Ferran Aisa con la Editorial Entre Ambos/Edicions de 1984 nos acerca su particular narración, su crónica sobre estos hechos, la huelga que afectó a la Canadiense, la principal compañía que abastecía eléctricamente a Barcelona….fruto de dicha huelga, dura y mirando “cara a cara” desde el trabajador al empresario…se consiguió un hito: una jornada de ocho horas que, ahora, se está esfumando….
Este libro es un trabajo intenso y verdadero, de investigación y desarrollo de un acontecimiento histórico que marcó a un tiempo y sentó historia.
Lo que nos dice y nos explica la sinopsis de este libro:
La conquista de la jornada laboral de las ocho horas fue el resultado de una lucha titánica del movimiento obrero organizado que, desde los lejanos años de la Primera Internacional, se reivindicaba. En este aspecto reivindicativo se desarrolló la historia de la Confederación Nacional del Trabajo, desde sus inicios fundacionales en 1910 hasta el Congreso de Sants de 1918, cuando se organizaron los sindicatos únicos siguiendo los pasos anarcosindicalistas de acción directa, federalismo, solidaridad y apoyo mutuo. El ensayo también hace un recorrido por la historia de la lucha de las mujeres trabajadoras para el reconocimiento de condiciones igualitarias con los hombres. La conquista de las ocho horas seguía siendo un hito de todas las reivindicaciones obreras de España, pero fue en Cataluña donde un conflicto de tipo local como el de la Canadiense se convirtió́ en el gran caballo de batalla de los nuevos sindicatos únicos de la CNT. Los obreros, con una gran inteligencia, supieron desarrollar una estrategia esencial para vencer las perspicacias de la patronal y des- menuzar la represión gubernamental. Precisamente fue después de esta conocida huelga cuando el Gobierno español, presidido por el conde de Romanones, el 3 de abril de 1919 firmaba el Real decreto de la jornada de ocho horas o de cuarenta y ocho horas de trabajo semanal. La lucha obrera fue larga, ya que se enfrentaron a una intransigente patronal que aplicó su propia «ley», condenó a los trabajadores al hambre con los lockoutsy financió pistoleros a sueldo.
El autor, Ferran Aisa:
Es uno de los historiadores más importantes de la Cataluña y la Barcelona contemporáneas. Es premio Ciudad de Barcelona de Historia y ha sido profesor de historia del ACCAT, documentalista de exposiciones, guionista de documentales y autor de numerosos libros entre los que destacan Camins utòpics. Barcelona 1868-1888 (coescrito con Mei M. Vidal); La cultura anarquista a Catalunya; Contrarevolució. Els Fets de Maig de 1937(publicados por Edicions de 1984), Una historia de Barcelona. Ateneu Enciclopèdic Popular, 1902-1999; República, guerra i revolució. L’Ajuntament de Barcelona (1931-1939) o Viaje por la España franquista (1969-1970).
Nosotros ya hemos conversado varias veces con este autor:
Cazarabet conversa con Ferran Aisa:
-Ferran, estamos delante de un libro que narra, cuenta como en una crónica, qué fue la Huelga de la Canadiense, cómo se dio, por qué , qué supuso…¿Qué te acercó a este episodio que, verdaderamente, creo es mucho más importante de lo que se le ha tratado? ; ¿qué fue lo que te llamó la atención, desde un principio de esta huelga para que quisieres investigar, estudiar y darla a conocer?; ¿por qué me da, leyendo tu libro, así como algún artículo u otras publicaciones que marcó y fue un punto que marcó a la historia?
-En un principio creí que era importante remarcar esta historia obrera por su significado, y, naturalmente, por conmemorarse su centenario. Luego porque hay que ir recordando periódicamente los grandes acontecimientos llevados a cabo por la clase obrera. Y éste, lo es, y tiene un punto que nos demuestra que con tesón y constancia se puede vencer. Creo que fue Durruti quien dijo aquello de que empezar un lucha ya es importante, pero si esta lucha a más se lleva hasta las últimas consecuencias el resultado siempre acaba siendo positivo.
