dissabte, 1 de desembre del 2018

‘El silencio de otros’: víctimas de Franco que continúan esperando justicia.

https://valenciaplaza.com/el-silencio-de-otros-victimas-de-franco-que-continuan-esperando-justicia


En España no es posible juzgar ningún crimen del franquismo a causa de la ley de Amnistía de 1977. En consecuencia algunas víctimas y familiares han recurrido a la Justicia Universal para presentar una querella en Argentina. El silencio de los otrosrealiza un seguimiento del proceso durante seis años y entrevista a algunos de sus querellantes
30/11/2018 - 
VALÈNCIA. “Algunos piensan que nos mueve un sentimiento de venganza. Yo lo que busco es justicia”. Chato Galante fue detenido y torturado con 20 años. Por aquel entonces el Sindicato de Estudiantes, al que pertenecía, exigía una explicación al gobierno franquista por la muerte de Enrique Ruano, el joven que murió al caer desde un séptimo piso mientras estaba detenido.
Chato fue capturado durante aquellas manifestaciones. Antonio González Pacheco, conocido como Billy el Niño, fue su torturador. Cuando los golpes alcanzaron sus genitales, Chato pensó que ya no podría tener relaciones sexuales nunca más. Se acababa de estrenar hacía poco. “Soy un ser humano”, gritaba en su intento por resistir. Paradojas de la vida, en la actualidad Chato Galante y Billy el Niño viven en la misma calle, que, para más retintín, era la calle del General Yagüe (hasta 2017).
La anciana María Martín desea sacar a su madre de la fosa común en la que se encuentra. Sentada en una cuneta de la carretera, encima del terrorífico lugar, María recuerda lo que presenció con tan solo seis años. “La cogieron, la cortaron el pelo al cero y la pasearon por el pueblo para que todo el mundo la viera [sic]”. Esa noche la mataron y la tiraron desnuda al hoyo. Su ropa quedó expuesta en la cuneta. Durante muchos años María fue increpada a pedradas por los chavales del pueblo. Con la llegada de la democracia, en la localidad de Pedro Bernardo se mantuvo el mismo alcalde, así que las cosas no cambiaron para ella. “Lo que busco es justicia”, dice ante cámara mientras muestra las decenas de cartas enviadas a diferentes administraciones.
“Hola, señor juez del Tribunal Supremo de Madrid. Mi padre, que le mataron a su mujer, la única respuesta que recibía fue ‘tú la llevarás al cementerio cuando las ranas críen pelo, así que no andes molestando, no vayamos a hacer contigo lo que hicimos con ella’.
Les envío un saludo de esta mujer que sigue esperando que las ranas críen pelo.
María Martín”
El silencio de otros, el conmovedor documental escrito y dirigido por Almudena Carracero y Robert Bahar, narra la lucha, durante los seis últimos años, de un multitudinario grupo de víctimas del franquismo, unidos en la denominada “Querella Argentina”. Familiares que quieren recuperar los restos de sus seres queridos; torturados que asisten atónitos a cómo el Gobierno del Estado condecora y protege a sus torturadores; y, por último, mujeres que han sido objeto del tráfico de bebés robados durante la dictadura y el inicio de la democracia, y que quieren saber dónde están sus hijos, “vivos o muertos”.

Por qué Argentina

En 1977 España aprobó la llamada Ley de Amnistía que liberaba a todos los presos políticos. Pero además la controvertida ley impedía juzgar cualquier crimen perteneciente al franquismo.
Amparadas en la legislación internacional de la ONU sobre Justicia Universal, un reducido número de víctimas del franquismo presentaron en la República Argentina una querella “por genocidio y/o crímenes de lesa humanidad cometidos en España por la dictadura franquista”. Desde entonces se han presentado 350 querellas a través de la Coordinadora estatal de apoyo a la Querella Argentina contra crímenes del franquismo.
El colectivo, pese a los evidentes obstáculos del Gobierno central y de la Audiencia Nacional, ha logrando algunos avances en una evidente carrera de fondo. No obstante, durante El silencio de otros somos testigos de las piedras en el camino. En primer lugar, del bloqueo de unas videoconferencias, organizadas por la jueza argentina, con el objetivo tomar declaración a las víctimas. Según explica el abogado de la querella, Carlos Slepoy, la amenaza del Gobierno de España fue explícita: “si se efectúan las videoconferencias, España romperá relaciones con Argentina”.
Carlos Slepoy, abogado de la “Querella Argentina”, recientemente fallecido.
Carlos Slepoy, abogado de la “Querella Argentina”, recientemente fallecido.

