrés Molpeceres, de Hortaleza; Benito Rodríguez, de San Sebastián de los Reyes; Constantino Herranz, de Guadalix de la Sierra; Eugenio Candelas, de Chozas de la Sierra (hoy Soto del Real); Faustino García, de Cervera de Buitrago; Pablo Ramírez, de Pinilla del Valle; Julián Velasco y Santiago Lozano, de Torrelaguna; Isidoro Marivela y Luís García, de Colmenar Viejo; Felipe Arribas, de Miraflores de la Sierra; Mariano González, de Moralzarzal; Santiago Andrés, de Los Molinos; Anastasio Moreno, de Galapagar; Vicente González, de San Lorenzo del Escorial; Alejandro Alonso, de Collado – Villalba; Diosdado Martínez, de Guadarrama; Dionisio Fernández – Salinero; de El Escorial y Saturnino Santos; de Navas del Rey.
El cadáver de Mariano Cuadrado no fue hallado y, por ende, su familia no pudo localizar sus restos. Su paradero sigue siendo desconocido.
El nuevo gobierno de Almudena Negro sí que permitiría su retirada
Ahora, con el nuevo escenario que ha quedado tras las elecciones del 28M, dando una mayoría absoluta al PP de Almudena Negro y con el aval de Vox, esta iniciativa podría materializarse en la realidad. Tras la noche electoral, quedaron confirmados los nueve concejales del PP en la localidad, mientras que la extrema derecha obtuvo cuatro. Un resultado que culminó con la etapa de izquierdas de Vecinos de Torrelodones.
Cabe recordar que, en la escasa trayectoria que ha cumplido este Ejecutivo municipal hasta la fecha, no han estado exentos de políticas. Además del escándalo por la retirada de los puntos violeta, su alcaldesa se aumentó el sueldo, pasando de cobrar los 56.370 euros anuales de su antecesor, Alfredo García Plata, a los 62.000 actuales.
Palacios, por su parte, fue la misma edil que hace unas semanas atrás anunció, a través de un polémico vídeo, que, bajo el nuevo ejecutivo municipal, se encargará de retirar todos los puntos violetas de Torrelodones, los cuales están indicados para aquellas mujeres que hayan sufrido violencia de género o acoso sexual.
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