divendres, 17 de maig del 2024

Primera marcha al campo de concentración de Casas de Don Pedro (Badajoz)

 https://www.elsaltodiario.com/memoria-historica/primera-marcha-al-campo-concentracion-casa-don-pedro

La iniciativa “Al Alba de la Memoria” pretende recoger el impulso memorialista en la comarca, a la vez que reivindica el 15 de mayo como fecha histórica de la represión y del reconocimiento popular a sus víctimas.

15 MAY 2024 18:10


El pasado domingo, 12 de mayo de 2024, tuvo lugar en Casas de Don Pedro (Badajoz)  la I Marcha “Al Alba de la Memoria”. En un sencillo y emotivo homenaje llevado a cabo en el cementerio municipal de dicha localidad, frente al panteón donde descansan los restos de los represaliados republicanos fusilados, y en presencia de algunos familiares y amigos se llevo a cabo la ofrenda floral en conmemoración de los fusilamientos del 15 de mayo de 1939 y de la exhumación de fecha de 15 de mayo de 1978.

Se consiguió que el día 15 de mayo de 1978 se llevara a cabo la primera exhumación de victimas del franquismo en Extremadura, siendo también una de las primeras de España
Desde ese día, denunciaron, cada vez que los familiares han hecho algún tipo de homenaje han tenido que enfrentar las mismas trabas que en 1978, hasta que por fin se constituyó en diciembre de 2023 la Asociación Republicana Casareña “Tierra y Libertad”, cuyo acto de presentacion tuvo lugar el 16 de marzo de 2024 en Casas de don Pedro, y que presenta entre algunos de sus fines “dar a conocer lo acontecido en el municipio al finalizar la guerra civil con los fusilamientos masivos a los republicanos sumado a la represión, así como el acto tan valiente para la época que supuso la exhumación del 1978. Todo esto, sin obviar la conmemoración a las víctimas y a los primeros en realizar una exhumación en tiempos tan difíciles”.

Posteriormente, la marcha salió desde el cementerio hasta el cortijo de “Las Boticarias”, lugar que sirvió, junto con el Zaldívar, como campo de concentración provisional. Fue en el olivar del cortijo de “Las Boticarias” donde se produjeron los fusilamientos, siendo enterradas las víctimas en una fosa común. Frente al citado cortijo tuvo lugar la intervención de Roberto Carlos Fernández, arqueólogo e historiador, que contó los sucesos acontecidos en dicho lugar, tanto al finalizar la guerra civil como durante el proceso de exhumación de 1978.

La marcha pretende llevarse a cabo anualmente, tomando como destino las diferentes fosas que existieron en el municipio, y pretendiendo acoger en su iniciativa a todos los familiares de los republicanos de la zona de la Siberia Extremeña, con el fin de incentivar la constitución de más asociaciones de similares caracterices por la comarca.
“El quince de mayo de 1939 y el quince de mayo 1978, son fechas unidas por un fino hilo invisible. Ese hilo nos señala el camino. Un camino destinado a que no olvidemos”
El objeto principal, afirmaron desde la organización, “es dar visibilidad a los lugares de memoria para homenajear a todas las personas que perdieron la vida de manera tan vil por el simple hecho de defender la democracia, incentivar la participación de los pueblos vecinos para compartir una historia común y, sobre todo, mantener viva memoria para no repetir aquellos sucesos tan cruentos que no deben repetirse”.

Como recordaron en sus palabras participantes en el emotivo acto, “fue un quince de mayo de 1939 cuando, en el cortijo de las Boticarias, convertido para la ocasión en campo de concentración, tuvo lugar el asesinato a sangre fría de docenas de vecinos de nuestra localidad y pueblos del entorno, junto con soldados y oficiales de la 109º Brigada Mixta del ejército de la República de España.
Fue también un quince de mayo, esta vez de 1978, cuando un grupo de familiares y vecinos regresó a Las Boticarias con el firme objetivo de recuperar los cuerpos y la dignidad de aquellos que encontraron en una oscura fosa del olivar su fatal destino. A veces, la caprichosa historia, entrelaza espacios, personas y hechos para generar un dramático bucle. El quince de mayo de 1939 y el quince de mayo 1978, son fechas unidas por un fino hilo invisible. Ese hilo nos señala el camino. Un camino destinado a que no olvidemos”.