También se repasa la imputación de Rodolfo Martín Villa, por “la posible comisión de hechos atroces”. En este caso, comprobamos cómo la Audiencia Nacional salva del escollo al político tras rechazar que la jueza argentina le pudiera tomar declaración con el argumento de que los delitos han prescrito. Según la legislación internacional, sin embargo, los crímenes de lesa humanidad no prescriben.
Por último, asistimos a los avances por enjuiciar al temido Billy el Niño. El antiguo policía franquista se libró de ser extraditado a Argentina con el mismo argumento que el anterior: según la Audiencia Nacional sus delitos también han prescrito.

Participación de València en la querella 

Aunque no forman parte del documental, recordar que en la actualidad existen más de cien víctimas valencianas participando en esta querella. En 2016, con votos a favor de Compromís, Podemos, EUPV y PSPV, la Diputació de València aprobó una moción donde se comprometía a “apoyar a los municipios que se sumaran a la querella argentina”. Y en 2017 se firmó un acuerdo entre la Diputació de València, la Federación Valenciana de Municipios y Provincias (FVMP) y la Plataforma de Suport a la Querella Argentina del País Valencià, que hacía extensivo el compromiso.

¿Olvido o negación?

“Es simplemente un olvido, una amnistía de todos para todos. Un olvido de todos para todos. Una ley puede establecer el olvido, pero ese olvido ha de bajar a toda la sociedad. Hemos de procurar que esta concepción del olvido se vaya  generalizando porque es la única manera de que podamos darnos la mano sin rencor”.
Durante El silencio de otros escuchamos atónitos el discurso del líder del Grupo Vasco Xabier Arzalluz. Era 1977. Estaba a punto de aprobarse la Ley de Amnistía. Aquella norma que, supuestamente, serviría como mecanismo de reconciliación, contenía una trampa terrible: el hecho de impedir juzgar delitos pertenecientes al franquismo. 
Xabier Arzalluz en su discurso del olvido a favor de la Ley de Amnistía.
Xabier Arzalluz en su discurso del olvido a favor de la Ley de Amnistía.

Con la Ley de Amnistía impusieron la amnesia colectiva. Para las víctimas del franquismo, para aquellos que no pueden olvidar, significó la negación de aquellos crímenes y desapariciones. En ese sentido, la “Querella Argentina” significa un rayo de esperanza, aunque todavía continúen esperando e incluso algunos se estén yendo irremediablemente.
María Martín falleció recientemente. Ahora es su hija, Mari Ángeles Martín, la que escribe cartas.
Señor del Tribunal Supremo de Madrid, con todo mi dolor les envío un saludo de esta mujer que sigue esperando que las ranas críen pelo.
Mari Ángeles Martín, hija de María Martín, nieta de Faustina López”

El Partido Comunista rinde homenaje a sus militantes asesinados por el franquismo.

https://www.guadaque.com/guadalajara-ciudad/el-partido-comunista-rinde-homenaje-a-sus-militantes-asesinados-por-el-franquismo

Imagen de uno de los actos de homenaje en el cementerio de Guadalajara.Foto: Foro por la Memoria de Guadalajara.



