La moción contó con el voto afirmativo de PSOE, PP e IU y la abstención, tras varias explicaciones farragosas, de Ciudadanos. El Ayuntamiento de Almería instalará en las próximas fechas una placa conmemorativa con el nombre de las víctimas de aquel nefasto hecho. Además, la moción presentaba una revisión del relato histórico que se da a los visitantes de los Refugios de la Guerra Civil que se encuentran en la capital ya que creen necesaria una actualización a raíz de las nuevas investigaciones y tras 12 años desde la apertura.
Para poner en contexto la moción presentada por los socialistas es necesario relatar, brevemente, lo acontecido la mañana de 31 de mayo de 1937. En los días previos varios aviones soviéticos, que apoyaban a la República, hundieron, por confusión, un barco de guerra alemán en las proximidades de las Islas Baleares. Aquel hecho, con varios muertos, despertó la ira de Hitler, que mandó castigar a la España republicana mediante el bombardeo de algunas de sus ciudades costeras. En un principio las ciudades señaladas fueron Alicante y Cartagena pero al estar fuertemente defendidas por baterías costeras se optó por castigar Almería, que apenas contaba con defensas. La madrugada del 31 de mayo, a las 6:30 de la mañana, aparecieron a 12 kilómetros de la costa cinco barcos de la escuadra alemana: un acorzado de bolsillo, el Admiral Scherr, y cuatro destructores, Albatros, Leopard, Seeadler y Lluchs. Se calcula que lanzaron más de 200 disparos que dejaron una treintena de muertos y decenas de heridos al que hay que sumarle los innumerables daños en muchos edificios de la ciudad tales como el Ayuntamiento, la Iglesia de San Sebastián o el Banco de España.
El hecho fue rotundamente condenado por las autoridades de Almería así como por el Gobierno republicano, que elevó protesta ante la Sociedad de Naciones, la institución predecesora de la ONU. La prensa internacional también recogió aquel hecho condenando la muerte de los civiles y la intervención nazi en un conflicto, en teoría, ajeno, aunque es de todos conocido que el III Reich no respetó el Pacto de No Intervención.
La moción aprobaba en pleno por el Ayuntamiento viene a recordar y condenar aquel hecho olvidado y pretende rendir homenaje tanto a las víctimas mortales como a las que sobrevivieron a aquella mañana infernal.
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