http://www.ecorepublicano.es/2016/04/el-partido-comunista-frances-rinde.html
Por Gema Delgado | Mundo Obrero
En la fachada de la sede del Partido Comunista en París, una placa recuerda a los miles de voluntarios franceses y extranjeros que pasaron por allí para enrolarse en las Brigadas Internacionales “con el fin de ayudar a la república española, víctima de un golpe de Estado del general Franco, sostenido por Hitler y Mussolini”. Este fue, según recuerda la placa, “el primer acto de resistencia internacional contra el fascismo”.
En la fachada de la sede del Partido Comunista en París, una placa recuerda a los miles de voluntarios franceses y extranjeros que pasaron por allí para enrolarse en las Brigadas Internacionales “con el fin de ayudar a la república española, víctima de un golpe de Estado del general Franco, sostenido por Hitler y Mussolini”. Este fue, según recuerda la placa, “el primer acto de resistencia internacional contra el fascismo”.
Nadie sabe exactamente cuántos fueron. Unos historiadores hablan de 60.000 brigadistas otros de 35.000. Sí se sabe que al menos unos 9.000 o 10.000 fueron franceses, que hubo muchos alemanes y austriacos (5.000), italianos (4.000) Algunos que ya estaban en España, exiliados de sus países donde había triunfado el fascismo, el nazismo o había dictaduras, empezaron a luchar con el Frente Popular desde el primer momento. Vinieron de países lejanos, como narra el himno de los brigadistas. De Gran Bretaña llegaron unos 2.500 voluntarios, 2.000 de Estados Unidos, 1.500 de Canadá, 1.200 cubanos. También acudieron de Polonia, Albania, Checoslovaquia, Hungría, Suecia, Chile, Nueva Zelanda, México… hasta un total de 53 países. Se calcula que 15.000 de ellos acabaron prematuramente su vida aquí.
El Partido Comunista Francés fue fundamental no sólo para la creación de las Brigadas sino para su funcionamiento. El PCF fue la sede internacional de reclutamiento por el que pasaron todos los voluntarios de la libertad para “combatir valientemente por la libertad y la democracia al lado del pueblo español”. Allí llegaba la documentación tramitada por el gobierno republicano español, y desde París viajaban en tren hacia Barcelona, la primera parada, para continuar hasta Albacete donde estaba el cuartel general de las Brigadas.
La iniciativa de su creación fue de la Internacional Comunista pero en ella participaron, además de “comunistas, socialistas, anarquistas, republicanos, hombres de distinto color, de ideología diferente, de religiones antagónicas, que amando todos ellos profundamente la libertad y la justicia, vinieron a ofrecerse a nosotros incondicionalmente”, como dijo Dolores Ibárruri en el multitudinario acto de despedida que el 1 de noviembre de 1938, en Barcelona, puso fin a su participación oficial en la guerra civil española. Fue un intento de pacificación que incluía la retirada de todas las tropas extranjeras en el conflicto pero que Franco no cumplió.
Este año, en octubre, se cumplen 80 años de la creación de las Brigadas Internacionales y el PCF les ha rendido homenaje en su sede el pasado 2 de abril. Tras una ofrenda floral, el secretario Nacional del PCF y presidente del Partido de la Izquierda Europea (PIE), Pierre Laurent, animó a “continuar el trabajo político de pasar esta llama de generación en generación”, recordando lo duro que fue conseguir el reconocimiento de la memoria de los brigadistas, restablecer la verdad de su combate y meterlos en la historia…. En los años 50 se les prohibía ejercer funciones públicas”.
Explicó que los brigadistas fueron a luchar para asegurar la legítima defensa de un gobierno constitucional, algo que no fueron capaces de hacer los estados. Y también recordó las palabras de Dolores Ibárruri cuando ésta llegó a París, con una delegación del gobierno español, para pedir al pueblo francés que les ayudara a hacer cambiar la decisión del gobierno galo que se negó a vender las armas que el gobierno español necesitaba para defenderse.
La libertad de todos los pueblos se decidía en España
Pierre Laurent rescató la parte del discurso en la que Pasionaria alertaba de que la suerte de la libertad de todos los pueblos se decidía en España y del peligro de dejar caer al pueblo español “revelando la verdad de lo que pronto iba a pasar en Europa”. Laurent rememoró aquellas históricas palabras de Dolores Ibárruri: “Hoy somos nosotros, pero si se deja que el pueblo español sea aplastado, seréis vosotros, será toda Europa la que se verá obligada a hacer frente a la agresión y a la guerra”. (…) Ayudadnos a impedir la derrota de la democracia, porque la consecuencia de esta derrota sería una nueva guerra mundial, que todos estamos interesados en impedir y cuyos primeros combates se libran ya en nuestro país”.