El próximo domingo, día 2 de diciembre, a las 12 horas, el Partido Comunista y la Unión de Juventudes Comunistas en Guadalajara rendirán un homenaje a más de 200 militantes comunistas asesinados por el franquismo. El acto tendrá lugar en el Cementerio municipal de Guadalajara, con el descubrimiento de una placa en el denominado patio cuarto y contará con la presencia del Secretario General del PCE, Enrique Santiago, el Secretario Político del PCE en Castilla-La Mancha, Jorge Vega y el Coordinador regional de Izquierda Unida, Juan Ramón Crespo.
La placa del PCE y la UJCE se suma a las que ya han sido colocadas por UGT, CNT y PSOE, que también acumulan decenas o centenas de asesinados por el franquismo en Guadalajara, y han sido posibles por la aprobación de una moción en el Pleno del Ayuntamiento de Guadalajara, en el que se acordaba la colocación de una placa con todos los nombres de las personas ejecutadas o muertas en prisión en la inmediata posguerra. Ese acuerdo, que era lo principal, sigue sin desarrollar por el equipo de gobierno del PP en el Ayuntamiento de Guadalajara, que se ha negado en repetidas ocasiones pese al acuerdo plenario.
En el caso del homenaje del domingo, en palabras de la portavoz del PCE en Guadalajara María Jesús Barbas «se trata de  homenajear a personas que fueron asesinadas por su militancia políticay la defensa del Gobierno legítimo, 171 militantes del PCE y las Juventudes Socialistas Unificadas, asesinadas tras simulacro de juicio o muertos por las palizas y condiciones de prisión en Guadalajara,  y otras 41 personas, también militantes comunistas de Guadalajara que sufrieron la misma suerte en otras partes del Estado, según las investigaciones desarrolladas por el Foro por la Memoria de Guadalajara»
Xenia Sánchez-Seco, miembro de la dirección regional de la UJCE señala; «las jóvenes comunistas somos herederas de la JSU y de las luchas pasadas en lucha por la democracia y el socialismo, y siempre nos miramos en la JSU y en su ejemplo para las luchas del presente».
Dicha Placa sigue a otras que ya han sido colocadas por UGT, CNT y PSOE, que se amparan en un acuerdo del Pleno del Ayuntamiento de Guadalajara, de 30 de junio de 2017, que entre otras cosas dice; "El Ayuntamiento de Guadalajara autorizará la colocación de placas individuales y colectivas a las víctimas de la represión franquista, para familiares y organizaciones vinculadas con las víctimas, siempre que preserven el espacio y los enterramientos".
El motivo principal del acuerdo mencionado sigue siendo que el Ayuntamiento, como representación institucional de la ciudad, coloque una placa con todos los nombres, pero mientras esto no suceda es bueno que las organizaciones y familias sigamos desbordando al equipo de Gobierno del PP y sigamos consolidando los espacios de memoria del cementerio municipal.

La Historia y la Memoria como necesidad "en el mundo de las noticias falsas".


https://www.eldiario.es/investigadoresmemoria/memoria_historica-memoria-franquismo-periodismo-prensa-Concha_Langa_6_841375877.html


Las batallas también se libran desde los periódicos. A veces a sangre, otras con envites más sutiles que llegan ahora en forma de fake news alimentadas al extremo. Porque una sociedad necesita conocer su historia. Y tener memoria. De lo contrario, queda amputado el "espíritu crítico", como analiza Concha Langa, profesora de Historia Contemporánea y especializada en Historia de la Comunicación.
En tiempos de guerra, la información es un arma contra el enemigo. Una herramienta para adoctrinar. Y España no quedó ajena a la edad de oro de la propaganda, los años 30 del siglo pasado. Tras el golpe de Estado fallido del fascismo contra la Segunda República, "el franquismo fue terrible con el periodismo", señala.
Quedan como rastro el control militar de las redacciones y la violencia estructural contra los periodistas. O recuerdos como las alocuciones genocidas del golpista Queipo desde los micrófonos de Radio Sevilla. "Uno de los casos más significativos", subraya Langa. Y el pasado está "para entenderlo, asumirlo y contarlo".

De remover el odio a la momia de Franco

Langa no entiende a quienes dicen que la Historia, mezclada con Memoria, significa abrir heridas. "Esto de remover el odio… es que es absúrdamente ridículo", afirma Langa. "Hay que conocer tu pasado para entender tu presente y mejorar tu futuro", recomienda. Porque, avisa, "estamos en el mundo de las noticias falsas".
"Cuando abro un periódico, cuando veo un noticiero, no se puede entender lo que está pasando en este momento en España si no sabes de dónde venimos". Y si no existe "espíritu crítico" la gente pierde capacidad "de decir ‘eso no es cierto, no me vendas esa moto’… para que no te engañen", invita Concha Langa.
Un ejemplo: la momia de Franco. Lo explica: "Hace 40 años que murió ese señor, es alucinante que la gente siga discutiendo por este tema. Ahí se ve que no se ha superado". Porque "no podemos borrar la historia, hay que asumirla". Y "este país debería darse cuenta de que las heridas se cierran cuando se curan". Como en la tumba del dictador. O como en las fosas comunes y las cunetas.
Franco debe estar fuera de Cuelgamuros, entiende. "Tendría que hacerse con normalidad: sacarlo y que desde luego no acabe en La Almudena. Sería empeorar la cosa". Y el mausoleo fascista, resignificado: "No dinamitar el Valle de los Caídos, es una barbaridad, sino convertirlo en un espacio de pedagogía de la Memoria".

La "improvisación" del franquismo

¿Y cómo entró Concha Langa en el mundo memorialista? "Sobre prensa y guerra civil empecé a trabajar con mi tesis", recuerda. Con el título ‘ABC de Sevilla en la guerra civil’, el trabajo analizó cómo el rotativo local asumió el papel de edición nacional cuando todos los periódicos conservadores de Madrid están bajo control republicano.
"ABC apoya el golpe de Estado desde el primer momento. ‘Viva España’ dice el primer número que sale, el 21 de julio", cuenta Langa. Y en "casi 3.000 editoriales y columnas de opinión" desgrana las "diferentes fases" de un régimen "camaleónico" capaz de "fomentar una imagen fascista" en sus inicios para ir mutando a una careta capitalista "cuando se acerca al amigo americano".
"El franquismo se va improvisando sobre la marcha", resume. Franco se adaptó a los tiempos, a conveniencia, para arañar tiempo a los tiempos "y acabar muriendo en la cama". La profesora se adentra en estas mutaciones con sus estudios. Una muestra está en sus diversas publicaciones, en su inmersión académica, y en cómo aplica estos perfiles en sus clases en las facultades de Historia y Comunicación.

La represión “terrible” a los periodistas

La Memoria Histórica, luego, se fue colando por la rendija de "un encargo" que se fue convirtiendo "en un regalo". La Asociación de la Prensa de Cádiz quería "información sobre la represión de periodistas". Concha Langa aceptó el reto. Y tanto que había rastro de esa “historia de los vencidos”. Con epicentro en la Bahía gaditana, iba emergiendo ante la historiadora un “tema fascinante”.
"Yo había trabajado el tema de los periodistas que quedan en el ‘bando nacional’ porque es lo que había encontrado en Sevilla", rememora. Fue una llegada a la Memoria, dice, "por otro camino". Tras el golpe de Estado "los periodistas, de una forma u otra, sufren múltiples represiones o simplemente tienen que dejar de escribir", cuenta.
"El franquismo fue terrible con el periodismo", resume. Los golpistas activan un "corsé" para ejercer un control militarizado. Con cada afín a la democracia e incluso entre profesionales "que por ideología apoyan el movimiento". El estudio del escenario represivo en el mundo periodístico gaditano construye "esa historia a veces terrible de qué pasó con las personas que habían hecho prensa y empiezan a ser perseguidas".
El régimen franquista "quería absoluta docilidad". En toda la sociedad, también entre los plumillas. La Ley de Prensa de 1938, "de las más duras que han existido en el mundo", incide en la herida. "La situación fue complicada para toda la prensa". Excepto para Falange, que acaba acaparando una extensa red de periódicos.

De fake news y “lo inmediato”

"El desconocimiento de la historia reciente de España es… triste". Y peligroso, porque "permite la manipulación". Pero hay un problema: "La historia no está de moda", afea. "A los historiadores nos lee muy poca gente", lamenta. Esto, dice, "tiene que ver con la era digital", con el recurso "a lo inmediato" y el desprecio "a las humanidades".
Y cuando se unen "pereza mental", fake news y redes sociales… "Hay un paralelismo" entre los años de la guerra civil y el franquismo y los tiempos actuales. Un momento de crisis, los años 30, "con una pérdida de los valores tradicionales" que hoy está "en el auge de los populismos, lo estamos viendo", dice Langa. De nuevo la importancia de los medios, ahora multiplicada con las redes sociales. Otra vez la propaganda contra la información.
"Tenemos más información que nunca, acceso a más medios que nunca, y no estamos mejor informados que nunca", explica. Una situación “muy preocupante” que parte "de la falta de ese espíritu crítico para saber discernir la realidad de la falsedad" que está "provocando problemas": como que la gente "se cree esas noticias falsas".
¿Qué libro recomienda y por qué?
‘Individuas de dudosa moral’, de Pura Sánchez. "Trata la represión a la mujer. Un tema que me interesa mucho. A lo mejor dentro de unos años afortunadamente no hay que seguir reivindicando la historia de género porque ya se ha hecho a nivel global, pero ahora sí que hay que hacer estudios de la mujer. Porque si no, no están. Ya hay cada vez más, pero ese libro marcó un hito sobre la historia de la represión a la mujer a través de la documentación tan interesante del Archivo del Tribunal Militar Territorial de Sevilla".

