En las excavaciones realizadas entre 2014 y 2015, la Coordinadora por la Memoria Histórica de Burgos localizó cuatro fosas en el Monte de Estépar, de las que recuperó 96 cuerpos de burgaleses represaliados durante los primeros meses de la Guerra Civil Española. Una pequeña parte de las más de 400 que, según la documentación analizada, habrían sido asesinadas y enterradas en fosas comunes en Estépar.
Ahora, la coordinadora centra sus esfuerzos en identificar los restos recuperados. Los nombres de los represaliados los tienen, pero la dura tarea es ser capaces de asignarlos a un grupo de restos. Hasta el momento solo se han identificado cinco y, por ese motivo, los 25.000 euros del convenio suscrito con el Ayuntamiento de Burgos se van a destinar a continuar con los trabajos en el laboratorio.
Así lo explicó Soledad Benito, la presidenta de la Coordinadora por la Memoria Histórica en el acto de renovación del convenio municipal, quien indicó que recientemente se han enviado nuevas muestras de ADN de familiares y 27 restos óseos de los recuperados (y que se encuentran enterrados en un panteón financiado por la coordinadora en el cementerio de Estépar) para repetir las muestras.
«Estamos esperando resultados y buenas noticias», apunta Benito. Por su parte, el alcalde, Daniel de la Rosa, se ha comprometido a seguir colaborando en cualquier proyecto de exhumación e identificación de restos que esté vinculado a la capital. En el caso de Estépar se sabe que la mayoría de los represaliados procedían del penal de la capital, y eran burgaleses.
De la Rosa ha insistido en que, «como alcalde socialista es un orgullo» apoyar el trabajo de la coordinadora, en una sociedad como la burgalesa que «entiende la necesidad de dignificar y recuperar la memoria de las víctimas del golpe de estado y la represión franquista». El regidor ha recordado que el convenio nació gracias a las presiones del PSOE cuando el PP se quedó en minoría en el Ayuntamiento, en el año 2015.
Excavación en la Cartuja
Del mismo modo, Daniel de la Rosa ha valorado que se esté abordando una revisión de la Ley de Memoria Histórica, «porque queda mucho por hacer» pese a lo que se ha avanzando en los últimos años. Y, en concreto, ha destacado tanto que se puedan enjuiciar los crímenes del franquismo como que el Estado apoye la financiación de la búsqueda de fosas comunes y exhumación de cuerpos.
Precisamente, el Ayuntamiento de Burgos es la «herramienta» sobre la que se ha sustentado la excavación en la Cartuja, que cuenta con una subvención de 3.000 euros de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), y que ahora se encuentra paralizada. Según ha explicado De la Rosa, tras el primer intento fallido (buscaron en la posible ubicación de la fosa pero no encontraron nada), ha habido un cambio de criterio por parte de la orden de los cartujos y no se ha podido seguir buscando.
La excavación, impulsada por la Agrupación de Familiares de Represaliados en la Cartuja de Miraflores, solo ha gastado 2.000 euros del total de la ayuda y, si no se prosigue con el proyecto, hay riesgo de perderla, insiste De la Rosa. Sin embargo, para ello necesitan que la Cartuja les dé permiso para trabajar porque la fosa, que está documentada, se ubicó en su momento dentro de su propiedad.
Demasiado tarde
No es la primera vez que las asociaciones para la recuperación de la memoria histórica, en su mayoría impulsadas por familiares de las víctimas, se encuentran con una traba de estas características. En la coordinadora recuerdan que tienen parada una excavación en Sasamón porque no consiguen la autorización de los propietarios de las parcelas, agrícolas y privadas.
Están esperando a las indicaciones de la Junta para realizar una expropiación temporal que les permita excavar y, como mínimo, será un año de retraso. Un año que es mucho tiempo pues la hija de una de las víctimas tiene más de 90 años y todo lo que se alargue el proceso es tiempo extra. «Pasan los años y vamos demasiado lentos», lamentan. «Se ha esperado demasiado» para reparar el herida del Franquismo y, poco a poco, van desapareciendo los familiares que, además, tienen información directa de lo ocurrido.
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada