“¿Podría decirme alguien dónde enterraron a mi abuelo Manuel Barrios?”

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MARÍA SERRANO / 30 Jun 2016

Manuel Barrios Jiménez.

Rocío Cuenca Barrios es una de las cientos de miles de víctimas del franquismo que ha vivido prácticamente toda su vida sin información. Residente en San Miguel de Tucumán (Argentina), Rocío necesitaba conocer la verdad, ahondar en la historia de su abuelo, Manuel Barrios Jiménez, maestro, secretario de la Agrupación Socialista de Sevilla y diputado durante la legislatura del Frente Popular. Manuel sería fusilado el 10 de agosto de 1936 junto al padre de la patria andaluza, Blas Infante, y arrojado a una fosa común del cementerio de San Fernando de Sevilla.

Paradójicamente, la falta de cargos imputables provocó que el régimen franquista paralizara el proceso abierto a Manuel Barrios Jiménez después de su asesinato. El 14 de enero de 1944 la Comisión Liquidadora de Responsabilidades Políticas decretó el sobreseimiento “sin declaración por ahora de responsabilidades políticas”, al ignorarse su domicilio “así como la persona o entidad denunciante, lo que hace imposible la práctica de las diligencias pertinentes”.

La página web Todos Los Nombres, que recoge datos de más de 83.640 víctimas del régimen de Franco, conoció la historia de Rocío a través de un correo electrónico. Cecilio Gordillo, coordinador de la web, relata a andalucesdiario.es que “cada día recibimos entre cinco y seis peticiones de búsqueda de información por parte de familiares que no saben a dónde dirigirse”, ya que la mayoría de ellos se ven perdidos por la falta de respuesta de la Administración.

CARTA DESDE ARGENTINA

Rocío escribió con angustia el pasado 21 de junio su llegada al otro continente en pleno posguerra. “Vivo en Argentina, país al que mi madre llegó en agosto de 1947 escapando del hambre y la persecución del Gobierno franquista, pues aquí se encontraba ya establecida una tía materna, Dolores Jiménez de Riego. Llegó con mi abuela, Patrocinio Jiménez de Barrios, y con la menor de sus hermanas, María Josefa”.

Poco conocía la nieta de Manuel Barrios de la importante labor y actividad de su abuelo. La distancia, al otro lado del charco, y las ansias de olvido no le habían permitido conocer con detalle, ni por su madre ni por su abuela, que Manuel Barrios Jiménez fue un destacado dirigente del republicanismo y, posteriormente, del socialismo sevillano, ya que “desde 1905 Manuel Barrios fue uno de los organizadores de la Juventud Republicana de Sevilla, figurando desde 1910 como directivo del Centro Republicano de Écija”, tal y como destaca la microbiografía, alojada en Todos los Nombres.

Manuel Barrios atesoró en la capital una importante actividad política que le permitió, en febrero de 1936 como secretario de la Agrupación Provincial socialista, figurar en las listas del Frente Popular en la provincia.

Con la llegada del golpe en julio de 1936, Barrios Jiménez fue detenido y encarcelado durante tres semanas. Sería asesinado en una “saca de lujo”, junto a Blas Infante y el excalde Fernández de la Bandera en el kilómetro 4 en la carretera de Carmona. Le quedaban pocos días para cumplir 54 años.

SIN CONOCER EL LUGAR DE LA FOSA

Roció Cuenca detalla en su carta que “la familia desconoce cuál es la fosa común en la que suponemos fue enterrado mi abuelo, tal vez la que se encuentra en el camino de Carmona, allí en Sevilla”.

Cuenca ha sido informada por el grupo de historiadores que coordina la web Todos los Nombres que su abuelo se encuentra en una de las siete fosas del cementerio de San Fernando de Sevilla. Las investigaciones de José Díaz Arriaza en su reciente trabajo ‘Ni localizados, ni olvidados’ le ha permitido conocer a Rocío que su abuelo Manuel se encontraría en la fosa conocida como “Pico Reja”.

Rocío ha conocido también cómo su abuelo fue procesado por el Tribunal Especial para la Represión de la Masonería y el Comunismo, durante la posguerra, instruyéndosele la causa número 27978/27869, en el momento del éxodo de su familia hacia Argentina.