El Salón de Actos de la Casa de Cultura de Laredo acogerá el próximo jueves 29 de enero a las 19:30 horas la presentación del libro ‘Emilia Susana, Historia de una familia: Emigración, República, Guerra Española’, una obra que recoge la memoria viva de una familia dividida por el exilio y golpeada por la represión franquista.
Organizada por la asociación Memoria de Laredo, la presentación contará con la participación de Anabel Rascón, una de las coautoras del libro y descendiente directa de los protagonistas. El relato ha sido elaborado conjuntamente por tres familiares —la castreña Anabel Rascón y sus primas argentinas Regina Sanguinetti y Susana Muerza—, desde España y Argentina, a partir de los testimonios orales transmitidos entre generaciones y contrastados con documentación procedente de archivos y organismos oficiales.
Dividido en trece capítulos, el libro combina narrativa personal e investigación histórica para reconstruir las vivencias de la familia durante la Segunda República, la Guerra Civil Española y el posterior exilio. Una de las historias más conmovedoras es la del padre, quien murió a los 99 años sin haber conseguido saber qué ocurrió con los cuerpos de varios de sus hijos, desaparecidos durante la contienda.
La historia arranca en Urdiales, entonces una pedanía de Castro Urdiales, donde el patriarca se había asentado procedente del barrio de Hoz de Marrón, en Ampuero, junto al Santuario de la Bien Aparecida. La familia regentaba la taberna La Flor de Urdiales, que funcionaba como espacio de reunión y punto de información vecinal, y que refleja el dinamismo social y político de la época en Cantabria.
La narración atraviesa las etapas de emigración, la proclamación de la Segunda República, la Guerra Civil y la posterior represión, que se ceba especialmente con los varones del núcleo familiar.
UNA REPRESIÓN EJEMPLARIZANTE
El libro se integra en la memoria democrática de Castro Urdiales, la primera localidad cántabra en ser ocupada por los sublevados en 1937. En aquel momento, Castro era la tercera localidad más poblada de Cantabria, con una destacada vida política, social y sindical, impulsada por sectores como la minería, el ferrocarril y la pesca, esta última modernizada gracias a la adopción del motor de vapor, siguiendo el ejemplo de los pescadores vascos. Esta modernización técnica y política convirtió a la villa en un objetivo de la represión franquista.
La obra confirma las investigaciones realizadas por el Colectivo Memoria de Laredo, que en octubre estuvo en Castro Urdiales con la exposición ‘Un proyecto para la memoria local’. Según el colectivo, la represión en Castro fue «ejemplarizante», con juicios sumarísimos que buscaban infundir miedo más que aplicar justicia. «El libro viene a confirmar nuestra teoría de la necesidad de profundizar en el estudio de la represión en Castro y la obligación de realizar actos de Reparación de algunos de los casos más graves», señalan.
Uno de los episodios más duros relatados en el libro es el juicio y la posterior ejecución de diez hombres entre el 5 y el 7 de diciembre de 1937, condenados a muerte y fusilados el 14 de enero tras la aprobación del dictador. Fueron enterrados en una fosa común cercana al Cementerio Municipal, donde aún permanecen 87 años después, sin identificación ni homenaje público.
La publicación también aborda la situación en Laredo, donde se intentó una represión similar. Una denuncia previa a la entrada de las tropas franquistas no tuvo el efecto deseado, ya que las personas señaladas estaban huidas o en el frente. Finalmente solo fue detenido el primer teniente de alcalde, quien, tras un proceso plagado de irregularidades, fue condenado a garrote vil en Santoña.
El libro está disponible en Amazon y en librerías locales de Castro Urdiales, como Chus y Arte Libro, y se plantea como una herramienta para contribuir a la recuperación de la memoria histórica y promover medidas de reparación simbólica en casos todavía silenciados.
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