“Nosotros trabajamos sobre toda una masa de cuerpos, así que debemos hacerlo sobre unos andamios y solamente apoyamos los pies, pero nunca el cuerpo”
“Existen evidencias claras de que son muertes violentas. Los cuerpos tienen disparos en la cabeza. Las piernas y los brazos los tienen rotos por los disparos recibidos. En cuanto a la edad de los cuerpos, los hay de todas las edades, y algunos muy jóvenes. Hoy mismo hemos encontrado un chico que no tenía ni siquiera 18 años”.
La Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica (ARMH) tiene su origen en la localidad leonesa de Priaranza del Bierzo. En octubre del año 2000 se realizó una exhumación de una fosa común donde se hallaron restos de 13 republicanos civiles asesinados en 1936. Tras solicitar ayuda para la búsqueda de desaparecidos, se decidió crear esta Asociación.
Hoy, la ARMH se encuentra trabajando en una fosa del cementerio del Carmen en Valladolid. Julio del Olmo, presidente y arqueólogo de la ARMH de Valladolid, declara en una entrevista para Noticias Castilla y León, que es una fosa común de un espacio de tres metros por tres metros y medio. “Sabemos que todavía tenemos más profundidad, aunque no podemos determinar cuántos cuerpos más encontraremos” comenta Julio. Trabajan sobre una profundidad de 1,7 metros sobre el suelo original, y esperan llegar a los dos o incluso tres metros.
“Nosotros trabajamos sobre toda una masa de cuerpos, así que debemos hacerlo sobre unos andamios y solamente apoyamos los pies, pero nunca el cuerpo” asegura Julio. Los cuerpos se encuentran amontonados unos sobre todos en distintas posiciones, y en tan sólo un día, han logrado hallar un total de 60 restos de los cuales, ya han sacado más de 40 cuerpos. La labor es costosa, no es trabajo de un día comentan los trabajadores.
Están seguros de que debajo hay más restos, porque existen huecos que indican que aún no se ha llegado a la profundidad. “Si hay más profundidad, hay más cuerpos” dice Julio del Olmo.
Los cuerpos encontrados suelen estar sueltos y en pocas ocasiones están dentro de un féretro. “Ahora mismo estamos sacando un féretro en el que había dos cuerpos” aseguran. Para evitar las infecciones y los malos olores, las paredes se encuentran impregnadas de cal.
El proceso “es exactamente igual que en cualquier otra intervención arqueológica, limpiamos, individualizamos, seleccionamos y fotografiamos. Hacemos exactamente lo mismo”.
La ayuda de más de 5.000 voluntarios – familiares, profesionales de la arqueología y antropología, historiadores, documentalistas e incluso estudiantes – ha hecho posible que desde el año 2000, la ARMH haya exhumado más de 150 fosas por toda España y haya recuperado más de 1.400 víctimas de la dictadura franquista.
La Asociación recuerda con orgullo uno de sus hitos más importantes. Tuvo lugar hace 16 años en la comarca de El Bierzo, en el que reunieron a más de 20 voluntarios de varios países del mundo y donde se abrieron 4 fosas comunes.
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