dissabte, 26 de desembre del 2015

La memoria histórica recupera el apoyo de la Diputación de Cáceres tras el parón del PP.


http://www.eldiario.es/eldiarioex/politica/historica-recupera-Diputacion-Caceres-PP_0_466853501.html



La institución provincial incluye de nuevo en sus presupuestos una partida para continuar con el proyecto que promueven la Junta y la Universidad de Extremadura
A lo largo de estos años el proyecto ha promovido tesis doctorales sobre la Guerra Civil y la Dictadura y ha realizado decenas de exhumaciones, con cerca de 400 restos de personas represaliadas
El equipo de gobierno de Laureano León (PP) alegó motivos económicos para retirar su apoyo económico, aunque la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica de Extremadura no tiene dudas de que fueron motivos “políticos”

Maestras de la II República / PSOE Cáceres
Maestras de la II República / PSOE Cáceres
Se incorpora de nuevo al proyecto que promueve la investigación de la Guerra Civil y la represión de la dictadura franquista. También la apertura de fosas comunes de personas represaliadas. El proyecto de recuperación de la memoria histórica de la Junta y la Universidad de Extremadura suma de nuevo el apoyo de la Diputación de Cáceres.
Un apoyo que se vio interrumpido bajo el equipo de gobierno del PP cuando presidía la corporación provincial Laureano León, y que ha sido restituido, tal como queda constancia en los presupuestos de la diputación para 2016.
En diciembre de 2009 se firmó el último convenio al que se sumó la Diputación de Cáceres, junto con la Consejería de Cultura y Turismo de la Junta de Extremadura, la Diputación Provincial de Badajoz y la Universidad de Extremadura.
Fue un proyecto de investigación en vigor entre los años 2010 y 2013 con una aportación en total  de 476.000 euros a la Universidad de Extremadura, que asumía la labor de investigación de la “Memoria Histórica en el siglo XX en Extremadura”.
Como resultado dee ste trabajo se realizaron tesis doctorales presentadas en la Universidad de Extremadura, se efectuaron más de setenta exhumaciones con cerca de cuatrocientos restos encontrados y atendido a más de dos centenares de peticiones de familiares interesados en indagar en esta materia. 
A ello se sumó la digitalizaron documentos de archivos nacionales, se realizaron encuentros científicos y se editaron publicaciones y documentales sobre el contenido del convenio. Unos años en los que se continuó atendiendo todas las peticiones de extremeños que querían tener noticias sobre sus familiares desaparecidos a consecuencia de la guerra civil de 1936-1939.
Retiró su aportación
La Diputación de Cáceres debía aportar con el Convenio 2010-2013 20.000 euros por año, o lo que es lo mismo 80.000 euros. Con la presidencia de Laureano León, pagó lo comprometido de 2012 y 2013 y se desligó. Explica la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica de Extremadura que en 2014 y 2015 la institución provincial cacereña ya no participó en el nuevo y  último Convenio.
En cambio la Diputación de Badajoz, siguió colaborando y aportando la cantidad de 38.000 euros en las dos anualidades 2014 y 2015 distribuidas en 19.000 cada una.
En virtud del presente convenio, la Consejería de Educación y Cultura y la Diputación de Badajoz, aportan una cantidad de 196.000 euros que se desglosan del siguiente modo: La Consejería de Educación y Cultura: 158.000 € y la Diputación de Badajoz, aporta la cantidad de 38.000 € en las dos anualidades 2014 y 2015 distribuidas en 19.000 € cada anualidad.
El presidente de la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica, José Manuel Corbacho, celebra que de nuevo la diputación de Cáceres --ahora bajo el gobierno del PSOE-- se sume al proyecto. Aunque el PP alegó disponibilidad presupuestaria para retirarse, este colectivo piensa que fue una decisión "política" clara que desatendía las demandas de los ciudadanos extremeños, “que aún ignoran el paradero de sus familiares, algunos aún en fosas comunes, aunque se disfrace con otras motivaciones”.
Señalaba la asociación que la diputación, al desligarse del proyecto en 2013, demostraba su “total insensibilidad y cruel desprecio por la creciente demanda social de información por parte de familiares que perdieron a algunos de sus miembros a causa de actos represivos durante la Guerra Civil y el Franquismo".