La Asociación Pozos de Caudé ha iniciado este miércoles los trabajos de exhumación de la fosa común número VII del Cementerio Municipal de Alcañiz, para tratar de identificar, con las pertinentes pruebas de ADN, los restos de cuatro vecinos de Foz Calanda reclamados por sus familiares al amparo de las vigentes leyes de Memoria Histórica y Memoria Democrática según ha indicado el Consistorio en nota de prensa.
Según los albaranes del cementerio alcañizano, los nombres de dos de los buscados figuran como fusilados y enterrados en la capital bajoaragonesa el 15 de noviembre de 1939, durante la represión que llevó a cabo el bando franquista vencedor de la Guerra Civil una vez finalizada la contienda.
Tras la preceptiva solicitud de los familiares de los fozcalandinos, Pozos de Caudé solicitó y obtuvo los permisos legales necesarios para buscar los restos de los cuatro desaparecidos en el osario común del Cementerio de Alcañiz donde podrían hallarse a tenor de diversas pruebas documentales que las catas deberán confirmar.
Este miércoles han participado en las exhumaciones miembros de la Asociación con su presidente, Francisco Sánchez, al frente, además de arqueólogos, técnicos y voluntarios de la entidad y personal y maquinaria de la Brigada Municipal de Obras y Servicios del Ayuntamiento de Alcañiz.
También ha acudido a conocer los trabajos la concejala delegada del Cementerio alcañizano, Susana Mene, quien ha indicado que “el Ayuntamiento es muy sensible con este tema, han pasado muchos años y tenemos que hacer todo lo que esté en nuestra mano para facilitar que puedan ser enterradas dignamente todas las personas desaparecidas de la Guerra Civil y represión franquista que puedan estar en fosas comunes de nuestro cementerio”.
Además de otras colaboraciones, Mene ha recogido la solicitud que le ha expresado esta mañana Francisco Sánchez para que todas las personas que crean que pueden tener a familiares enterrados en la fosa común VII del Cementerio Municipal de Alcañiz se pongan en contacto con el Ayuntamiento, quien les redirigirá a la Asociación Pozos de Caudé. La concejal ha relatado que, según la asociación, “es casi seguro que haya decenas de personas del Bajo Aragón histórico enterradas en la fosa común número siete que podrían haber sido fusiladas en el cementerio de Alcañiz”.