dimecres, 29 d’abril del 2015

Cómic: Entrevista a Philippe Guillen, biógrafo de C. Arnal.


http://www.akibastation.es/2013/03/comic-entrevista-philippe-guillen.html


Philippe Guillen en la
presentación de su libro (2011).
Philippe Guillen, francés descendiente de españoles, publicó en 2011 la biografía del dibujante español exiliado en Francia, José Cabrero Arnal. Cabrero Arnal fue el creador de Pif, uno de los iconos de la historieta francesa. Exiliado a Francia tras la guerra en España en 1936-39, el dibujante pasó en 1940 la terrible experiencia del campo de concentración de Mauthausen, tras la que volvería a dedicarse a la historieta recuperando una antigua creación suya para Pocholo, el perro Top, que pasaría a llamarse Pif. El éxito de la serie fue tal que la revista donde aparecía, Vaillant, pasó a denominarse Vaillant, le journal de Pif, para terminar por fin en 1969 con el nombre Pif Gadget.

Ahora que EDT tiene previsto
para el salón del cómic la publicación de Guerra en el país de los Insectos de este autor, aprovechamos para contactar con el biógrafo Philippe Guillén para entrevistarle sobre su experiencia y metas.

Buenos días Philippe.
Quiero agradecerte por parte del equipo de Akihabara Station que nos hayas concedido esta entrevista.Tu trabajo como biógrafo de José Cabrero Arnal es más que notable;

Primera portada del Perro Top, en los años 30.
Su forma de viajar a la luna era innovadora.
¿Por qué decidiste realizar una biografía de José Cabrero Arnal?

Existen 4 causas para esa decisión. El primer motivo es que soy nieto de republicano aragonés exilado en Francia, y el segundo es que soy profesor de Historia en un Instituto (por eso me interesa el asunto de la Guerra Española de 1936-39).
Conozco la importancia de registrar las memorias combatiendo el terrible efecto que causan los años, que cada día se lleva a los últimos testimonios directos de nuestra historia, no solo de España, sino también de Francia y Europa.
La tercera causa es que soy dibujante, producto de mi afición durante mi juventud cuando dibuje para las publicaciones “Vaillant” y más adelante “Pif gadget”. De joven, Cabrero Arnal fue mi “maestro” y “el perro Pif” mi modelo.

La cuarta razón es que Cabrero Arnal nacio en 1909 (falleció en 1982) y fue terrible para mí el silencio que hubo en el microcosmo del cómic francés para el centenario de su muerte ¡qué vergüenza!
Mis padres y abuelos republicanos me enseñaron Justicia, Gratitud y Memoria, y José Cabrero Arnal merecía un homenaje... y por lo menos, un libro. Lo empecé el 6 de Septiembre del 2009 (día del centenario) y lo acabé el 14 de Abril del 2011 (otra fecha importante).


La obra de Cabrero Arnal es muy conocida en Francia por historietas como El Perro Pif (con
la que logró el éxito), anteriormente el Perro Top en España ¿eres lector asiduo de los cómics de Arnal? ¿Tienes alguna historieta favorita del autor?


Es cierto que la obra de Arnal, desde 1946, fue muy famosa en Francia, pero la historia personal del autor del perro emblemático, Pif (el hijo “biológico” de Top) paso totalmente desconocida. Cuando se pregunta quienes eran los cuatro o cinco maestros del cómic en los años 50/70 es totalmente imposible olvidar a José Cabrero Arnal junto a los grandes como Hergé o Uderzo. En aquellos años la revista “Pif gadget” tenía más de 700.000 compradores cada semana (en ocasiones alcanzando la cifra del millón). Aun hoy en el 2013 persiste el record como primera revista de tebeos para niños en Europa. Éramos muchos los que esperábamos el jueves para la salida de la revista... e incluso nuestro padre nos la “robaba” para leérsela también. No sé decir y elegir una historieta . Su obra fue gigante (tantos años) y aún faltan álbums. En Francia no se ha hecho un verdadero álbum recopilatorio de PIF como lo ha habéis realizado en España con los álbumes del Perro Top por Paco Zumba, por ejemplo, o su premonitorio "Guerra en el país de los insectos"... Es más, todas las portadas de la revista “Vaillant” firmadas por C.Arnal son maravillosas, con un estilo y colores increíbles, Cada una nos cuenta una historia o más.

Primera portada del Perro Pif, encontrándose
con su padre en sus viajes. Años 60.
Quieres difundir a Cabrero Arnal para dar conocer su obra en España, así como las injusticias a las que fue sometido. ¿Puedes hablarnos un poco de esto?

Sí, es una injusticia que tanto su obra como su historia personal sigan siendo desconocidas en su país natal. A causa de ser republicano tuvo que abandonar los lápices - a él a quién le gustaba tanto disfrutar de su vida y de las noches barcelonesas - y tomar el viejo fusil en Julio de 1936 para defender sus ideales contra el bando de generales fascistas, aliados de alemanes e italianos. Sí, el joven C.Arnal fue un crack dentro de los pioneros del cómic en España.
Por ejemplo, fue uno de los pocos introductores de los bocadillos en las primeras revistas como “Tebeo”, “KKO” (de valencia) o -sobre todo - “Pocholo”. A inicios de los años 30 su obra fue muy modernal, era un maestro del movimiento y la elipse... Fue también un gran caricaturista en la revista de sátira política “l’Esquella de la Torratxa”, aunque eso fue totalmente desconocido en Francia hasta la publicación de mi libro. Este olvido no puede continuar; España debe conocer su obra, su vida, la de un dibujante que siempre tuvo a España en su corazón y falleció apadrinado en Francia con un sueño muy simple: Tomar una caña en un bar de las Ramblas de Barcelona.


Cabrero Arnal fue colaborador asiduo con sus historietas de L'Humanité, el diario del Partido Comunista Francés. Debido a sus experiencias, ¿Crees que estaba muy involucrado con la política? ¿y que esto afectaba a sus historietas?

Después de su liberación del campo de concentración nazi de Mauthausen en mayo de 1945, el deportado “Rote Spanier” (rojo español) n° 6299, Cabrero Arnal - 36 años, 39 kilos - llego a Francia . Primero se dedico a descansar y comer... En enero de 1946, en Paris, empezó a dibujar para una editorial comunista, la revista para niños “Vaillant” creada por jóvenes de la Resistencia en 1944 durante los primeros días de la liberación de capital francesa (con la sublevación de su pueblo y la ayuda de la famosa “Nueve” de la 2a D.B, primera compañía aliada en entrar en Paris, con sus republicanos españoles). La experiencia en los campos franceses y de Mauthausen fue fundamental para el dibujante: allí encontró la fraternidad, la resistencia comunista clandestina y nuevos amigos deportados quienes sabían ya de su talento como dibujante (él dibujaba en Mauthausen). Así conoció, por ejemplo, al joven deportado comunista y famoso fotógrafo catalán Frances Boix, quien fue su amigo. Aunque no fue jamás miembro del Partido, esos “camaradas” permitieron el encuentro de C. Arnal con los creadores franceses de “Vaillant”, particularmente con el pintor y dibujante René Moreu, un héroe de la Resistencia.
Lo que importó a José desde el principio hasta al final fue dibujar y dibujar. Más tarde se lo diría a la famosa escritora, Montserrat Roig (en « Los catalanes en los campos nazis ») y a periodistas: “Son los comunistas quienes me dieron trabajo primero”. Siempre fue compañero de camino, pero no miembro del PCF, PCE o PSUC. Desde 1946 C.Arnal dibujó para editorial “Vaillant” -tebeo infantil- con el guionista francés y resistance P.Olivier las aventuras de Placid y Muzo (oso y zorro) y muchos otros personajes.
Pero sobre el el 28 de marzo de 1948 -fecha histórica- llegó por primera vez con la publicación “l'Humanité”, el diario oficial del PCF, el perro PIF con dibujo y guion de el mismo (y ahora siguen siempre y cada día en “l'Humanité” las aventuras de Pif, pero con firmas de alumnos suyos). Fueron los primeros años de la Guerra Fria y así se sustituyó al gato Felix (que se imagina americano) por el perro del deportado republicano español.
Esas aventuras del perro Pif nos cuentan las dificultades de la vida (al principio: problemas de alimentación...) pero siempre con humor y humanismo. No es unas obra de propaganda política, sino a llamar propaganda una obra de amor para un mundo con cariño y ternura. Sí, hay también algunos chistes, pero siempre con final feliz y buenas sorpresas. Eso puede ser lo paradójico de su obra con animales y antropomorfismo: su confianza en el humor, en la Humanidad y la Razón... Hay que subrayar eso por parte de un hombre quien ha conocido el infierno de los campos nazis, ¿no?


Caricatura para l'Esquella de la Torratxa (1936).
Suponemos que tras tu libro hay una gran labor de investigación, que te habrán llevado a experiencias únicas y a conocer gente muy interesante. ¿Puedes explicarnos tu mejor y tu peor experiencia durante tu investigación?

