DESPUES DE LA MONARQUÍA ¿QUE?
Estimados
amigos como Presidente de la
AMHDBLL deseo expresar mi más calurosa bienvenida a todos
cuantos asisten a este acto y en especial a las personalidades presentes y a la
numerosa delegación de nuestros amigos del exilio francés, miembros de la
asociación FFREEE y de la
Amicale de Guerrilleros Españoles en Francia.
Después de un
año de trabajo hemos conseguido la colaboración de destacados historiadores
extremeños a los cuales nos faltan
palabras de agradecimiento. Fruto de este trabajo es la revista monográfica “El
genocidio franquista en Extremadura” que hoy presentamos en este acto y que
refleja la terrible represión de los golpistas fascistas.
Este acto será
presentado `por Agustina Merino
componente de nuestra Junta Directiva. Tina nació en Villanueva de la Serena (Badajoz) población
que alcanzó la cifra de más de 700 represaliados entre ellos varios fusilados
de su familia. Es doctora en Geografía e Historia de Educación Secundaria y
ejerce de profesora en un Instituto de Esplugues de Llobregat.
Hecho este
breve preámbulo deseo manifestar clara y en voz alta que la Memoria Histórica
sirve para aprender los valores republicanos por los que merece la pena luchar,
justo para que la sangre de los que murieron por la República tenga sentido.
Pero también para transmitirlo a nuestros descendientes, como herencia de
nuestros padres y abuelos, pues vivimos en una sociedad con escasos valores
morales y democráticos. Es por ello que deseo expresar algunas reflexiones
sobre el contencioso pendiente de Monarquía o República y del momento actual
que atraviesa nuestro país.
La fecha de
este acto no es casual pues el 6 de octubre de 1934 tuvo lugar en Barcelona la
proclamación del Estado Catalán dentro de la República Federal
Ibérica por parte del presidente de la Generalitat de Catalunya, Lluis Companys,
Desde la
transición, cada vez menos modélica y más contestada incluida la Monarquía , la corrupción
en España esta pervirtiendo la naturaleza y los fines de la vida política. La
transición es un síntoma inequívoco del cierre en falso para alcanzar un
sistema político democrático sin hacer una limpieza dentro de las instituciones
franquistas. El caso Garzón es más que evidente. En este contexto es imposible
una plena reconciliación teniendo decenas de miles de cadáveres en las fosas
comunes. La transición no fue más que la restauración de la Monarquía borbónica
heredada del Franquismo en donde el Monarca juró fidelidad a los principios del
Glorioso Movimiento Nacional causante de la sublevación fascista contra la
legalidad republicana y de una larga y sangrienta dictadura de casi 40 años. La
transición se va agotando victima de sus
propios fracasos al no resolver los problemas de fondo que aún siguen latente
en España.
Nos encontramos
en un nuevo ciclo de cambio histórico, de decadencia sin solución, que durará
más o menos, pero que es irreversible. Es un problema de estructura tanto
política como económica. Por ello, una parte importante de la ciudadanía
comienza a exigir un nuevo proceso constituyente, para abolir todo tipo de
privilegios como en la actualidad ostenta la casa real, la iglesia, fundaciones
de carácter franquista y determinados políticos pertenecientes a las cúpulas de
sus partidos, mayoritariamente del PP.
Hoy la actual
constitución no solo esta desfasada sino que fue fruto de los intereses de los
vencedores de la sublevación fascista del 36. Si se pretende cambiar el sistema
actual a través de la constitución vigente será más de lo mismo. Este es un
país en que la libertad, la participación y la igualdad se encuentran
mediatizadas y en donde muchos viven de forma indecorosa desde 1979 a través de
los presupuestos del Estado o han convertido su función pública en un medio de
vida y subsistencia. Corresponde a la ciudadanía asumir la tarea de saneamiento
político y moral de la sociedad, que ejerzan de ciudadanos y no de súbditos, el
cumplimiento efectivo de los derechos humanos, de la paz, de la federalidad, de
la laicidad, de la igualdad y ello es incompatible con la presencia de un
soberano que es inmune ante la Ley
y al igual que Franco solo tiene que responder de sus actos ante Dios.
De la
transición se hizo virtud de la necesidad, para al final convertirse en un
monasterio de virtuosos atrapados en los entresijos políticos y económicos del
sistema neoliberal en el que la izquierda también tiene su cuota de
responsabilidad.
La voracidad
del capitalismo ha engendrado una crisis sin precedente en la que el país esta
totalmente arruinado y el gobierno en manos de los llamados mercados, es decir
de los intereses principalmente alemanes, únicos beneficiarios de la
implantación del euro. Por ello será difícil devolver la deuda contraída y los
intereses que provoca la misma y según destacadas personalidades no solo la
deuda no debe pagarse sino que plantean la salida del euro. Esto unido a los numerosos casos de
corrupción que también afectan a la familia real, los privilegios y los gastos
suntuosos del gobierno y las autonomías, los recortes del gobierno del PP y de CIU
para desmantelar y privatizar las conquistas sociales, el incremento del
desempleo que afecta a amplias capas de la sociedad, los desahucios, el paro
juvenil que afecta a un 50% de nuestros jóvenes, que la extrema pobreza alcance
un 20% de la población y la progresiva desafección hacia la clase política van
determinando que el sistema implantado desde la transición presente síntomas de
agotamiento y la ciudadanía se manifieste en las calles de todo el país,
desengañada e indignada, de que la crisis recaiga en los de siempre y por ello
empiezan a reivindicar la dimisión del gobierno del PP y abrir un nuevo proceso
constituyente.
Aunque estamos
en las primeras etapas del desarrollo de la crisis el sistema capitalista no
puede reiniciarse a pesar de los esfuerzos de los bancos centrales de la Comunidad Europea
y de que el gobierno del PP inyecte dinero público a las entidades financieras
responsables de la actual crisis sin atribuirles responsabilidades de ninguna
clase, entre otras, la cárcel a los ladrones y estafadores que han arruinado al
país y los ahorros de millares de modestos accionistas, como el caso Bankia que
ha dejado un agujero de 23.500 millones de euros.
Todo ello
costará tiempo y esfuerzos pero seguro estoy que la ciudadanía continuará dando
pasos importantes para avanzar hacia un Estado Federal configurado en la III República
Iberica adaptada al siglo XXI.
Muchas
gracias. VIVA LA REPÚBLICA
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