Se crea un nuevo espacio de Reflexión y Memoria Histórica.
Este viernes se inauguró oficialmente el Sitio de Memoria ex Cárcel de Cabildo, un lugar que fue centro de reclusión para mujeres entre 1968 y 1977, durante la dictadura militar en Uruguay. Para la ex presa política, Alice Fay, una las mujeres que estuvieron allí detenidas, la inauguración es un momento especial: «Me siento muy emocionada, no solo por los reencuentros entre nosotras, sino también por toda esta gente que nos ha apoyado tanto y que ha sido parte de la recuperación de este lugar», expresó la militante a Dario La R.
El lugar, conocido anteriormente como la Congregación del Buen Pastor, fue cedido en comodato tras un acuerdo con la congregación, permitiendo la restauración del espacio. Este proceso, que se realizó bajo el amparo de la Ley 19.641, ha transformado el sitio en un espacio vivo y accesible para todo tipo de personas. Esta ley, sancionada en 2018, en su segundo artículo declara de “interés general la creación y declaración de los Sitios de Memoria Histórica indicados en el artículo precedente”.
“Esto tuvo lugar a raíz de la gente que trabajamos en memoria desde hace tiempo, que tratamos de impulsarla, tuvimos el apoyo del senador Marcos Carambula y gracias a eso hoy estamos acá y hay otros tantos sitios de memoria”, aseguró. Es en ese mismo sentido que Fay reafirma la importancia de los sitios de memoria en general: «Es importante porque forma parte de la historia de nuestro país. No se trata de victimizarnos, sino de transformar la memoria en algo activo que proyecte el futuro».
Antecedente
La señalización del lugar como Sitio de Memoria tuvo un primer hito el 17 de marzo de 2017, cuando la Comisión Especial de la Ley 18.596 (que buscaba reparar a las víctimas de “la actuación ilegítima del Estado”) colocó una placa en el predio, en homenaje a las mujeres que fueron recluidas allí. Posteriormente, el 17 de julio de 2019, la Comisión Nacional Honoraria de Sitios de Memoria, resolvió declarar como Sitio de Memoria un espacio específico dentro del predio, incluyendo parte del celdario y un patio de visitas. Fay destacó la continuidad de este trabajo: «Esto sigue y va a seguir siempre porque nosotros vamos a desaparecer, pero el lugar de alguna manera es nuestro, a pesar de que es un predio privado». La militante reflexionó sobre el proceso de recuperación: «La primera vez que entramos, realmente no reconocíamos absolutamente nada, porque estaba totalmente derruido. Pero sí, hemos reconstruido la memoria un poco, aunque el espacio nuestro es más pequeño de lo que era en realidad».
Este nuevo Sitio de Memoria, que ahora está abierto al público a través de visitas coordinadas, busca ser un lugar para la reflexión y el aprendizaje, atrayendo a estudiantes, investigadores y visitantes interesados en la historia reciente del país. Según Fay, «a nivel estudiantil hay mucho interés. Han venido gente del exterior también a ver cómo se trabaja». La restauración del lugar, que llevó años de esfuerzo, ha sido un proceso que Fay describe como “impactante” y “necesario para mantener viva la memoria colectiva”.
Específicamente sobre esto Fay advierte que el proceso continuará ahora en etapas: “Nos vamos a ir organizando, porque estamos recién saliendo de esta etapa, que ha sido un trabajo muy, muy grande, realmente el reacondicionamiento del lugar llevó mucho tiempo”, finalizó.
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