Argentine Judge Orders Arrest of Spanish Ex-Officials

Juez argentino órdenes de detención de españoles ex funcionarios Publicado: 02 de noviembre 2014 09:39 AM PST The New York Times, Jonathan Gilbert, Noviembre 1, 2014 BUENOS AIRES - Un juez de Argentina ha ordenado la detención de 20 ex funcionarios españoles acusados ​​de torturar a los disidentes durante la dictadura de Francisco Franco, de 1939 a 1975, la renovación de los esfuerzos para perseguir los casos de abusos contra los derechos humanos más allá de las fronteras del país. El juez, María Romilda Servini de Cubría, dijo en su fallo la noche del viernes que estaba invocando el principio de jurisdicción universal para los temas de derechos humanos en contra de los españoles, que incluyen a los ex ministros José Utrera Molina, 88, y Rodolfo Martín Villa, 80. Los permisos de tenis principales para investigar las acusaciones de violaciones de los derechos humanos en países extranjeros. Un juez español, Baltasar Garzón, utiliza el principio de acusar a un capitán de la Marina argentina que ahora está cumpliendo una pena de prisión en España tras ser declarado culpable de abusos contra los derechos humanos en 2005. En la década de 1990, el juez Garzón también trató de procesar a Augusto Pinochet, el el ex dictador chileno. La jueza Servini de Cubría se pide la extradición de los ex funcionarios "a la Argentina para que pueda interrogarlos sobre las acusaciones de abusos contra los derechos humanos. Españoles que afirman que fueron víctimas de tortura están buscando justicia aquí porque estaban bloqueadas por una ley de 1977 de amnistía aprobada en España como una forma de suavizar el retorno del país a la democracia. Ellos presentaron una demanda en Buenos Aires en 2010. Hace una década, Argentina anuló las leyes de amnistía que protegían similares funcionarios militares que supervisaban una "guerra sucia" contra las guerrillas y las personas asociadas con la ideología de izquierda durante la dictadura de 1976 a 1983 en el país. Alrededor de 30.000 personas fueron secuestradas y asesinadas. Jueces aquí posteriormente se trasladaron a enjuiciar a los funcionarios acusados ​​de violaciónes de derechos humanos, incluso agilizar algunos casos, y se han registrado más de 400 condenas. Los ensayos continúan. Organizaciones de derechos humanos también han sido capaces de localizar a las personas que nacieron en centros de tortura de los militares, llevados de sus madres y criados por las familias de los funcionarios del gobierno y militares. Una asociación en España que ha empujado el caso de los demandantes dijo que el fallo de la jueza Servini de Cubría representó un "progreso significativo" en su lucha por la justicia. "Celebramos el sistema judicial de Argentina actuando en nombre de las víctimas de la dictadura de Franco," dijo en un comunicado. La jueza Servini de Cubría ha estado trabajando en el caso desde 2010, y viajó a España en junio para reunir pruebas y testimonios de algunos de los cerca de 150 demandantes. Ella emitió sus primeras órdenes de arresto en contra de un puñado de ex funcionarios policiales españolas el año pasado. Pero dos de los hombres están muertos, y los tribunales de España se negó a extraditar a los otros dos. Sr. Utrera Molina , que fue ministro de vivienda bajo el franquismo y luego secretario general de su partido en 1974 y 1975, es acusado de firmar la sentencia de muerte de Salvador Puig Antich, un anarquista que fue ejecutado en 1974 con un garrote. El señor Martín Villa , que era ministro de Trabajo entre 1975 y 1976, es acusado de ser responsable de la represión policial de la protesta de trabajadores en marzo de 1976, lo que llevó a la muerte de cinco personas. Las víctimas y sus familias llegaron aquí el año pasado, la celebración de reuniones con políticos y prestar declaración ante el juez Servini de Cubría. Después de declararse con ella para investigar el papel de señor Utrera Molina, en la muerte de su hermano, Merçona Puig Puig Antich dijo: "Yo le he pedido a la justicia para que podamos hablar de estas cosas en nuestro país y cerrar este capítulo de una manera sana , porque en este momento que no es el caso ".