- Los testigos acudieron a la Embajada argentina en España para ser interrogados por la magistrada a través de videoconferencia acerca de las torturas sufridas en la dictadura franquista así como del robo de bebés
- "Por primera vez una autoridad nos ha escuchado", señalan las víctimas tras acabar su declaración
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La jueza federal Maria Servini de Cubría, que instruye desde Argentina una causa contra los crímenes del franquismo, reactivó el caso este lunes con la toma de declaración por videoconferencia de tres testigos que comparecieron en la Embajada del país austral en España.
Los testigos acudieron a mediodía a la legación diplomática en Madrid para ser interrogados por la magistrada acerca de las torturas sufridas en la dictadura franquista así como del robo de bebés.
Se trata de Jesús Rodríguez, Cecilio Gordillo y María Bueno. El primero denunció torturas por parte de la policía franquista en los años setenta. El segundo, sindicalista de la CGT, relató a la jueza argentina la explotación de la que fue objeto como trabajor esclavo durante la dictadura. Y la tercera testigo declaró sobre el robo de bebés, una práctica de la que es víctima como madre de uno de ellos.
Las declaraciones se extendieron durante más de tres horas y, según sus protagonistas, fueron muy relevantes. La magistrada solicitó datos concretos sobre las cirncunstancias en que se produjeron los hechos así como sobre sus responsables. Los declarantes mostraron su satisfacción porque, por fin, "alguna autoridad les ha escuchado".
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