-¿Por quién estaba participada la popularmente conocida como La Cadadiense…?. Además el nombre de La Canadiense es como se la conocía a pie de calle…
-La Canadiense era el nombre con que era conocida la principal empresa de luz y energía de Cataluña. En 1911 se había constituido en Toronto la Spanish SecuritisCo. Limited, propietaria de diversas empresas de electricidad y de transporte de Barcelona y de Cataluña. Un año más tarde nacía una nueva empresa Barcelona Traction Light and Power Co. Lid., que se hizo cargo de la empresa Riegos y Fuerzas del Ebro, de los tranvías de Barcelona y de los Ferrocarriles de Cataluña. Todo ello bajo los auspicios económicos del Canadian Banck of Commerce of Toronto. De ahí el nombre popular de La Canadiense. Entre las empresas adquiridas por la Canadiense figuraba la principal empresa de luz de Barcelona situada en el Paralelo y conocida como las tres chimeneas. El principal inductor de la empresa era el ingeniero y masón rotario F. S. Pearson, que falleció el 7 de mayo de 1915 cuando iba embarcado en Lusitania en viaje de Inglaterra a Estados Unidos al ser torpedeado el buque por un submarino alemán. El cambio de gerente en la empresa fu a peor, pues mientras Pearson se mostraba abierto y liberal con sus empleados, la nueva dirección se cerró en banda, sobretodo, en contra de la sindicación de los trabajadores.
-Las estructuras de empresas capitalistas, como La Canadiense, se han ido manteniendo porque algunos proyectos de explotación, y recuerdo ahora al que rodeó el tema Castor, con la participación anglosajona, ACS i demás se parece un poco…Todo lo necesario para en revesar tanto la trama que ellos, como empresarios, resulten muy escurridizos a la justicia—en el caso de que la haya—y de esta manera sangren recursos naturales que son de todos y todas y de nadie a la vez y a los trabajadores y trabajadoras de la misma. ¿Qué nos puedes explicar?
-En aquellos momentos, 1919, la CNT y los obreros de la Canadiense se enfrentaron a una potente empresa de capital internacional que era protegida por el gobierno de la nación. La huelga de la Canadiense fue la primera huelga (o una de las primeras) contra una empresa internacional. Hoy en día hay cantidad de empresas de capital internacional o estatal, la globalización ha internacionalizado el Capital pero no la lucha obrera, al contrario está ha menguado y su fuerza no es la misma que la de entonces, ni tan siquiera la de hace unos años. Por otro lado, antes se luchaba contra un patrón o contra una empresa determinada, ahora, con la globalización los verdaderos dueños nunca aparecen porque -como dijo Bauman- vivimos en una sociedad liquida.
-¿Qué caldo de cultivo se dio o se dieron para que obreros y proletarios de La Canadiense diesen el paso hacia la huelga?
-La situación represiva de la empresa había ido en aumento en los últimos años, primero fue contra los obreros que construían la presa de Camarasa (Lleida), los cuales trabajaban en pésimas condiciones por un mísero sueldo. Ellos fueron los primeros que mostraron su indignación contra la patronal de la Canadiense. La protección que tenía la empresa del Estado hizo que enviaran a aquella zona Guardia Civil para vigilarlos. Esto aún aumentó más la indignación e hizo estallar la huelga entre los trabajadores que construía la presa. Pronto encontraron el soporte de la CNT y la huelga se extendió durante el mes de diciembre de 1918 por todas las comarcas leridanas. El segundo paso de indignación obrera tuvo lugar en Barcelona, más concretamente en las oficinas de facturación de la Canadiense. Cuando la patronal quiso hacer fijos a ocho empleados pero rebajándoles el sueldo. Esto motivo el descontento de los trabajadores que fueron a buscar la ayuda de la CNT, cosa que significó el despido de ocho trabajadores. Ante estos hechos represivos el resto de personal de la oficina se solidarizó con los despedidos iniciando una huelga de brazos cruzados. Esto fue el inicio de la huelga de la Canadiense que tuvo una duración de 44 días.
