Memoria Histórica de Burgos inicia una campaña de mecenazgo con la que pretende conseguir 14.000 euros
Un equipo científico, con Montero, Etxeberría y Fernández de Mata, comenzará a excavar en las fosas del Monte de Estépar a partir del 21 de julio
Al menos 300 civiles fueron asesinados y enterrados en la zona entre agosto y octubre de 1936. Se trata del principal lugar de exterminio de la provincia

Comparte »

Crowdfunding para recuperar a las víctimas de EstéparFosa común recuperada en Covanera, por la Coordinadora. BC
Las dificultades económicas propias de estos tiempos pero, fundamentalmente, la falta de ayudas institucionales han llevado a la Coordinadora por la Recuperación de la Memoria Histórica de Burgos ainiciar una campaña de ‘crowdfunding’ o mecenazago, con la que recaudar los fondos necesarios para poner en marcha una nueva excavación en busca de las víctimas de la Guerra Civil. La actuación, para la que se requiere de como mínimo 14.000 euros, se llevará a cabo en los Montes de Estépar, el principal lugar de “exterminio” durante los primeros meses de la contienda, con alrededor de 300 civiles ejecutados.
“Se trata de devolver la dignidad a quienes fueron impunemente asesinados y su memoria silenciada”
Un equipo científico interdisciplinar, formado por arqueólogos, antropólogos forenses, antropólogos sociales e historiadores, comenzará a trabajar el próximo 21 de julio. Se dedicarán principalmente a la apertura de las diferentes fosas allí registradas y a la exhumación de los cadáveres que puedan encontrar, documentando todo el proceso. Posteriormente, se procederá a la identificación de los restos óseos, que tras los preceptivos análisis atropológicos, serán entregados a sus familiares, para que puedan darle una “sepultura digna”.
Desde la Coodinadora para la Recuperación de la Memoria Histórica de Burgos, insiste en la necesidad de llevar a cabo este tipo de iniciativas, cuyo objetivo es “cerrar las heridas que todavía hoy permanecen abiertas en muchos descendientes y, al mismo tiempo, devolver la dignidad a quienes fueron impunemente asesinados y su memoria silenciada”. Se trata de poner fin a un duelo de más de 80 años, de que los familiares de aquellos que fueron asesinado durante la Guerra Civil Española puedan recuperar sus restos y enterrarlos en un cementerio, si así lo desean, a fin de que pueden honrarles como se merecen.
Lugar del horror
La documentación histórica que manejan desde la Coordinadora, combinada con toda la información procedente de fuentes orales (testigos directos o indirectos de los hechos), les permite asegurar que en el Monte de Estépar habrían sido asesinadas alrededor de 300 personas, enterradas posteriormente en diferentes fosas comunes. Los hechos se habrían producido entre principios de actos y mediados de octubre de 1936, recién iniciada la contienda. Las víctimas fueron, en muchos casos, miembros de partidos políticos u organizaciones sindicales afines a la Izquierda, pero también jornaleros, funcionarios, maestros, comerciantes o todo tipo de trabajadores simpatizantes de la República.
Se han recuperado otras fosas, como la de La Pedraja, con 104 restos. PCR
Se han recuperado otras fosas, como la de La Pedraja, con 104 restos. PCR
Todos civiles procedentes, no sólo de Burgos, sino también de otros puntos de la geografía española. En la mayor parte de los casos, los asesinados habían sido detenidos ilegalmente durante los primeros días de la guerra y encarcelados en Prisión Central de Burgos, aunque también hubo “paseos” en las localidades próximas a Estépar. Como fue habitual en este tipo de procesos, al os presos se les sacaba bajo pretexto de puesta en libertad, para ser entregados a piquetes falangistas y miembros de la Guardia Civil, que los trasladaban al Monte de Estépar y procedían a su ejecución. De ahí que se considere que este paraje es el principal lugar de “exterminio” en la provincia.
Cuando dentro de un mes comiencen las excavaciones será el momento de saber qué es lo que realmente se va a poder recuperar, dado que la zona ha sufrido diferente agresiones durante las últimas décadas, que habrían podido llevarse por delante un número importante de los restos enterrados. Primero, en el Monte de Estépar se instaló una cantera de grava, que pasó a convertirse en un vertedero ilegal de basuras, escombros y residuos orgánicos, según al Coordinadora. Ahora, se llevan a cabo las obras del Tren de Alta Velocidad (AVE) entre Venta de Baños-Burgos, que si bien no afecta directamente a la zona de excavación, sí que lo hacen indirectamente, como lugar de acumulación de tierra.
A esto hay que sumarle los cambios que estas y otro tipo de intervenciones han provocado en el paisaje, lo que dificulta aún más la identificación de los lugares exactos en los que se encuentran las fosas, localizadas a partir del recuerdo de testigos de los sucesos. Aún sí, la Coordinadora está convencida de que podrán recuperar restos importantes, puesto que en los trabajos previos realizados en años anteriores, fundamentalmente con prospecciones geo-físicas con geo-radar y sondeos arqueológicos, se ha podido comprobar la existencia de las fosas con restos humanos en su interior.

Crowdfunding

“La Coordinadora pide la restitución de la verdad,  la justicia y la reparación, tres derechos básicos que asisten a toda víctima”
Desde la Coordinadora para la Recuperación de la Memoria Histórica de Burgos lamentan, por una parte, que las administraciones no hagan nada para intentar proteger espacios como el Monte de Estépar, en los que se localizan fosas de asesinaros y represaliados de la Guerra Civil y el Franquismo. Por otra, la falta de medidas encaminadas a facilitar la recuperación e identificación de los restos humanos, a fin de poder devolvérselos a las familias. De ahí la campaña de ‘crowdfunding’ o mecenazgo que, en colaboración con Espacio Tangente, se ha puesto en  marcha.
El objetivo es conseguir 14.000 euros, el mínimo necesario para poder llevar a cabo los trabajos. Con ese dinero se pretenden cubrir los gastos derivados de la estancia y manutención del equipo científico, así como la logística necesaria para realizar este tipo de intervención con las mayores garantías posibles. En ningún caso los especialistas y miembros de ese equipo van a recibir retribución alguna, puesto que su trabajo es una colaboración voluntaria y desinteresada. El equipo estará dirigido por el arqueólogo Juan Montero, de la Coordinadora, el antropólogo forense Francisco Etxeberría, de la Sociedad de Ciencias Aranzadi, y el antropólogo social Ignacio Fernández de Mata, de la Universidad de Burgos.