Amadeu Benach: "La sentencia que permite la exhumación sienta un precedente que nos da esperanza".

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"La sentencia abre la caja de Pandora", dice Amadeu, que quiere recuperar el cuerpo de su abuelo Joan

Amadeu Benach Miquel, con la carta que recibió su abuela en la que se le informaba que Joan había sido trasladado al Valle de los Caídos. dt

 Publicado: 22:18 - 15/08/2016

Xavier Fernández | 

4.680 personas fallecidas en Tarragona durante la Guerra Civil yacen en el Valle de los Caídos. En la inmensa mayoría de loscasos fueron trasladados desde diversos municipios sin permiso de sus familiares, muchos de los cuales no sabían siquiera que el cuerpo de su familiar había sido enterrado en una fosa común hasta que el Régimen franquista les notificó que habían llevado el cuerpo al Valle de los Caídos. Es el caso de Joan Benach.

Nacido en Banyeres del Penedès en 1905, a Joan Benach Mercadé le tocó hacer el servicio militar en África. Tras combatir en la guerra colonial, regresó a casa en 1933. Fue llamado a filas a finales en noviembre de 1938, cuando la derrota republicana se antojaba inevitable. Falleció el 9 de enero de 1939 y fue enterrado en una fosa común al día siguiente. A su viuda, Matilde, sólo le dijeron que había muerto «defendiendo L’Espluga».

Matilde nunca supo donde estaba enterrado Joan. Hasta que a finales de 1960, Patrimonio Nacional le remitió una carta donde explicaba que Joan había sido enterrado en Vimbodí el 16 de enero de 1939 y trasladado al Valle de los Caídos el 28 de marzo de 1959. La familia –Matilde y Joan tuvieron dos hijos: Mercé y Amadeu– no visitó el lugar hasta años después. Eran payeses y un viaje tan largo no era sencillo en esa época. Finalmente, ya en época democrática, Amadeu y su hijo –también llamado Amadeu– colocaron flores y una Senyera ante la pared que albergaba el nicho con el cuerpo de su padre y abuelo.

Desde entonces, Amadeu Benach nieto sueña con recuperar el cuerpo de su abuelo. Para Amadeu, la reciente sentencia que permite la exhumación de los cadáveres de los hermanos Lapeña, «siente un precedente que nos da esperanza. Se ha abierto la caja de Pandora».

Amadeu consultará con su familia si se suma a los casos que ya ha abierto por el abogado Eduardo Ranz y que impulsa la Asociación por la Recuperación e Investigación Contra el Olvido (Arico). Quien ya está en la asociación es Joan Pinyol, nieto de Joan Colom, que falleció de fiebres tifoideas en el hospital militar de Lleida el 5 de marzo de 1939. Había sido llamado a filas en octubre de 1938, hecho prisionero en Vic por los franquistas y conducido a un campo de prisioneros en Lleida.

Pinyol se hizo ‘famoso’ por protagonizar el excelente documental de TV3 Avi, et trauré d’aquí!, que narra la incansable lucha de Joan por devolver los restos de su abuelo a casa. Para Pinyol, la sentencia sobre los hermanos Lapeña «es positiva. Ya hace años que reclamamos un poco de sentido común».