http://www.lavanguardia.com/vida/20140307/54402887080/proponen-un-banco-de-adn-para-la-busqueda-de-desaparecidos-de-la-guerra-civil.html
Vida | 07/03/2014 - 15:01h
Castellón, 7 mar (EFE).- El Grupo para la Recuperación de la Memoria
Histórica (GRMH) propondrá al Congreso de los Diputados y a Les Corts
valencianas la creación de un banco de ADN "custodiado por la
administración pertinente" para facilitar la búsqueda de personas
desaparecidas durante la Guerra Civil y el franquismo.
En declaraciones a EFE, el coordinador del colectivo, Matías Alonso, ha
manifestado que esta iniciativa la llevan "rondando mucho tiempo" y
que el caso de Dulce Giménez les ha llevado a querer "impulsarlo de
nuevo".
Alonso se ha referido así a la vecina de Cheste (Valencia) que el pasado
mes de febrero solicitó someterse a las pruebas de ADN para cotejarlas con los
restos del 'soldado desconocido' exhumado en octubre en El Toro (Castellón) al
sospechar que podría tratarse de su abuelo.
"Vamos a proponer la creación de este banco de ADN en el Congreso a
través de los diputados valencianos para que tramiten esa propuesta vía
proposición no de ley o como mejor vean, y lo mismo haremos en Les Corts con
los diputados que quieran prestarse a ello", ha señalado el coordinador
del GRMH.
"Allá donde mejor cuaje la propuesta, la llevaremos a cabo", ha
indicado.
Este banco de ADN, a juicio del colectivo, debería estar gestionado por el
Estado o las comunidades autónomas "para que sea una garantía de
continuidad", y cualquiera de las dos fórmulas sería buena".
Matías Alonso ha indicado que existen iniciativas similares en Andalucía y
País Vasco, impulsadas por la propia comunidad autónoma, que demuestran que
nuestra idea "tiene fundamento" y que pueden servir de referencia
para extrapolar a la Comunitat Valenciana el mismo modelo, "aunque somos
conscientes de la diferencia entre unos gobiernos autonómicos y otros".
"Vamos a hablar con la gente de Andalucía para ver si podemos
aprovechar su experiencia y evitar cometer errores", ha indicado el
coordinador del GRMH.
Desde el colectivo señalan que el Estado "debería garantizar que tarde
o temprano toda aquella persona que pide resarcir su derecho a enterrar
dignamente a un ser querido desaparecido pueda resolver su solicitud en vida, o
bien que sean sus hijos y sus nietos quienes puedan verla materializada, tal y
como pide Dulce, que ha heredado la angustia de su madre y quiere encontrar a
su abuelo".
El banco de ADN es, según el GRMH, "una de las fórmulas para
garantizar ese derecho".
Se trata en definitiva, añaden, de trasladar al Estado la labor que ya
hacen en este sentido asociaciones memorialistas como el grupo Paleolab, que
dispone de archivos particulares.
El coste de este banco de ADN dependerá del organismo que se haga cargo,
pero insisten en que no será excesivo, teniendo en cuenta que realizar el
análisis de ADN a una persona viva "es muy barato, entre 90 y 100
euros".
Un coste mínimo, asevera Alonso, "comparado con el enorme bien que se
le pueda dar a miles de personas que albergan una esperanza de encontrar los
restos de sus familiares".
El coordinador del GRMH insiste en la utilidad pública de este banco de
ADN: "No siempre hay suerte y las pruebas coinciden con los restos de las
personas exhumadas, pero igual en unos meses aparece otro cuerpo que sí es el
del familiar al que se está buscando, o en unos años resulta que ya no vive el
hijo o el hermano de quien fue fusilado" y las muestras "pueden
cerrar así una herida abierta".
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