Descubren la segunda mayor fosa común de Aragón con los restos de 19 víctimas de la represión franquista


https://www.eldiario.es/aragon/sociedad/Descubren-Aragon-victimas-represion-franquista_0_840966577.html


El pasado 10 de noviembre comenzó en el cementerio municipal de Sádaba (Zaragoza) una intervención arqueológica de localización y exhumación de cuatro víctimas de la represión franquista, originales de otro municipio zaragozano, Uncastillo. El objetivo era encontrar los restos de los hermanos Francisco y Martín Cortés Lasilla, Mariano Rebla Alegre y Luis Torrea Rived.
Los cuerpos de esas cuatro personas se localizaron, pero lo que no esperaban los miembros de la intervención fue lo que hallaron en una fosa contigua: “al menos 19 cuerpos, seguramente, vecinos de Sos del Rey Católico y Sangüesa (Navarra), según tenemos constancia documental y relato oral”, explica el arqueólogo que está llevando a cabo los trabajo, Javier Ruiz, junto a José Ignacio Piedrafita y la antropóloga forense Miriam Gracia.
Se trataría, en palabras de Ruiz, “de la mayor fosa encontrada hasta ahora en la Comarca de las Cinco Villas y la segunda mayor de Aragón que hemos descubierto con restos de este periodo histórico”.

5 metros de largo y 2,5 de ancho

La fosa encontrada en el cementerio de Sádaba tiene unos 5 metros de largo por 2,5 de ancho. En su interior se aprecian 19 esqueletos, “aunque por el tamaño de la fosa y algún resto que se ve podrían ser más”, explica Javier Ruiz. Los cuerpos “pueden provenir de un episodio protagonizado por gente de Sos de Rey Católico, quizá también algún vecino de Sangüesa. Son todos hombres, salvo dos mujeres, según tenemos documentado, pero hay que estudiarlo”, precisa el arqueólogo.
Ruiz resalta lo complejo de estas intervenciones: por ejemplo, para encontrar a Martín Cortés, uno de los uncastilleros desaparecidos y por los que se comenzó esta excavación en Sádaba, se cotejaron datos desde hace cuatro años. Entre ellos, los del Archivo Histórico Militar de Zaragoza, listas de defunciones, boletines oficiales de la época y también se recopilaron testimonios de familiares y amigos que los conocieron.
“Es una tarea costosa que ahora va dando sus frutos, aunque creemos que pueden salir muchas más cosas, ya que en el cementerio de Sádaba hay documentada otra fosa, y quizá más restos junto a los ahora encontrados, puesto que se enterraban por orden cronológico”, precisa el experto. “Sabemos de familias que venían a Sádaba a poner flores, aunque no sabían concretamente dónde estaban sus familiares”.
Por el momento, y durante varios días, seguirán los trabajos en la zona, para posteriormente llevar a cabo toda la labor de documentación y la exhumación propiamente dicha, para acometer, luego, las identificaciones por ADN.
Para ello, apunta, "es importantísimo que las familias colaboren, ya que tenemos que cotejar los restos óseos con ellos”. De ahí, que se haga un llamamiento a “todas aquellas personas que crean que pueden tener algo que ver con estos restos encontrados, para que acudan al cementerio de Sádaba o se pongan en contacto con nosotros”, indica Ruiz.

15.000 euros con carácter de urgencia

Estos trabajos están impulsados por la Asociación Charata para la Recuperación de la Memoria Histórica de Uncastillo, con la colaboración de la Asociación por la Recuperación e Investigación Contra el Olvido (ARICO) y la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica Batallón Cinco Villas.
Los mismos están financiados por la Diputación Provincial de Zaragoza (DPZ) gracias a unas ayudas para el ‘Desarrollo de la memoria histórica’ y amparada bajo la Ley del mismo nombre, por la que se reconocen y amplían derechos y se establecen medidas en favor de quienes “padecieron persecución o violencia durante la guerra civil y la dictadura”, una normativa que fue aprobada por el Congreso de los Diputados el 31 de octubre de 2007.
En el pleno que Comarca de las Cinco Villas celebrado el pasado martes se aprobó una partida de 15.000 euros, con carácter de urgencia, para poder concluir los trabajos de recuperación de los cuerpos hallados y seguir la investigación. “Es un tema de justicia social y de derechos que, además, está amparado por la Ley de Memoria Histórica”, explica el presidente de la comarca, Santos Navarro.
La Asociación Charata de Uncastillo comenzó con su labor en el año 2007. Desde entonces, y en colaboración con las otras agrupaciones mencionadas, han recuperado los cuerpos de 31 fallecidos y 3 guerrilleros. Para ello, explican, “todas las intervenciones cuentan con un equipo multidisciplinar formado por técnicos de amplia experiencia, compuesto por arqueólogos, antropólogos forenses, genetistas, historiadores, dibujantes, restauradores, y voluntarios”.

