17/09/2013 - 12:58
Santiago de Compostela, 17 sep (EFE).- El Parlamento de Galicia ha rechazado hoy la pretensión del BNG de reprobar y pedir la dimisión del alcalde popular de Baralla (Lugo), Manuel González Capón, por haber señalado que las víctimas de la dictadura franquista "se lo merecían".
La iniciativa, debatida en comisión parlamentaria, había sido presentada por la diputada del Bloque Ana Pontón, y recibió una enmienda del PP, que fue rechazada, y que contemplaba que se reprobase cualquier manifestación de cargos públicos que justifiquen asesinatos en el franquismo, en general, sin citar expresamente al alcalde de Baralla.
Durante el debate de la iniciativa se produjeron momentos de tensión, después de que la diputada popular Paula Prado reprochase a BNG y AGE su postura en torno a la reciente condena por la Audiencia Nacional a varios miembros de Resistencia Galega y también que vistan camisetas con símbolos comunistas.
Ana Pontón apuntó en su intervención que el "golpe de Estado" del 36 fue una de las partes "más negras" de la historia, porque se ejerció una "brutal represión" y destacó que hasta 1939 fueron ejecutadas en la comunidad 5.500 personas, y 1.087 con juicio "sumarísimo" y sin defensa.
Las palabras del alcalde de Baralla, dijo, son una cuestión "de primer orden" y atacan a los principios democráticos. Insistió en que por respeto a quienes sufrieron la represión, el Parlamento debería exigir responsabilidades políticas.
En su opinión, el PP "mira para otro lado" y pone de manifiesto la existencia de "connivencias con ese régimen" y también que sigue existiendo "una losa de silencio sobre lo que pasó en el 36 y connivencia" con los autores de aquellos crímenes.
Paula Prado argumentó que el PP, en su enmienda, trataba de reprobar no solo las palabras del alcalde de Baralla, sino también "cualquier manifestación" de cargos públicos que justifiquen estos crímenes, por su gravedad.
En todo caso, la parlamentaria del PP apuntó que la polémica en Baralla "quedó resuelta" en un pleno extraordinario con la "rectificación pública" del alcalde, que no aceptó la dimisión que le pedía la oposición.
Insistió en que el PP ha nacido en democracia y está a favor de los principios de la Constitución "y está con todas las víctimas, tanto las represaliadas de la guerra civil como del franquismo; para nosotros todas las víctimas son iguales y deben estar situadas en igualdad".
"Y bajo ningún concepto admitimos lecciones de partidos que albergan la más mínima duda para condenar acciones juzgadas por la Audiencia Nacional como actos de terrorismo", dijo.
También pidió a la oposición que abandonase "la defensa de símbolos totalitarios, que recuerdan mucha violencia y mucho dolor, y que también en el pasado se tienen cobrado muchas víctimas".
Un argumento del que se valió para apuntar que ante la reciente condena a miembros de Resistencia Galega, el portavoz del BNG, Xavier Vence, apuntó que no observa en Galicia la presencia de un fenómeno terrorista, y, así, lo emplazó a que lo dijese "mirando a los ojos" a personas a las que pusieron artefactos explosivos en su casa.
También subrayó que el PSOE y el PP han sufrido atentados en sus sedes. "Quizá no sientan lo que se siente porque a ustedes no les pusieron ningún artefacto explosivo", dijo Prado, que también recordó que una concejal de Ourense, Ximena González, del Bloque, llegó a decir que en España gobierna el fascismo.
"Les digo que el único fascismo que conozco en España en los últimos 40 años es el de Batasuna, el de ETA, el que justifica el asesinato a personas que no piensan como ellos", remarcó Prado, quien afirmó que le gustaría que la oposición también condenase "este tipo de fascismo".
Igualmente, le pidió que "se adhieran" a la sentencia de la Audiencia Nacional que condena a miembros de RG "por terroristas" , y se preguntó si la postura del BNG sobre este asunto no está vinculada a su "proceso de acercamiento al mundo independentista".
También reprochó al histórico dirigente nacionalista Xosé Manuel Beiras, portavoz parlamentario de AGE, que hubiese criticado el fallo judicial.
Prado indicó que en AGE "vienen a dar lecciones de democracia vestidos con camisetas con símbolos propios de otros regímenes totalitarios comunistas" o apoyan al presidente venezolano Nicolás Maduro.
Le respondió, indignada, Yolanda Díaz, que criticó a Prado su "nefanda comparación del franquismo, la tortura, las muertes que tuvimos que vivir; con el reciente suceso de una sentencia" a Resistencia Galega.
"¿Quiere usted decir, señora Prado, que aquellos que defendían la legalidad republicana eran los causantes del golpe de Estado, del levantamiento fascista que muchos de sus dirigentes, como el finado Manuel Fraga, que tiene las manos teñidas de sangre, perpetró?", se preguntó Díaz.
A su juicio, "se colocó usted en las filas del fascismo", le espetó a Prado, a quien acusó de una "terrible" frivolidad". "Yo puedo hablar", comentó a los diputados del PP, "sé de lo que hablo, lo viví en mis carnes", reiteró, y recordó que ella misma tuvo que visitar a su padre en prisión, al tiempo que subrayó que la diputada popular "me está ofendiendo", tanto a ella como a quienes sufrieron la represión.
Además, indicó que el Parlamento todavía no ha tenido un reconocimiento para las víctimas.
Ante las continuos gestos y comentarios de diputados del PP, Yolanda Díaz pidió al popular Agustín Baamonde que ejerciese como presidente, puesto que preside esta comisión, y a punto estuvo de abandonar.
Finalmente, y al entender que Baamonde no le otorgó el tiempo correspondiente después de que la hubiesen interrumpido, apuntó que adoptará medidas legales.
"El fascismo pervive en las filas del PP", aseguró la parlamentaria, que salió de la sala antes de que se votase la iniciativa.
La socialista Beatriz Sestayo, que apoyó la propuesta del BNG, indicó que a una parte "importante" del PP "le cuesta separarse del episodio más horrendo del reciente pasado de nuestra historia" y reprochó a sus diputados que hubiesen "asistido con una sonrisa" al debate sobre "millares de asesinatos".
"No me extraña que el PP paralice la memoria histórica", dijo la parlamentaria, que lamentó que el alcalde justificase asesinatos, lo que debería, en su opinión, suponer su cese inmediato por haber hecho "apología del delito".
Calificó de "esperpento" que los populares hablasen en la sesión del régimen comunista chino o Resistencia Galega.
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