MEMORIA HISTÓRICA | En Córdoba
Foto y vídeo: Madero Cubero
- La hija de un fusilado le pide ayuda para encontrar los restos de su padre
- Los restos de Anselmo Gómez se encuentran en Córdoba, en una fosa común
Guillermina Gómez Angulo es sevillana, tiene 75 años y lleva toda su vida buscando los restos de su padre, que fue fusilado a comienzos de la Guerra Civil. En ese entonces, Guillermina aún se encontraba en el vientre de su madre y no nacería hasta seis meses después de la muerte de su padre.
Desde que tiene uso de razón, recuerda su empeño en buscar alguna pista sobre el paradero de los restos mortales de Anselmo Gómez Bermúdez, un socialista de Posadas y su progenitor. Según le contaron, un día se lo llevaron a la prisión de Córdoba y en uno de los traslados lo fusilaron dentro de un camión.
La única pista que tiene es que los restos de su padre se encuentran en algún cementerio de Córdoba, aunque dar con ellos es prácticamente imposible, ya que las fosas comunes de los Cementerios de la Salud y de San Rafael suman más de 4000 cuerpos no identificados. Guillermina sabe que uno de ellos es su padre.
Los familiares de Anselmo denunciaron que ni los juzgados de Posadas y ni los de Córdoba han respondido la solicitud para poder acceder a los documentos que podrían aclarar dónde se encuentran los restos mortales del desaparecido. Por ello, su hija no ha tenido más remedio que acudir hasta el Parlamento Europeo en Bruselas.
Los eurodiputados que forman la comisión de Peticiones de la Eurocámara respaldaron "por unanimidad" seguir este caso y hacer"todo lo que esté en su competencia ante las autoridades españolas" para pedir que se cumplan los deberes de una autoridad democrática.
Guillermina recuerda emocionada su intervención en la sesión parlamentaria de la que dijo salir "contentísima" porque, por primera vez, "vi que se le hacía justicia a mi padre".
Su hija y nieta de Anselmo Gómez, que también participó en la exposición del caso, exigió la intervención de la Comisión Europea en base a lo dispuesto en la Carta Europea de Derechos Fundamentales que garantiza "el trato leal" de los datos de carácter legal y contempla el derecho de toda persona a "acceder a los datos recogidos que la conciernan". Varios eurodiputados españoles tomaron la palabra para expresar su apoyo al a petición de los familiares del desaparecido.
Recién llegada de Bruselas y antes de partir hacia Sevilla, Guillermina ha decidido parar en el Cementerio de la Salud de Córdoba para visitar el Monumento en homenaje a las víctimas del franquismo. El nombre de su padre se encuentra inscrito en él. Allí ha depositado un ramo de rosas rojas. Ahora, sólo espera poder encontrar los restos mortales de su progenitor para llevarle las flores a su tumba.
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