Sí, pero trabajar con tal placer no es trabajo, ¡sino placer! 
Como os comentaba, de joven fui lector de las revistas “Vaillant” y después en 1969 de “Pif gadget”, por supuesto tenía mi colección fue un verdadero placer descubrirla de nuevo tantos años después. Para completarla he hecho tenido que buscar muchísimo, sí. Sabía de la genialidad de la obra de C. Arnal y cada nuevo dibujo ha sido una confirmación de ese pensamiento; creo que al final necesitaba cada día más escribir esta biografía.
He hecho grandes descubrimientos: Por ejemplo, que fueron publicados en España en los años 1978-1979, 37 números de la revista Pif con “cada semana un juguete distinto”. En aquella época ¿quién sabría en España que dentro de esta publicación juvenil y en algunas aventuras firmaba el español (apadrinado en Francia) C. Arnal? Gracias a la historia de mi familia, conocía bien el tema del exilio, de la Retirada, y de los campos de concentración franceses.
Lo que me faltaba ya fue información personal de él como ser humano, sobre el dibujante mismo, su niñez aragonesa, su adolescencia barcelonesa, su juventud de dibujante y caricaturista en la República, su vida de voluntario del ejercito republicano del este, el infierno de Mauthausen (fueron 10.000 refugiados los que conocieron esos campos nazis y 2000 los que volvieron), etc... Hay que decir que la vida del dibujante es emblemática en los años 36-45 en una historia en la que medio millón niños, mujeres, hombres (civiles o militares) y ancianos dejaron su tierra durante el terrible exilio. Encontrar otra información biográfica fue fruto de investigaciones en lugares particulares: Mauthausen, el Arxiu nacional de Catalunya (en San Cugat), el Pavello de la República y Hemeroteca y Museo en Barcelona ... Mi libro fue, sobre todo, fruto de encuentros con seres humanos excepcionales, generosos y humildes a los que les tengo una gran gratitud.
Recuerdo esos encuentros tan emocionantes con la señora Pilar Bailina (mujer del deportado y héroe Josép Bailina, amiga y siempre vecina de la pareja de Cabrero Arnal en Francia) o con el señor Ramiro Santisteban (superviviente de Mauthausen). Estas personas serán eternamente amigos míos, a los que respeto profundamente. También tuve mucha suerte con mi encuentro en el cementerio de Montauban -frente a la tumba del presidente Manuel Azaña- con mi amiga Mercedes (miembro de la misma asociación de Memoria Republicana que yo, M.E.R. 82) quien conocía a Pilar e hizo las presentaciones, Gracias a la tan grande señora Bailina he descubierto el primer lugar del tan largo camino del dibujante, desde España hasta Austria y a Francia de nuevo. ¡Aragon fue este lugar! Algo que muy pocos sabían, el “secreto” de Cabrero Arnal, totalmente desconocido para sus amigos franceses, de otros de “Vaillant” y de los Historiadores franceses de los Comics quienes -lo siento- no saben ni la A ni la Z de la Historia de España ni de su Geografía.
Después fue como el fil d`Ariane: telefonear desde Francia a todos los Cabrero de Aragón y así encontrarme con la familia Cabrero, con el sobrino del dibujante, mi amigo Daniel, también con el Historiador manresano Joaquim, con Rosa y Laura de la Amical de Mauthausen y otros campos nazis (en Barcelona), con Raul y el gran Martin (en Huesca y Angues), etc...
Añado obstinación y necesidad. Si, ¡lo necesitaba la verdad! (¿Conocéis a esa buena novela de Javier Cercas "Soldados de Salamina" o a la película de David Trueba?). Lo mejor de mi experiencia de historiador así como de ser humano fueron los encuentras con gente tan agradable y humilde. ¡No lo olvidaré! 
Emocionantes y preciosos fueron también estos momentos: cuando me dijo Pilar Bailina poco antes de su fallecimiento “He ido a la tumba de José en Antibes, lo he dicho en tu libro...”. Cuando fui por primera vez a Castilsabas para encontrar a Daniel Cabrero y regalarle por sorpresa mi libro: “¡Ya vuelve a casa el tío Pepe!”, o cuando hice mi primera charla sobre este asunto en Junio de 2011 en las V Jornadas de la Bolsa de Bielsa, en Sobrarbe, con la presencia de mi amigo Daniel y de mi padre durante la presentación aquí, en el valle Chistau, a 4 kilómetros de la casa de nacimiento de mi padre y mis tíos, lugar de mi familia hasta su exilio.