divendres, 30 de novembre del 2018

Cultura y espionaje en el British Council de Madrid durante la Segunda Guerra Mundial Leer más: Cultura y espionaje en el British Council de Madrid durante la Segunda Guerra Mundial.

http://www.elcajondegrisom.com/2018/11/cultura-y-espionaje-en-el-british.html

Viernes, 30 de noviembre de 2018

Francia acaba de ser ocupada. Es un momento dulce para la Alemania nazi, que ha conquistado prácticamente toda Europa. Solo queda Gran Bretaña para combatirla.

Es muy necesario que países afines a los nazis y los fascistas alemanes e italianos, no participen activamente en el conflicto. Se hace imprescindible ampliar las zonas de influencia británicas. Precisamente por ello, y porque en territorio de la península ibérica se encuentra Gibraltar, un importante enclave británico fundamental para controlar el paso de barcos a través del Estrecho, España es un punto de vital importancia estratégica.

British Council

En ese contexto, en el verano de 1940, aparece en Madrid el British Institute, ahora British Council. El artífice de este proyecto es Walter Starkie, un católico irlandés que, aprovechando su reconocido hispanismo, su amistad con el duque de Alba (embajador en Londres) y su puesto como Académico Correspondiente en la RAE, lo establece en el 17 de la calle Mendez Nuñez, junto al madrileño parque de El Retiro y próximo al Hotel Ritz que se había convertido en un nido de espías.

El British Council nació en 1934 para fomentar la cultura británica, la lengua inglesa y las relaciones culturales por todo el mundo y con esa idea Walter Starkie empieza a trabajar en el Madrid de la posguerra, intentando atraer a personas influyentes en el régimen de Franco poco afines al fascismo que controlaba Europa para evitar la entrada de España en la guerra. Pero tras esa fachada de cultura británica y enseñanza del inglés se esconden otras actividades encubiertas.

British Council

Durante la Segunda Guerra Mundial España era un nido de espías y lugar de paso para un buen número de personas que huyen de la guerra y las deportaciones. Starkie quiere tomar partido en la lucha contra los nazis y a través del club social, el colegio y la academia comienza a fomentar la influencia británica en la capital española, para ello el embajador británico lo nombra agregado cultural. Con la colaboración de Margarita Taylor, la propietaria del emblemático y ya desaparecido salón de té Embassy, del Paso de la Castellana y Eduardo Martínez Alonso, el médico del colegio y de la embajada británica organiza una serie de rutas de escape clandestinas para sacar de España a huidos de los nazis, principalmente judíos.

Embassy

Quien organizaba las vías de escape era el doctor Eduardo Martínez Alonso que como médico de la Embajada británica, sacaba a presos del campo de concentración de Miranda de Ebro, que atravesaban ilegalmente la frontera francesa, los llevaba a Madrid, donde se alojaban en el mismo British Council, en casas del grupo, o en los sótanos de Embassy, luego cruzaban la frontera con Portugal, por Galicia.

Durante el resto de la guerra lograron salvar varios miles de personas a pesar de que Martínez Alonso poco después de casarse, tuvo que huir por una de sus mismas rutas hacia Portugal e Inglaterra, perseguido por la Gestapo.

El club social tambien fue una importante fuente de información, ya que a el acudían personalidades de la época y por supuesto espías de ambos bandos que también frecuentaban el salón Embassy.


Quiero dar la gracias a Marina Pérez de Arcos por la información obtenida durante la mesa redonda y el desayuno informativo "El British Council y la Segunda Guerra Mundial: lenguaje, cultura y espionaje" que nos ofreció en la sede del British Council en Madrid (28/09/2017) y a su director Andy Mackay.

