Hoy se cumplen 50 años de la muerte de Luís Cernuda, el primer poeta español abiertamente gay. Nació en Sevilla en 1902, y murió en el exilio el 5 de noviembre de 1963 en México DF.Federico García Lorca nació cuatro años antes pero nunca salió del armario, por lo que el literato sevillano fue el primer poeta homosexual reconocido en España.
Cernuda nunca negó su condición homosexual, a pesar de que ello pudiera costarle la vida en una España atrasada y de moral conservadora, donde fue considerado un rebelde y un “raro”. En ocasiones no encontraba su lugar y se sentía aislado. De hecho, se veía a sí mismo “como un naipe cuya baraja se ha perdido”.
Su despertar sexual podría haber coincidido con el nacimiento de su deseo de escribir poesía, a la edad de 14. Pero no sería hasta muchos años después cuando se reconociera a sí mismo. Una influencia muy importante en su desarrollo emocional fueron los escritos de André Gide. En un ensayo de 1946, escribe: “La figura trascendente de Gide no es la de un hombre que por medio de la abstención y la renuncia busca lo divino, mas la del hombre que por medio del esfuerzo y la exaltación individual busca lo plenamente humano”. Esto podría interpretarse como la idea delhedonismo total, sin ningún tipo de sentimiento de culpa.
Como se ve en sus relatos de sus primeros encuentros con Jiménez en 1925 y Lorca en 1927, en realidad no había llegado a aceptar su homosexualidad. Esto sólo parece ocurrir una vez que finalmente se fue de Sevilla en 1928, tras la muerte de su madre.
Él ya se había hecho notar cuando estudiaba en Universidad de Sevilla como una especie de“dandy”. Así lo describía Pedro Salinas, otro gran poeta de la Generación del 27:
“Difícil de conocer. Delicado, pudorosísimo, guardándose su intimidad para él solo, y para las abejas de su poesía que van y vienen trajinando allí dentro –sin querer más jardín- haciendo su miel. La afición suya, el aliño de su persona, el traje de buen corte, el pelo bien planchado, esos nudos de corbata perfectos, no es más que deseo de ocultarse, muralla del tímido, burladero del toro malo de la atención pública. Por dentro, cristal. Porque es el más licenciado Vidriera de todos, el que más aparta la gente de sí, por temor de que le rompan algo, el más extraño”.
Se traslada a Madrid en 1929 y allí asiste a diversas tertulias en compañía de Vicente Aleixandre y de Federico García Lorca; este último le presenta a un joven actor gallego llamadoSerafín Fernández Ferro. Cernuda se enamora de él; pero este no le corresponde sino sólo cuando necesita dinero. Este amor insatisfecho inspirará sus libros Donde habite el olvido y Los placeres prohibidos, que supondrían su salida del armario pública.
Cernuda nunca negó su condición homosexual, a pesar de que ello pudiera costarle la vida en una España atrasada y de moral conservadora, donde fue considerado un rebelde y un “raro”. En ocasiones no encontraba su lugar y se sentía aislado. De hecho, se veía a sí mismo “como un naipe cuya baraja se ha perdido”.
Su despertar sexual podría haber coincidido con el nacimiento de su deseo de escribir poesía, a la edad de 14. Pero no sería hasta muchos años después cuando se reconociera a sí mismo. Una influencia muy importante en su desarrollo emocional fueron los escritos de André Gide. En un ensayo de 1946, escribe: “La figura trascendente de Gide no es la de un hombre que por medio de la abstención y la renuncia busca lo divino, mas la del hombre que por medio del esfuerzo y la exaltación individual busca lo plenamente humano”. Esto podría interpretarse como la idea delhedonismo total, sin ningún tipo de sentimiento de culpa.
Como se ve en sus relatos de sus primeros encuentros con Jiménez en 1925 y Lorca en 1927, en realidad no había llegado a aceptar su homosexualidad. Esto sólo parece ocurrir una vez que finalmente se fue de Sevilla en 1928, tras la muerte de su madre.
Él ya se había hecho notar cuando estudiaba en Universidad de Sevilla como una especie de“dandy”. Así lo describía Pedro Salinas, otro gran poeta de la Generación del 27:
“Difícil de conocer. Delicado, pudorosísimo, guardándose su intimidad para él solo, y para las abejas de su poesía que van y vienen trajinando allí dentro –sin querer más jardín- haciendo su miel. La afición suya, el aliño de su persona, el traje de buen corte, el pelo bien planchado, esos nudos de corbata perfectos, no es más que deseo de ocultarse, muralla del tímido, burladero del toro malo de la atención pública. Por dentro, cristal. Porque es el más licenciado Vidriera de todos, el que más aparta la gente de sí, por temor de que le rompan algo, el más extraño”.
Se traslada a Madrid en 1929 y allí asiste a diversas tertulias en compañía de Vicente Aleixandre y de Federico García Lorca; este último le presenta a un joven actor gallego llamadoSerafín Fernández Ferro. Cernuda se enamora de él; pero este no le corresponde sino sólo cuando necesita dinero. Este amor insatisfecho inspirará sus libros Donde habite el olvido y Los placeres prohibidos, que supondrían su salida del armario pública.
Luís Cernuda, Los placeres prohibidos, 50 aniversario muerte, literatura española, poesía, poeta homosexual, Lorca, Serafín Fernandez Ferro, Vicente Aleixandre
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