-Háblanos un poco de la experiencia de la que bebieron estos obreros desde la mirada a otras luchas obreras anteriores…Quizás uno de los principales gérmenes fuese o fuera aquella huelga general del 1902…
-Los obreros de 1919 ya disponían de muchos elementos cercanos para saber cómo funcionaba una huelga. A parte de las huelgas sectoriales que se sucedían en los diversos ramos (textil, artes gráficas, carreteros, etc.) en el verano de 1917 se había producido la huelga general propiciada por la UGT y la CNT. Si vamos un poco más lejos nos encontraríamos con la huelga general de 1902 que, aunque se perdió, sirvió para que la clase obrera se volviera a reorganizar. Las sociedades obreras dieron paso al nacimiento de Federación Solidaridad Obrera que tuvo un papel destacado en la Semana Trágica y, posteriormente, en la fundación de la CNT. Por otro lado hay que destacar que desde primeros de siglo el anarquismo jugaba un gran papel cultural entre una parte destacada de los trabajadores. En 1901 se había fundado la Escuela Moderna de Ferrer y Guardia y a partir de 1902 se ponen en marcha cooperativas, mutuas y ateneos. En el campo libertario se suceden la creación de bibliotecas, editoriales y periódicos. Todo ello ayudará a fomentar el pensamiento ácrata entre la clase obrera. Pero lo más fundamental de esta huelga fue la puesta en marcha del Sindicato Único, aprobado en el Congreso de Sants de junio de 1918, cosa que permitió poner en práctica los conceptos del anarcosindicalismo: acción directa, solidaridad, apoyo mutuo…
-Me gustaría que nos acercases a qué papel jugaba en aquellos tiempos la prensa en todo esto, principalmente en la huelga de La Canadiense, teniendo en cuenta que había mucha prensa…sí, de diferentes tendencias, pero, por ejemplo, desde el punto de vista libertario había un amplio abanico…
-La llamada prensa burguesa o de partidos políticos conservadores no se mojó demasiado, al principio silenciaron el conflicto y sólo hablaron de él cuando sufrieron las consecuencias: falta de energía para hacer mover las máquinas, falta de luz en la redacción, censura roja, etc. A partir de entonces la mayoría de periódicos hablaron cada día del conflicto llamado de los electricistas en un principio. Por lo que se refiere a la prensa libertaria está poco pudo hacer pues los principales periódicos Solidaridad Obrera y Tierra y Libertad fueron clausurados. A pesar de ello la CNT lanzó pasquines sobre la marcha de la huelga y editó algún ejemplar de Solidaridad Obrera clandestina. Por tanto, la principal información era la que poseían los trabajadores a través de los diversos comités y subcomités de huelga que se crearon.
-¿Cómo eran los sindicatos y cómo vivieron esta huelga?, ¿les cambió para futras reivindicaciones?
-En aquel momento los obreros estaban asistiendo a la renovación del sindicalismo, los nuevos sindicatos de industria iban a aglutinar con eficacia la lucha contra el Capital. Los Sindicatos Únicos fueron clave para encarar la lucha obrera de la Canadiense, pues los diversos sindicatos de energía, luz, gas se unieron creando el Sindicato Único de Gas, Luz y Electricidad. Esto fue fundamental para llevar a delante la huelga pues todo el sector acabó apoyando a los trabajadores de la Canadiense, por medio de la solidaridad se unieron también otros sectores como el del transporte, el metalúrgico, el textil, los tranvías… Quedando el 70 por ciento de la industria catalana paralizada, la ciudad sin luz y la mayoría de establecimientos comerciales o de espectáculos cerrados.
-Háblanos, por favor, de cómo era la Patronal, en particular la Catalana y la de Barcelona que afrontó la huelga y de alguna manera la cultivo, peso parte de la tierra para que creciese la semilla de la indignación…
-La patronal catalana estaba organizada en el Fomento Nacional del Trabajo, una entidad histórica de una larga trayectoria conservadora pero no radicalizada; pero en su seno apareció una nueva generación de patrones contrarios a las luchas del movimiento obrero y, especialmente, a la CNT. Estos patrones hicieron una escisión en Fomento creando la Federación Patronal Catalana, una entidad mucho más dura y más radicalizada. De esta patronal que no se avenía a negociar con los obreros de la Canadiense y mucho menos con los comités de la CNT, salió el dinero para promover, poco después, los pistoleros a sueldo contra los sindicalistas.
-¿Qué características diferenciales tuvo esta huelga en cuanto a llevarla a cabo por unos y afrontarla por otros?; ¿qué supuso para el ciudadano y ciudadana?
-La diferencia principal con las huelgas anteriores es que se ponía en práctica con toda su fuerza el moderno anarcosindicalismo. La fuerza de la CNT en Cataluña se venía gestando de unos años atrás tuvo aquí su mayor momento de esplendor y ya no lo volvió a tener con tanta intensidad hasta los años de la Segunda República y con la revolución de 1936 durante la Guerra Civil. El ciudadano de a pie tanto si fuera de la burguesía como de la clase obrera sufrieron (unos más que otros, naturalmente), pero la falta de energía, de luz, los comercios de alimentación cerrados, la falta de transporte público…, fue para todos en general.
-Los Lockouts o cierres patronales, ¿cómo repercutieron en la economía local, aunque seguramente la transcendencia fue más allá…?. ¿Pretendían con esta medida infundir miedo, porque es de pensar que los patronos tenías las espaldas muy bien cubiertas, ¿no?
-La venganza por la victoria obrera de la huelga se dejó notar pronto en las decisiones tomadas por la Federación Patronal de aplicar en las empresas el locaut o cierre patronal. Es decir, continuar condenando a la miseria y al hambre a las familias obreras. La Federación Patronal tenía el soporte del capitán general de Cataluña, del gobernador civil y del jefe de policía de Barcelona.