Articulo anteriormente publicado en la web de la Asociación Sociocultural Cincuentopía, donde colaboro habitualmente con una la sección El Cine y la Historia.

Para saber más:
Yo fui al Británico, editado por el British Council y JdeJ Ediciones
British Council
El Confidencial
El Diario.es
Biografías y Vidas



Leer más:  Cultura y espionaje en el British Council de Madrid durante la Segunda Guerra Mundial | EL CAJÓN DE GRISOM  http://www.elcajondegrisom.com/2018/11/cultura-y-espionaje-en-el-british.html#gKo8ysnb45tUQ4i6

LA CARACOLA - TIRAÑA EN LA MEMORIA


https://www.facebook.com/264494090615/videos/vb.264494090615/2205195956417234/?type=2&theater



dijous, 29 de novembre del 2018

La cultura que escapó del franquismo por los Pirineos y sirvió de refugio a los exiliados.

https://www.eldiario.es/cultura/arte/palabras-mataron-cultura-exiliados-espanoles_0_836067304.html


El último verso de Antonio Machado no fue hallado en ningún poemario, sino en el bolsillo de un desgastado abrigo que le ayudó a soportar el paso por los Pirineos dirección Colliure, una pequeña comuna situada al sur de Francia. "Estos días azules y este sol de la infancia", escribió el miembro más joven de la Generación del 98. Como él, muchos otros cruzaron la frontera para escapar del horror. Algunos consiguieron dejarlo atrás. Otros, como el poeta sevillano, no tuvieron tanta suerte.
Los caminos de cientos de españoles se bifurcaron en mil exilios, siendo la ciudad de Toulouse uno de los destinos más habituales. Esta no solo fue utilizada como refugio, sino como enclave para organizar y crear asociaciones de una resistencia que encontró en el papel impreso su particular arma. Los principales protagonistas fueron los anarquistas, pero no solo ellos se encargaron de dejar una profunda huella cultural que todavía hoy sigue muy presente en la localidad gala.
En 2019 se cumplen 80 años desde que Francisco Franco declaró su victoria e impuso una dictadura en la que todo contrario al régimen era perseguido y encarcelado en el mejor de los casos. Precisamente por ello, la muestra  Imprentas de la patria perdida disponible en el Instituto Cervantes de Madrid hasta el uno de febrero propone un recorrido por todo el legado intelectual de exilio español a través de libros, revistas, postales y fotografías procedentes de Toulouse.
"Cada cual tiene su historia sentimental con esta exposición, y cada cual encontrará un detalle que le inquiete. Emociona ver cómo aquellos españoles maltratados se levantaron y luego se unieron a la Resistencia para liberar a París de los nazis", explica Luis García Montero, director del Instituto Cervantes, durante la presentación de exhibición. El poeta, además, admitió sentirse "especialmente orgulloso" de este muestrario, ya que "explica de qué forma la cultura y el pensamiento se relacionan con el exilio español".
Sin embargo, quien mejor conoce el esfuerzo tras la colección es Javier Campillo, bibliotecario del Instituto Cervantes de Toulouse y, por tanto, responsable de la recogida y documentación de todas las obras. Porque, como él mismo detalla, "esta es una historia que nace a partir de donaciones de diferentes generaciones que han facilitado al Instituto Cervantes confiando en su trabajo y en el de los investigadores". ¿El objetivo? Recuperar el legado de personas que, como recalca Campillo, "encontraron en la cultura el consuelo para su lucha".
De esta manera, Imprentas de la patria perdida propone un recorrido a través de 12 etapas: desde las circunstancias geográficas e históricas que convirtieron a Toulouse en la "capital del exilio" española hasta poemarios nacidos como refugio para la desesperación.
La obra reproduce la ilustración de portada del ilustrador de la CNT Toni Vidal. En su interior se recogen textos de canciones revolucionarias con indicaciones de las melodías que debían acompañarlas: 'Marsellesa anarquista', 'La alegría de la huerta', 'Nabucco'...
La obra reproduce la ilustración de portada del ilustrador de la CNT Toni Vidal. En su interior se recogen textos de canciones revolucionarias con indicaciones de las melodías que debían acompañarlas: 'Marsellesa anarquista', 'La alegría de la huerta', 'Nabucco'... 'TIERRA Y LIBERTAD' (1947)
Era casi imposible sobreponerse al fortuito destierro, pero no intentar combatirlo desde la distancia a base de palabras que reflejaban el rencor de la derrota, la nostalgia de la patria o incluso la esperanza del regreso. Muestra de ello fue la escritora y dirigente anarquista Federica Montseny, de quien se encuentran expuestos la mayoría de los títulos. "Gran parte de esta explosión literaria fue causada por Montseny, que nació en una familia dedicada al periodismo y a la edición", aclara Campillo. Fue, asimismo, ministra durante la Segunda República, convirtiéndose en la primera mujer en ocupar un cargo de estas características.

