dimecres, 16 d’abril del 2014

CARTA ABIERTA AL SEÑOR DIRECTOR GENERAL DE LA GUARDIA CIVIL



Sr Director:
Como máximo responsable del honorable cuerpo de la guardia civil me gustaría expresarle mi máximo malestar por lo que esta ocurriendo desde hace ya más de dos años con el recluso Manuel Ramón Arango Riego y las últimas informaciones vertidas desde la prisión de Zuera sobre miembros del entramado terrorista de los GRAPO. Su apretada agenda y la gestión de otros impactantes sucesos, junto con una situación heredada de sus antecesores pueden que le hayan obnubilado y no le hayan dejado atisbar todavía lo que ocurre en el Centro Penitenciario de Zuera (Zaragoza). Allí en la realidad administrativa de este centro, en el simple papeleo ya sabe, se sigue manteniendo con vida al recluso Manuel Ramón Arango Riego con Nº de Identificación 7821000018, cuando este recluso ha fallecido en la prisión de Aranjuez VI el 9 de septiembre de 2011, ocultando estos hechos al ser una muerte en la que se vulneran los derechos humanos. A cambio se liberan a los miembros más relevantes del entramado para que esto no trascienda ante la opinión pública y no contentos todavía con este montaje a primeros de abril de este año se quiere hacer creer a la opinión pública que muere en la prisión de Zuera la esposa de Manuel Arango y es el mismo recluso el que informa de su muerte, cuando la esposa de Manuel Arango, llamada Isabel Aparicio en su día fue liberada, teniendo de altavoz propagandístico para este montaje al órgano de propaganda del entramado. Tras estos hechos delictivos, que obviamente son consentidos desde el poder político, se encuentran subordinados suyos que son quien realizan el trabajo sucio y funcionarios de prisiones que se encargan de FALSIFICAR los partes en cuanto a recuentos se refiere. Recordando que es la guardia civil la que hace funciones de vigilancia y control dentro de las cárceles españolas así como la que vela por los reclusos en sus traslados Usted me dirá que qué pruebas tengo yo para tales afirmaciones y yo se las resumo: 5 cartas que obran en mi poder del supuesto recluso no son escritas por él, se le suplanta su personalidad y eso se demuestra con un simple cotejo de escritura entre las cartas que obran en mi poder y el preso que dice estar en Zuera pero que no esta porque ha fallecido. Dicho recluso comunicaba telefónicamente con sus padres los jueves y sábados de cada semana y desde ese fatídico 9 de septiembre en las facturas telefónicas de sus padres no aparece el número de comunicaciones de la prisión, ni en las comunicaciones de Zuera se llama a la casa de los padres del recluso en Villaseca de Laciana, algo insólito, pero como usted sabe los muertos no hablan. El preso era estudiante de la UNED, en la Licenciatura de Historia y desde ese 9 de septiembre en dicha facultad no se ha recibido ni un trabajo, ni examen del preso. Cómo ve no hay duda de que se lo ha tragado la tierra. Yo le insto a lo siguiente; si usted sigue creyendo a sus subordinados y esta todo en orden en la cárcel de Zuera, cursemos juntos una visita al preso y si éste se encuentra con vida, tiene que poner el caso en manos del servicio jurídico de la benemérita y querellarse contra mí por haber mancillado el honor de miembros del cuerpo. Pero como esto no es así, entonces usted debe de asumir responsabilidades como máximo responsable. No hace falta que le recuerde que cuando se llevan a cabo ordenes manifiestamente ilegales o que constituyan delito no se esta obligado a cumplirlas en base a la obediencia debida pues el respeto a la Constitución y a las leyes prevalece por encima de todo. Le quiero manifestar que la honorable y democrática institución que usted dirige esta por encima de todo y no se puede enjuiciar su encomiable labor por la actuación de una minoría que no es representativa. Pues los responsables de este desaguisado han hecho un flaco favor tanto a la imagen del cuerpo como al recuerdo y honor de las víctimas en manos de ese entramado terrorista, entre las cuales hay guardias civiles, viudas de guardias y huérfanos. Pues ya me dirá usted que liquidar a un recluso dentro de la cárcel y a cambio liberar a varios terroristas no es la mejor forma de luchar contra el terrorismo. En intervenciones públicas le veo que es un hombre sensato, democrático y dialogante y seguro que tras leer esto reacciona y esclarece el asunto, pues de lo contrario usted sería un colaborador con una organización terrorista. Sin otro menester y esperando que el estado de derecho ilumine y guie sus actuaciones se despide de usted el abajo firmante
CHEMA GÓMEZ PONTÓN