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Las exhumaciones en el cementerio de Obejo buscando sus restos no dan con él, pero sí con sus compañeros de partida: Andrés Molero Redondo y Francisco Romero Huertas
A José Luna Cartán , maqui de Villanueva de Córdoba, lo fusilaron en 1949 en la finca "La Garita" en Obejo. Su cuerpo estuvo expuesto tres días al público en Obejo, como escarnio y escarmiento público. Años antes habían matado también a su mujer, Catalina Coleto Muñoz, después de que empezara a sufrir continuos malos tratos y vejaciones, por parte de las autoridades, por no delatarlo.
El matrimonio dejaba cinco hijas y dos hijos: Pilar, María, Francisca, Juana, Josefa, Diego y José, que hace años que buscan los restos de su padre sin éxito, pero sin perder la esperanza de encontrarlo para darle sepultura.
La famila de José fue la que pidió que se realizara una exhumación en el cementerio de Obejo para confirmar los datos que de forma oral y con registros posteriores, han ido transmitiéndose en el pueblo sobre el destino del maqui.
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Fosa del cementerio de Obejo en la que se han hallado los restos de los dos guerrilleros / CADENA SER
La excavación promovida por la Junta de Andalucía, ha terminado, sin embargo, encontrando los cuerpos de otros dos represaliados de la Guerra Civil Española en una fosa común.
En esa segunda fosa localizada han encontrado a Andrés Molero Redondo y a Francisco Romero Huertas. Ambos eran compañeros de partida de Cartán, fueron asesinados 1948 y enterrados en una fosa en el cementerio de Obejo.
El arqueólogo que ha dirigido la excavación es Andrés Fernández. En Córdoba Hoy por Hoy ha explicado que “no sólo hemos hallado estos cuerpos , sino que hemos conseguido dar con sus familiares y comunicarles el hallazgo en esta fosa. Hasta ahora pensaban erróneamente que habían podido ser enterrados en el cementerio de Córdoba” .
HUESOS , RESTOS DE PROYECTIL, BOTONES Y SUELAS DE ZAPATO
La humedad , las raíces y otros condicionantes del terreno han hecho que el grado de conservación de los restos sea muy malo. De ahí que los restos óseos se encuentren muy fragmentados. Sólo algunos efectos personales han sobrevivido al paso del tiempo: las suelas de los zapatos, algunos botones y alguno de los proyectiles de calibre 9 mm que acabaron con la vida de los maquis.
Se trata de una intervención de la Junta de Andalucía, conforme a la Ley de Memoria Democrática , "que tiene las puertas abiertas para seguir trabajando", como ha ofrecido la alcaldesa de Obejo,María Dolores Cano.
Aunque la documentación con la que contaban los investigadores acreditaba el lugar en el que supuestamente debería estar enterrado José Luna Cartán y otro compañero suyo, Diego Luque Lindo, de Adamuz, la fosa no ha podido ser hallada. Los familiares de El Ratón , tendrán que seguir esperando.
LEGAJO 66 CAUSA 666/48. EXPEDIENTE Nº 6924
Extracto del legajo del Archivo Militar Territorial nº 2 de Sevilla
Andrés Molero Redondo y Francisco Romero Huertas
Ocurrieron los hechos el día 5 de julio de 1948.
DILIGENCIAS INSTRUIDAS CON MOTIVO DE LA MUERTE DE DOS BANDOLEROS DEL LLANO
Don Augusto Tamayo Díaz, Capitán de la Cuarta Compañía de la Ciento Cinco Comandancia de la Guardia Civil y actualmente concentrado en Pozoblanco(Córdoba), por las presentes diligencias hace constar: Que con motivo del asesinato cometido por una partida de bandoleros en la madrugada del veintinueve del anterior en la persona de Antonio Muñoz Lozano, guarda particular, al que ahorcaron en la finca denominada "Suerte Alta", término municipal de Obejo, recayeron vehementes sospechas que pudieran estar complicados en el mismo dos individuos de los que se tenía noticias estaban en contacto con los bandoleros, llamados aquellos Andrés Molero Redondo y Francisco Romero Huertas.
Sobre las cuatro horas de hoy cinco de Julio de mil novecientos cuarenta y ocho, recibió el que suscribe aviso telefónico en Pozoblanco del Teniente Jefe de la Línea de Cerro Muriano, de que sobre las dos horas del mismo día y en el sitiotan repetido de "Minas de las Traviesas" se habían presentado dos individuos que al ser sorprendidos por el Grupo de fuerza en servicio de apostadero y darles la voz de "Alto a la Guardia Civil" respondieron haciendo un disparo de escopeta y emprendieron precipitada fuga, respondiendo a la agresión dicha fuerza alcanzó con sus disparos a los fugitivos que cayeron al suelo.Inmediatamente me traslade al lugar de la ocurrencia, auxiliándome desde este momento el Cabo Comandante del Puesto de Obejo Hernán José Sucunza Azpilicueta y llevada a efecto una inspección ocular se observan los cadáveres de dos hombres que resultaron ser, el primero Andrés Molero Redondo, y Francisco Romero Huertas.
DILIGENCIA FACULTATIVA DE AUTOPSIA
Por inspección exterior no se encuentran ni tatuajes y tampoco señales de hematoma que indiquen golpes de ninguna clase, y si dos heridas de bala que luego se detallarán.
ANDRES MOLERO REDONDO, Abierta cavidad torácica encontramos gran cantidad de sangre con grandes coágulos y pulmones colapsados, en segundo espacio intercostal izquierdo, existe un orificio de entrada de bala que interesa lóbulos superior de pulmón callado de la orta y salida por apófisis traversa de once vértebra dorsal. Se observa otro orificio en tercer y cuarto espacio costal con orficio de salido de cuerpo vertebral de doce dorsal con desgarro de pedículo cardiaco.
FRANCISCO MORENO HUERTAS. Abierta cavidad torácica, encontramos gran cantidad de sangre y un orificio en mango esternal que interesa arteria pulmonar y rozadura del callado de Orta con salida por séptima vertebral dorsal; otro orificio en tercer espacio intercostal línea sagital que interesa lóbulo inferior de pulmón izquierdo y salida por se (palabra ilegible). Siendo el proyectil del calibre de nueve milímetros.
De los hechos y racionamientos que anteceden pueden deducirse las siguientes conclusiones:
Primero. Que la muerte fue debido a herida por arma de fuego.
Segunda. Que el arma fue disparada desde plano superior.
Tercero. Que la muerte de ambos cadáveres fue instantánea y no se observa signos de violencia.
DILIGENCIA DE ENTERRAMIENTO
En Obejo a seis de Julio de mil novecientos cuarenta y ocho
Que conforme a la orden recibida había dado sepultura en el Cementerio de esta villa, a dos cadáveres identificados de Andrés Molero Redondo y Francisco Moreno Huertas, en una fosa doble, quedando esta sobre la pared de la parte saliente, a cinco pasos de lado Norte y veinte y tres paso a la del lado Sur.
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