En tu biografía sale a la luz por primera vez que Cabrero Arnal no era nacido en Barcelona, si no en Castilsabas. ¿Cómo lograste esta información?

Cuando empecé mi investigación leí muchas veces que nació en Barcelona, tal y como decían los periodistas franceses de los años 50. Eso mismo le dijo él en 1939 a los militares franceses de los campos del Barcares, Argeles, San Cyprien o Agde, así como a los nazis de Mauthausen tras su llegada el 27 de enero de 1941. Pienso que había varios motivos para esto.
Primero, no se debe olvidar que Cabrero Arnal fue en si mismo un creador de historias, hombre del lápiz y no de largas frases y charlas. La información sobre su verdadero lugar de nacimiento se lo confesó a la familia Bailina y justo fueron estas las primeras palabras que me dijo Pilar en nuestro primer encuentro. No se debe olvidar tampoco que estuvo en los campos entre militares y más tarde, en los años 50, en Francia se conocía poco la geografía española por lo que nadie sabía localizar el pequeño pueblo de Castilsabas, ni a la Huesca misma. Para él fue más sencillo decir Barcelona para acabar rápidamente con las preguntas sobre su vida y sobre su triste pasado -el de un derrotado. Más tarde, con esto ya dicho, no podía negarlo sin parecer un tonto o perder el tiempo que prefería pasar dibujando.
Además, como dice su sobrino y “filol” Daniel, quien lo conoció bien y quien tiene documentos y pruebas: para su tío José y sus hermanos, la llegada en su juventud a Barcelona en los años 20 fue casi un renacimiento. Los mejores recuerdos de su juventud, de su experiencia profesional y autonomía, de sus experiencias en el Barrio Chino, fueron en la tan increíble y moderna capital de Cataluña. Para un hijo de pobres labradores aragoneses sin tierra de la provincia de Huesca, las Ramblas, la playa, la animación y la muchedumbre fueron una maravilla (y lo que necesitaba para su mente de dibujante).
Y – pienso también- responder “Cabrero Arnal, nacido en Castilsabas” sería dar a los nazis aliados de Franco la dirección de su familia en ese pequeño pueblecito. No se debe olvidar jamás que su padre, Emeterio, fue fusilado en Huesca el 11 de marzo de 1939 por los fascistas. José lo sabía y así protegió de nuevas represalias a los otros miembros de su familia en la España de Franco.
Me lo contaba con decepción la republicana Pilar Bailina (cuyo esposo superviviente de Mauthausen fue “el administrador” de los documentos de Cabrero Arnal): “Algunos de esos historiadores de los Tebeos parecen niños que copian sin investigar lo que han escrito antes otros historiadores quienes a su vez hacen lo mismo de otras referencias... Si, quizás son referencias sobre Historia de Francia y Comics pero no sobre psicología de José o Historia de España”.
Cuando yo le dije que el dibujante daba esa falsa pista y que dejó escribir eso durante su vida, me respondió con su humor tranquilo: “Si , son esos mismos historiadores que imaginaban su firma C. Arnal como si fuera el nombre francés Claude Arnal durante su existencia, en los años 70. Pero a José no lo importó corregir esas tonterías y, sobre todo, no sé yo si leía los pocos artículos sobre su vida y Pif”.


Hasta donde sabemos, se están reuniendo fondos para traducir tu obra al castellano, ¿sabes cuándo podremos ver tu libro en tierras españolas?

Cabrero Arnal fue uno de los más grandes caricaturistas y autores de comics de la Historia de España, olvidado por las actuales generaciones por su condición de republicano y exiliado. No puede continuar esta injusticia. Por eso espero que sea posible publicar mi libro en castellano, gracias a una casa editorial de su provincia de Huesca. Tengo contactos, pero con la crisis económica actual de España (y la creciente en Francia) no sé cuándo será posible.

¿Hay alguna manera de conseguir tu libro en España actualmente?

Se puede preguntar por mi libro en francés, claro: ”José Cabrero Arnal- De la République espagnole aux pages de Vaillant, la vie du créateur de PIF” (Ed. Loubatières - 2011) en España. Por ejemplo podéis encontrarlo en la FNAC española, pero se puede encontrar también en ebay y algunos otros sitios Web.

Muchas gracias por tu colaboración, ha sido un placer hablar contigo y esperamos que tu obra nos dé a conocer en España a José Cabrero Arnal como se merece.
El equipo de Akihabara Station.