La retirada a través de alambradas

En el punto álgido de 1939, Toulouse albergaba a más de 20.000 españoles cuando su población era de 200.000. Los testimonios, por tanto, irían en consonancia con el sentimiento general de indignación y desamparo. Las alambradas, la arena, el viento y el frío se convirtieron en protagonistas. Así lo demuestra Padre Nuestro, un poema escrito por Juan de Pena, dirigido a un Don Quijote erigido como patrón laico de los exiliados.
Es quizá esta parte, la de la retirada, la más cruda de la muestra. "El río humano continuaba desbordándose sobre Francia. Nada había previsto ni preparado para ellos", escribió Federica Montseny en Pasión y muerte de los españoles en Francia. Esta huida supuso el desmoronamiento total de la república y de su presidente, Manuel Azaña, que presentó su dimisión el 27 de febrero de 1939.
Refugiados españoles en la estación de Toulouse en febrero de 1939
Refugiados españoles en la estación de Toulouse en febrero de 1939 GERMAINE CHAUMEL | ARCHIVOS MUNICIPALES DE TOULOUSE
Los protagonistas de la catástrofe deambularon hacia la frontera, soportando el trato recibido por las autoridades francesas y el internamiento masivo en campos de concentración improvisados. La desesperanza era todavía más cruel si cabe que la derrota. Mateo Santos, F. Contreras o la ya mencionada Montseny, todos presentes en la exposición, son testigos en primera persona de la crudeza del momento.

La libertad sexual y otros temas actuales

Para muchos el destierro no llevó a una mejor vida, sino a al trabajo forzado y al aislamiento. Sin embargo, todo cambiaría a partir de agosto de 1944 con la liberación de Francia. La victoria trajo el optimismo y, con ello, un gran auge de publicaciones culturales que lleva a recuperar referentes culturales como Lorca, Machado o Unamuno. También de hacer balance, de recordar a los caídos y de mirar hacia un posible futuro alejado del fascismo.
De izquierda a derecha: Julio R. Barcos (1883-1960) ‘Libertad sexual de las mujeres’ (1948); Federica Montseny (1905-1994). ‘La soif infinie’. Toulouse, CNT; Federica Montseny (1905-1994). ‘Cien días de la vida de una mujer: jaque a Franco’ (1949)
De izquierda a derecha: Julio R. Barcos (1883-1960) ‘Libertad sexual de las mujeres’ (1948); Federica Montseny (1905-1994). ‘La soif infinie’. Toulouse, CNT; Federica Montseny (1905-1994). ‘Cien días de la vida de una mujer: jaque a Franco’ (1949)
"Me llamó mucho la atención la modernidad de ciertos temas, de género, de transmisión sexual, de cómo cuidar a nuestros hijos… Era la inquietud intelectual de gente que no tenía nada", explica por otra parte Pedro de Basterrechea, director del Cervantes de Toulouse.
De hecho, se pueden apreciar publicaciones recuperadas por los exiliados como Las enfermedades y sus remedios (1948), de Oscar Lavilleneuve; o Libertad sexual de las mujeres (1948), de Julio R. Barcos, un activista libertario argentino luchador por los derechos de los niños y las mujeres. En esta obra, advertía de la represión histórica sobre las mujeres y llamaba a incrementar su participación en la vida social y política.
No obstante, la finalización de la Segunda Guerra Mundial no trajo consigo la clausura del franquismo. El régimen dictatorial resistió, y no solo eso: el nuevo contexto de la Guerra fría hizo que los países occidentales lo aceptaran. A partir de entonces, pocos creyeron en un retorno que, como demuestra su próximo 80º aniversario, aún continúa en proceso de curación.
Vista general del interior de un barracón, campo de Bram.
Vista general del interior de un barracón, campo de Bram. AGUSTÍ CENTELLES | CENTRO DOCUMENTAL DE LA MEMORIA HISTÓRICA, ARCHIVO CENTELLES