Xàbia aprueba el proyecto que eliminará sus símbolos franquistas.

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• La restauración de la cruz cubierta de la plaza del Trinquet permitirá suprimir los escudos preconstitucionales, incluido un yugo con sus flechas, que todavía quedan en el baldaquino
• Las enseñas serán guardadas en un almacén municipal
• El pleno aprueba proyectos por un total de 978.000 euros

Ahora sí que los símbolos franquistas que quedan en pleno casco antiguo de Xàbia tienen los días contados. La corporación aprobó en su último pleno una modificación de créditos que entre otros muchos proyectos incluye la reparación de la cruz cubierta de la plaza del Trinquet. El proyecto de mejora, necesario para paliar un monumento cuya cúpula ha presentado síntomas de hundimiento y que tiene un presupuesto de 25.000 euros, será aprovechado de paso para eliminar los vestigios de la dictadura que todavía perviven en este baldaquino de piedra tosca: se trata de tres símbolos con un escudo preconstitucional (el del águila) además del yugo y las flechas de la Falange.

Hacía ya tiempo que el Ayuntamiento de Xàbia buscaba la oportunidad de deshacerse de esa estética preconstitucional. Pero no era tan fácil. Debido al delicado material del baldaquino, que es de tosca, había que integrar la eliminación de esos escudos en un proyecto de restauración de todo el monumento, que fue alzado en 1954 siguiendo un estilo neogótico. En octubre de 2014, ya se pidió presupuesto para eso. Pero era final de año y las arcas municipales no disponían del dinero suficiente. Ahora sí.

Para ello, se ha aprovechado una modificación de créditos con cargo al remanente de tesorería por un montante total de 978.000 euros que incluye como es lógico muchas más actuaciones: asfaltados en Balcón al Mar, la Plana o el Tossalet, reparación de aceras, calles y caminos en los distintos núcleos urbanos, renovación del alumbrado en el Freginal, avenida de Palmela o la carretera de Gata, el equipamiento de las nuevas oficinas del Portal del Clot, o la reparación de la cúpula del Calvari.

Los escudos no serán destruidos. Se guardarán en un almacén municipal. Xàbia concluye de esta forma un proceso de eliminación de las reminiscencias franquistas del municipio, una premisa a la que obliga la Ley de la Memoria Histórica. Ya con anterioridad se había suprimido otro emblema de la dictadura en el Mercat Municipal y la antigua avenida Almirante Bastarreche, uno de los jerarcas militares del anterior régimen, se rebautizó como avenida Adolfo Suárez.

Eso sí, la propia Cruz del Trinquet, se erigió en plena dictadura como cruz de los caídos. No obstante, sus inscripciones fueron eliminadas hace unos años, por lo que se considera que este hito ha perdido cualquier vinculación con la era de Franco.

Antecedentes históricos

Un templo dedicado al Loreto y derribado en 1870. El espacio donde se halla la cruz cubierta tiene una gran significación histórica para Xàbia. En esta zona, cerca del Portal de la Mar, antiguo acceso a la villa desde el puerto, se instalaron desde hace siglos marineros y pescadores. Allí se levantó en 1515 una pequeña iglesia dedicada al Loreto para servir precisamente a la gente del mar. El templo fue derribado en 1870 y el único vestigio histórico que queda ahora, además de la propia cruz, es una fuente de los años veinte.

Símbolos franquistas más sutiles que aún perviven. Decir que con la eliminación de los escudos del Trinquet se da por cerrada toda vinculación de Xàbia con el franquismo es un tanto exagerado. Aún quedan vestigios aunque, eso sí, más sutiles: en el interior del mercado puede apreciarse aún una placa que recuerda que el edificio fue inaugurado por el Generalísimo. Y de consecuencias más prácticas es el caso del chalet que el ministro de la dictadura, Mariano Navarro Rubio, pudo construirse en pleno dominio público de l’Arenal.