-Y las autoridades sacan “la maza”, respondiendo con contundencia: cárcel, ley de fugas, férrea represión. Explícanos por favor. Cómo y cuándo lo empezaron y cuál era su “hoja de ruta”…
-La represión estuvo en vigor casi desde el primer minuto de la huelga. La negación de los trabajadores a ser militarizados llevo consigo a les detenciones masivas y el cierre en prisión de unos 3.000 obreros. A parte también eran detenidos los comités de huelga, los enlaces y los cobradores de las cuotas sindicales. Sindicalistas populares como Salvador Seguí pasaron más tiempo en la cárcel que libres. Paralelamente a la huelga general que se proclama unos días después de poner fin a la huelga de la Canadiense, aparecen las fuerzas parapoliciales del Somatén y, por otro lado, la policía aplica la ley de fugas, es decir el asesinato de los obreros que han sido detenido son dejados libres y cuando empiezan a caminar son asesinados por la espalda.
-La Semana Trágica ya había puesto, anteriormente en el “ojo del huracán” a Barcelona…seguramente aquel episodio histórico había trascendido aquí en este escenario en 1919.justo cuando Europa había puesto un punto final a una guerra desgarradora…
-Creo que son dos hechos completamente diferentes (aunque complementarios) la llamada Semana Trágica tiene su origen en la protesta de los obreros contra la movilización militar para ir a la guerra de Marruecos. Durante dicha semana se levantaron centenares de barricadas, se incendiaron conventos e iglesias y hubo enfrentamientos violentos entre los obreros, la guardia civil y el ejército. En cambio, la huelga de la Canadiense es una huelga de tipo sindical donde apenas hubo violencia en las calles y se puede decir que en los 44 días que duró, a diferencia de la Semana Trágica, las víctimas fueron muy pocas. Cuando estalla la huelga de la Canadiense en febrero de 1919 la Gran Guerra ya hace unos meses que ha concluido y se nota en la crisis económica que ello origina, pues durante la guerra abundó el trabajo. Ahora el paro era agobiante… Por otro lado, aun coleteaba la revolución soviética con cierta ilusión entre el proletariado y miedo entre la clase burguesa.
-¿Qué destacarías entre todos los actos reivindicativos que rodean y convivían con la huelga de los obreros de la Canadiense?
-La gran solidaridad de los obreros de todos los ramos con los trabajadores de la Canadiense. El apoyo mutuo de las familias obreras y menestrales con los huelguistas tanto durante el conflicto de Camarasa como después con el de la Canadiense.
-Al final llega una jornada de ocho horas…pero coméntanos, ¿qué trampa había detrás de esta decisión del Gobierno Romanones?
-Tras 44 días de huelga y en plena huelga general el gobierno presidido por el Conde de Romanones firmaba un Real Decreto Ley en que se establecía la jornada de ocho horas diarias (o cuarenta y ocho semanales). Era una gran conquista que luego se fue ampliando al conseguirse la llamada semana inglesa (fiesta el sábado por la tarde). La huelga de la Canadiense catapultada por la CNT catalana había conseguido la anhelada jornada de las ocho horas para todos los trabajadores de España. De hecho, los obreros españoles eran los primeros de Europa de alcanzar dicho objetivo laboral. La trampa la estableció la patronal que se negó a aceptar dicho decreto y continuaba maniobrando a su antojo contra los derechos de los trabajadores. Estos tuvieron que continuar luchando para conseguir hacer realidad lo que la ley les había proporcionado. La Federación Patronal Catalana (y la Española) se dedicaron a hacer la guerra a los obreros sindicados en la CNT, potenciaron el llamado Sindicato Libre y crearon grupos de pistoleros que se dedicaron a asesinar militantes anarcosindicalistas. En contra réplica se crearon grupos de acción anarquista que se enfrentaron a los pistoleros o atacaron a su vez a patronos, capataces, esquiroles, etc. Había nacido el pistolerismo que sembró Barcelona de cadáveres, entre los cuales citaremos al abogado republicano Francesc Layret y al secretario del Comité Regional de Cataluña Salvador Seguí “El Noi del Sucre”. En 1923 el capitán general de Cataluña general Miguel Primo de Rivera hacia un golpe de Estado y convertía España en una dictadura con el beneplácito del rey Alfonso XIII.
-¿Qué ganamos todos los trabajadores y trabajadoras del mundo fruto de aquella huelga?. ¿Qué de lo ganado hemos ido perdiendo?
-Un gran respecto reivindicativo por esa titánica lucha que consiguió estas mejoras sociales como la jornada de las ocho horas de trabajo, que siguieron luego con la implantación del reconocimiento retiro obrero, el subsidio de paro y muchas otras mejoras. Todas ellas conseguidas a base de lucha obrera… Hemos perdido el sentido anarcosindicalista de lucha obrera, la concienciación del significado solidaridad obrera, la capacidad de organización.
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Cazarabet
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