Como el homenaje llevaba por lema El compromiso internacional ayer y hoy, el líder del PCF lo enlazó con la actualidad: “Hoy también vivimos una crisis democrática y política con la proliferación de las fuerzas nacionalistas y xenófobas en la crisis del ultracapitalismo europeo (…) y de nuevo hay gran peligro para Europa: o conseguimos una fuerza que sea capaz de encontrar un nuevo camino de progreso social o algo extremadamente peligroso puede ocurrir en toda Europa. Hay demasiado silencio y complicidad, por ejemplo con la crisis de refugiados y con discursos muy inquietantes por parte de responsables políticos para defender los intereses financieros”.
Maite Mola, adjunta a la secretaría general del Partido Comunista de España y vicepresidenta del PIE, fue la voz del PCE que expresó la gratitud de los republicanos españoles a los brigadistas y el orgullo del Partido de participar en este homenaje. “Las brigadas internacionales han sido lo más importante que ha pasado contra el fascismo”, y explicó que no fueron sólo los comunistas; también los anarquistas y los socialistas lucharon contra el fascismo, “independientemente de las diferencias políticas, dando ejemplo de cómo hay que construir la lucha internacionalista”.
Argumentó que la lucha contra el fascismo continúa, e identificó la lucha internacionalista hoy con la de los palestinos, saharauis y kurdos, entre otros. Igual que internacionalista, añadió, es la lucha contra el TTIP, la lucha por los derechos humanos, especialmente con la crisis de los refugiados, y la lucha por la emancipación de la mujer.
Si la lucha internacionalista ha sido tradicionalmente antiimperialista, hoy tiene que ser también una lucha contra el capitalismo, ya que éste se ha globalizado y han forjado su propia internacional capitalista. También habló sobre cómo desde el PIE se intenta construir un internacionalismo más amplio y diferente, que acabe con el paro, que construya un mundo mejor… “vamos a construir algo realmente importante que acabe con esta situación”.
Si hace 80 años fue Pasionaria quien demandaba solidaridad con el pueblo español en esta ocasión fue la co-presidenta del Consejo Democrático Kurdo de Francia, Cemile Renklicay, la que pidió solidaridad con el pueblo kurdo: “Los kurdos esperan la solidaridad internacional y que se condene a Erdogan como dictador que reprime a sindicalistas, periodistas, universitarios, humanistas….” Como Pasionaria entonces, hoy Renklicay cuenta que la lucha de los kurdos es una lucha por el futuro de la humanidad y que son ellos los únicos que se enfrentan con el DASH.
Jean-Claude Lefort, presidente de Honor de la Asociación de Solidaridad Francia-Palestina, también explicó ese internacionalismo: “Al defender Madrid, defendíamos París. Los judíos -unos 7.000 brigadistas eran judíos- lucharon en las Brigadas Internacionales porque pensaban que era allí donde se luchaba contra el antisemitismo”.
Durante el homenaje, el documental Madrid before Hanita, de Eran Torbiner, expuso un aspecto de las brigadas menos conocido: el de la lucha contra el fascismo de 300 judíos comunistas, provenientes de Palestina e integrados en las Brigadas Internacionales.
En la conmemoración también participaron Roberto Lamplé, de Amigos de Combatientes en España (ACER), Camille Lainé, del movimiento de Jóvenes Comunistas de Francia y Claude Ven, presidente de l´IHS-CGT Metalugico que habló de los sindicalistas que se alistaron en las Brigadas.
Previamente se realizó la ofrenda floral, un breve acto, presentado por la presidenta de ACER (Amigos de los Combatientes en la España Republicana), y seguido por ARE de RP (Amigos de los Republicanos Españoles en la Región de París) y la vice-alcaldesa de la Alcaldía de París responsable de Memoria y del Mundo Combatiente, junto a familiares de brigadistas y el nonagenario excombatiente del ejército republicano, Daniel Serrano.
Gema Delgado | Mundo Obrero
Fuente: Mundo Obrero
Publicado en el Nº 295 de la edición impresa de Mundo Obrero abril 2016
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada